“Haremos una verdadera fiesta de dos horas, que marcará una recorrida por los grandes éxitos de toda nuestra carrera, de la mano de las canciones que seguramente la gente va a querer escuchar.” Con esas palabras, Barry Gibb, uno de los tres hermanos que componen Bee Gees, definió el show que presentarán el sábado en la cancha de Boca. En una ceremonia que incluyó ayer la entrega del disco de platino por las 100 mil copias vendidas por One night only, el álbum en vivo que refleja esta misma gira, los músicos pronosticaron que la tardía visita a la Argentina no será la última. “Los muchos argentinos que pasan por Miami, donde vivimos, influyeron para que viniéramos a Buenos Aires”, dijo Gibb.