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El ex defensor y ahora representante se hará
cargo de la dirección técnica de
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Por Gabriela Carchak  Como grandes amigos
y en clima de paz y armonía, Oscar Ruggeri y Fernando Miele anunciaron que el ex defensor
se hará cargo, interinamente, de la dirección técnica del plantel. Luego de notificar
oficialmente a los jugadores la nueva situación institucional, el presidente y el
flamante entrenador se sentaron frente a los medios para reconfirmar públicamente la
renuncia de Alfio Basile, el gran pesar que su partida les provoca y la asunción temporal
del ex jugador, ahora empresario, manager, director técnico ... y amigo de la casa.
Minutos antes de la conferencia, Rubén “Panadero” Díaz, ex ayudante de campo
de Basile, se despidió del plantel también en nombre del hasta ayer técnico de San
Lorenzo, porque, según aseguró, “al Coco no le gustan las despedidas”. Con
Basile no sólo dejó el puesto de trabajo el ayudante de campo: también se desvinculó
de la institución el fisiólogo y preparador físico Jorge Roig, quien enfatizó:
“Con Basile llegué y con Basile me voy”. Para acompañar a Ruggeri en la corta gestión estarán Roberto Mariani y Javier Rosemblat, director técnico y preparador físico de la reserva, respectivamente. El presidente Miele, en tanto, se jactó de su iniciativa en la convocatoria del ex jugador de la institución. “Lo llamé porque es un amigo –aseguró Miele– y además consulté el tema con los referentes del plantel.” El mandatario, que protagonizará los comicios del próximo 13 de diciembre, manifestó respecto del futuro que “por sí o por no, tomaré una decisión sobre su continuidad después de las elecciones”. En la conferencia de prensa, y como para dejar sentado que el plantel apoya la nueva medida, además de Ruggeri y el presidente se presentaron Néstor Gorosito y el arquero Oscar Passet, quien además de destacar la amistad que los une afirmó que “más allá de esa circunstancia somos conscientes de que él ahora es el técnico y nosotros tenemos que cumplir lo que nos va a mandar”. Ruggeri emitió una serie de conceptos para evitar el asedio periodístico y quitarse de encima algunos conflictos éticos. “Tengo bien claro que no puedo ser empresario o representante de jugadores y técnico”, aclaró el ex capitán de San Lorenzo previniendo especulaciones propias de realizar esas tareas combinadas, en tanto suplicaba que “vamos a esperar esta semanita. No me vuelvan loco. Y recién después decidiré mi futuro”. Ruggeri, que dirigirá al equipo frente a Newell’s Old Boys el próximo domingo y frente a Racing siete días después en el clásico que cerrará el Torneo Apertura, es el representante de cuatro jugadores del plantel santo: Damián Manusovich, Horacio Ameli, Raúl Estévez y Bernardo Romeo. Para cerrar una mañana movidita y llena de sentimentalismo, Ruggeri explicó que siente “algo muy especial por San Lorenzo, por el club, por su camiseta, por su gente. Nunca olvidaré que aquí me abrieron las puertas para jugar el Mundial (de 1994)”. A todos se les piantó un lagrimón.
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