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El arquero de Platense, Irusta, se había cansado de rechazar, dar rebotes, sacarla con una mano, usar el cuerpo como un imán, salvar la caída de su valla como habría dicho Fioravanti, pero el truco le duró 86 minutos. En la maraña de defensores, volantes defensivos, cuidadores de resultados y adoradores del cero-a-cero que había dispuesto su equipo entre él y al insistente, no siempre inteligente, casi nunca preciso, ataque de River, Irusta no vio el derechazo potente que Marcelo Escudero alcanzó a conectar, pisando la medialuna, tras un pase desde la derecha. La pelota se fue abriendo y cuando el arquero alcanzó a zambullirse para manotearla, ya tenía destino depredador. La victoria de River puede servir de espaldarazo anímico, pero sin duda será mínimo. Platense no fue rival, el único planteo que se le ocurrió a su técnico interino Raúl Grimoldi fue el del refugio (bien cerquita del arco propio) rezando para que Spontón acertara alguna. Saviola mostró que es un gran proyecto; Rambert se perdió un par de situaciones claras; a su turno todos los jugadores de Díaz probaron suerte contra el rebotero Irusta. Platense les dio trabajo hasta que Escudero la embocó. La Comisión Directiva tuvo tanto trabajo como el equipo. Primero, porque les aceptó la renuncia a los miembros disidentes del Consejo de Fútbol; luego aprobó los contratos de seis jugadores del plantel y más tarde determinó que el equipo jugara el martes un amistoso en La Rioja. Los aceptados alejamientos de César Traversone, Norberto Alvarez, Mario Israel y Ernesto Homsani dejaron al Consejo en manos del presidente, David Pintado; el vicepresidente, Alfredo Davicce; y el vice segundo, Jorge Arias. Alvarez quedó sin embargo al frente del Departamento de Fútbol Amateur, los otros se mantienen como vocales de la CD. Germán Burgos y Eduardo Berizzo ganarán en 1999 720.000 pesos. Los otros cuatro contratos avalados son los de Sebastián Rambert (525.000 pesos), Pedro Sarabia (325.000 pesos), Norberto Acosta (55.000) y José María Paz (30.000).
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