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 “La
blasfemia y la herejía se refieren, según la definición del diccionario, exclusivamente
a las injurias contra la Iglesia. A nosotros nos gustaría extender el significado a toda
forma de poder: el Estado, las fuerzas armadas, la política, los grupos económicos y
hasta el rock. No para hacer de esto un panfleto, sino para crear un hecho
artístico.” Con un espectáculo titulado Navidad hereje, el conjunto musical
Sometidos por Morgan y un grupo de reconocidos artistas plásticos celebrarán mañana, a
su impía manera, la llegada de Papá Noel. Apadrinados por el artista plástico León
Ferrari, los integrantes de Sometidos por Morgan montarán mañana, a partir de las 20, en
la capilla del Centro Cultural Recoleta, su “homenaje a los artistas blasfemos”,
un recital en el que presentarán su nuevo EP –titulado, sugestivamente, La autopsia
del Papa-. y que estará acompañado por una muestra de arbolitos de Navidad creados
especialmente para la ocasión por 17 artistas.No es la primera vez que Sometidos por Morgan mete la nariz en el mundo del arte. Desde hace cuatro años anima las fiestas de fin de año del Museo Nacional de Bellas Artes. Además, en 1996 presentó, también en el Recoleta –para la inauguración de la muestra “a:e,iuo”–, la performance “Sometidos por Morgan se casa con el Arte”, una boda con el artista y animador cultural Federico Klemm –quien personificó al Arte– que también incluyó cuadros e instalaciones. “Autoproclamarnos herejes o blasfemos sería una falta de respeto a los verdaderos herejes y blasfemos. Nuestra ‘Navidad hereje’ es un tributo a los artistas que hacen de la blasfemia un postulado ético y estético”, aclara Pablo Marchetti, cantante del grupo. “El punto de partida fue la canción ‘La autopsia del Papa’, que escribimos pensando, precisamente, en blasfemar –dice Marchetti–, tratando de adoptar este tipo de actitud y pensando en cómo actuaría un artista blasfemo. En esa época estábamos leyendo algún material sobre Ferrari y las expresiones más radicalizadas del Instituto Di Tella que derivaron en ‘Tucumán Arde’ o en las experiencias del 68. La canción está dedicada a León. Se la hicimos escuchar, le gustó y quedó la posibilidad de hacer algo con él. Sentimos una gran admiración por su obra y, fundamentalmente, por su actitud; nos parece absolutamente necesario para la cultura de un país que exista gente como León Ferrari, David Viñas u Osvaldo Bayer, todos de más de 70 años. Ellos hacen lo que ni siquiera los rockers supuestamente más revolucionarios logran: destruir la cultura desde el arte.” La lista de los artistas que sumaron sus obras a la “Navidad hereje” incluye a Elenio Pico, Sergio Langer, Miguel Rep, El Niño Rodríguez, Pablo Páez, Kuki Bensky, Jorge Altamira, Pedro Bekinschtein, Gabriela Forcadell, Mariano Grassi, Pablo Cabrera, Verónica Romano, Myriam Salto, Mariano Lucano, Hernán Salamanco, Pablo Ziccarello, Mariana Pellegrini y Cynthia Vietto. Habrá cuadros, objetos e instalaciones. “En un principio decidimos que el show girara sobre la idea de la herejía, pero no sabíamos cuál iba a ser la forma”, admite el cantante de Sometidos. “Hablamos con León, fuimos a la casa y nos mostró un montón de diapositivas con imágenes de obras blasfemas suyas y de otra gente grossa de todas las épocas, desde Rembrandt o Egon Schiele hasta contemporáneos como Pierre et Gilles o la Cicciolina. Le sugerimos que hiciera una selección para pasar durante el recital. Después le pedimos a Mariana Pellegrini un dibujo suyo (un árbol de Navidad hecho con una hoja de cannabis, una muestra de que la herejía puede aplicarse a distintos valores culturales) para usar como tarjeta navideña que también sirve como invitación para el show. Y de allí surgió la idea de convocar a artistas plásticos, con la consigna de que cada uno hiciera una obra que tuviera como tema el árbol de Navidad.” Sometidos por Morgan tiene un disco, publicado en 1995, titulado Ludomático. La autopsia del Papa es el título de su primer EP, editado de manera independiente, que estará en venta en el show del Recoleta.”Tuvimos algunos problemas de contrato con la compañía en la que estábamos. Estuvimos dos años tocando mucho, hasta que decidimos parar y grabar, tratando de darle otro sonido al grupo, con arreglos más complejos.” En la formación actual de la banda, una máquina de ritmos reemplazó la batería (y al baterista), y para este show sumaron como invitados un trompetista, un saxofonista y un vibrafonista. “Para nosotros blasfemar no significa subirse al escenario y ponerse a putear sin sentido. Blasfemar es opinar, pensar, cuestionar y cuestionarse. Es por eso que para estas fiestas proponemos sidra y pan dulce, pero también herejías. Ah, y cuidado con los cohetes”, concluye Marchetti.
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