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--¿Por qué razón busca la re-reelección de Menem a pesar de que él dice que no la quiere? --Nosotros creemos que el Presidente se ha transformado en una necesidad, son expresiones de deseo en las que coincidimos un grupo de compañeros, que creemos que en el justicialismo no tenemos un candidato mejor. Además, ante la necesidad de enfrentar la crisis económica internacional, la gente misma, mal que les pese a algunos, dice que Menem sería el mejor de los candidatos. No estoy hablando fanatizado ni mucho menos. No somos gurkas.
--¿Quién corre con los gastos del cotillón, la gama de productos que utilizan para la campaña? --Bueno, los elementos son los que clásicamente manda nuestro amigo Gostanian. El fabrica el cotillón a través de la ayuda de muchos empresarios del país.
--¿Quiénes son los empresarios que están pagando la re-reelección? --No tengo la más mínima idea. Tendría que hablar con Gostanian. --¿De qué manera piensa pedir la habilitación a Menem? --Estamos buscando el consenso de la gente, explicando el porqué de una necesidad, ya que lamentablemente ni el candidato de la oposición, ni los precandidatos justicialistas en los últimos diez años han aprovechado esa instancia como para tener un nivel de estadista necesario para asumir la presidencia de un país como Argentina. Desde el plano exterior, ni De la Rúa ni Duhalde tienen valor internacional, hoy absolutamente necesario e imprescindible para seguir en el camino de lo conquistado. --Pero no hay consenso político y las encuestas marcan que la imagen positiva de Menem es muy baja. --Aceptamos las realidades. Hoy sabemos que Menem no puede ser re-reelecto. Carlos Menem, independientemente de lo que dijo en el viaje a Estados Unidos, en el supuesto de que hubiese una habilitación judicial, no aceptaría ningún tipo de postulación si no estuviese seguro de ganar una elección, en consecuencia el consenso es un tema prioritario. --¿Cuál va a ser el camino que van a adoptar? --En un próximo congreso peronista, voy a proponer un plebiscito para los afiliados peronistas referido a la posibilidad de re-reelección. Estoy totalmente seguro de que vamos a ganar 70 a 30.
--Pero para concretar sus planteos necesitan una habilitación judicial... --Sí, porque el camino político y constitucional es imposible. Pero no veo imposible el camino judicial. La Corte será la que deba resolver, en el supuesto de que se llegue a ella. Lo que no se puede garantizar es lo que van a resolver los ministros de la Corte. Pero lo vamos a seguir intentando, vamos a aflojar cuando veamos que sea imposible. "Lo legal y lo legítimo"
Por A.H.M.
--¿Por qué insisten con la re-reelección de Menem? --La insistencia surge por un motivo central: es el mejor candidato que tenemos en el justicialismo y no estamos dispuestos a que se repita lo del '73: nuestro mejor candidato era el General Juan Domingo Perón y no le permitieron ir a elecciones a raíz de aquella reforma constitucional bajo el proceso de (Alejandro) Lanusse. Tuvo que ir (Héctor) Cámpora y esto provocó una natural crisis institucional. A los 52 días Cámpora tuvo que renunciar, porque el poder político estaba en Perón. En este caso se da algo similar; Menem tiene un fuerte poder político, es el conductor del Movimiento Nacional Justicialista y además desde el punto de vista del derecho nacional e internacional, la cláusula novena no resiste el menor análisis. --De acuerdo a lo que usted dice, el candidato justicialista que surja va a ser el Cámpora de Menem. ¿Lo dice por Ortega o por Duhalde? --Lo digo por cualquiera. Nuestra democracia es adolescente y no estamos dispuestos a correr semejante riesgo. Pero esto se puede corregir muy fácilmente: que quienes no estén de acuerdo con Menem lo puedan expresar en las urnas. Nosotros lo que estamos haciendo es procurar que Menem sea candidato en el '99 y que la ciudadanía se exprese. --¿Qué camino tomarán para lograr la habilitación para Menem? --Creo que ésto necesita una interpretación de la Corte, que además la propia Constitución lo indica: cuando hay distintas interpretaciones jurídicas con respecto a una cláusula constitucional el único arbitro es la Suprema Corte. Algunos compañeros planten usar una presión política, ya que esa presión está dada desde el momento que Menem conduce un movimiento de cuatro millones de afiliados. Y esos cuatro millones tienen el mismo derecho que los 17 millones restantes que votan en la Argentina. --Pero están rechazando lo que se aprobó en la reforma constitucional de 1994, que fue votada por el justicialismo. --Los pactos políticos pueden tener vigencia en un determinado momento
de la historia de un país y en otros pueden no reflejar la realidad política y social.
La realidad de hoy exige una nueva posibilidad de que el Presidente se presente como
candidato. Con este análisis empezamos a vislumbrar qué es lo legal y qué es lo
legítimo. Sin Menem las elecciones de este año van a ser legales pero no legítimas
porque el mejor candidato no se va a poder presentar. Y como dice mi amigo (Mariano)
Cavagna Martínez (ex miembro de la Corte Suprema): "todo lo que es legal y no es
legítimo termina transformándoos en ilegal". |
El ex
secretario de Lucha contra la drogadicción Alberto Lestelle estuvo ligado en un principio
al duhaldismo, aunque luego se convirtió en un ferviente menemista. Su nueva fidelidad al
Presidente llega al punto de reclamar un plebiscito para que los afiliados justicialistas
resuelvan sobre una nueva postulación de Menem. 
El ex
diputado nacional Roberto Fernández es un menemista de la primera hora e integra la
agrupación "Menem Conducción". Ex interventor del PJ riojano, se hizo famoso
por ser el autor de una de las presentaciones judiciales a favor de la re-re. Fernández
consideró que si en los comicios generales de este año no se puede presentar Menem van a
"ser ilegítimos".