Por Javier Lorca
La carrera de
Relaciones del Trabajo es cada vez más codiciada por los estudiantes que ingresan en la
UBA y en la Facultad de Ciencias Sociales empiezan a temer una explosión como la que
produjo Ciencias de la Comunicación en los 90. La cantidad de alumnos de Relaciones del
Trabajo creció más del 300 por ciento en los últimos cinco años, mientras la
matrícula global de la universidad porteña no llegó a aumentar un veinte por ciento en
el mismo período. "Tanto el trabajo como el desempleo están muy presentes como
temas centrales y de conflicto en todos los niveles de la sociedad. La misma palabra trabajo
es un convocante del interés de la gente", explicó, en diálogo con Página/12,
Graciela Mattia, coordinadora de la carrera que, actualmente, cuenta con casi 1500
alumnos. Sin contar a los otros 1018 que acaban de anotarse en el CBC para llegar a la
facultad en el 2000. "Varios factores pueden influir en el
crecimiento de la matrícula de Relaciones del Trabajo. Por un lado, puede que haya
crecido la oferta laboral para los egresados, aunque no hay indicadores de que sea así.
Y, por otro lado, la facilidad para ingresar es mayor que en las disciplinas
tradicionales, donde el CBC funciona como un filtro. Y la carrera no exige una dedicación
full-time", argumentó Julio Testa, profesor de Sociología del Trabajo, una
materia introductoria de la carrera. "Además, es claro que las relaciones laborales
se han vuelto más importantes en un contexto social caracterizado por la precarización
del empleo", agregó.
Cuando se creó en 1978, Relaciones del Trabajo se dictaba en la
Facultad de Derecho y sólo cosechaba el interés de algunos. Pero, tras su temprana
historia, las cosas han cambiado un poco: ya tiene la chapa de licenciatura (ahora va en
busca de la matrícula propia); ya no se codea con carreras como Abogacía o Traductorado,
sino que desde el '88 comparte pasillos con otras como Sociología o Ciencia Política; y
ya empieza a sentir los rigores de la masividad: en 1993, sólo 460 alumnos se sentaban en
sus aulas; hoy la cifra se estiró hasta un total de 1482. Y, para el año que viene se
prevé que se habrá duplicado la cantidad. "Siempre fuimos una carrera pequeña y
muy personalizada. Pero ahora no tenemos espacio para afrontar el aumento de los alumnos.
Por eso, estamos trabajando en enero, para ver qué carrera nos puede prestar algún
aula", advirtió Mattia.
La idea que hace veinte años dio origen a Relaciones del Trabajo fue
capacitar principalmente a dirigentes sindicales, para mediar y controlar los conflictos
de intereses entre el capital y el trabajador. "Pero hoy, con la flexibilización
laboral y sin el sistema de asistencia social que habían logrado las luchas sindicales,
ya casi nadie se desempeña en el área propiamente dicha de las relaciones del trabajo.
Los graduados están en las oficinas de personal y de recursos humanos", comentó
Testa, que dirigió una investigación acerca de la inserción laboral de alumnos y
egresados.
Según el actual plan de la carrera --que supone 27 materias y una
duración de cinco años--, los objetos de estudio son las relaciones existentes entre
trabajadores, empleadores, gremios, empresas privadas y sector público; además de las
variables sociales, económicas y culturales que inciden en el mundo del trabajo. "Es
una carrera multidisciplinaria en serio --se vanagloria la coordinadora--: hay materias de
Derecho, de Administración de Empresas y de Sociología. Y las dictan los mismos docentes
que enseñan en esas carreras." A la hora de buscar empleo, la demanda suele provenir
de las empresas privadas y, en menor medida, de los gremios y el sector público. El
Ministerio de Trabajo, al igual que varias firmas privadas, tiene un convenio de
pasantías para los futuros licenciados.
El perfil de los alumnos también sufrió el paso del tiempo.
"Hasta hace unos años, los estudiantes de la carrera eran personas adultas, que
venían a legitimar y profundizar los conocimientos que ya tenían. Todos estaban
trabajando en el área de recursos humanos de alguna empresa y traían una experiencia
importante --cuenta Mattia--. Ahora, el perfil cambió notablemente. Hay muchos jóvenes
que, en su mayoría, tienen muy claro lo que quieren: insertarse en el mercado de
trabajo." Para Testa, el rasgo es distintivo: "Mientras en la elección de los
estudiantes de las demás carreras de la Facultad de Ciencias Sociales predominan factores
políticos y de interés personal, entre mis alumnos el principal interés es
laboral".
Los que más progresan
"Los graduados de Relaciones del Trabajo son, entre todos los
egresados de la Facultad de Ciencias Sociales (UBA), los que mayor progreso logran en sus
empleos --aseguró, en diálogo con Página/12, el sociólogo Julio Testa, director
del Laboratorio de Análisis Ocupacional de esa unidad académica--. Aún mientras están
cursando, logran incorporar los conocimientos y mejorar sus posiciones jerárquicas."
Una minuciosa investigación realizada entre quienes egresaron a fines de 1998 demostró
la importante "cultura laboral" de los estudiantes de Relaciones del Trabajo.
Según el informe, seis de cada diez alumnos, cuando ingresaron en la
carrera, realizaban actividades laborales afines a sus estudios. Y, después de graduarse,
el 95 por ciento trabajaba y el 80 por ciento lo hacía en puestos vinculados o afines con
sus incumbencias profesionales. Pero el progreso no fue sólo cuantitativo. Al empezar a
estudiar, el 40 por ciento ya desempeñaba funciones directivas y, cuando egresaron, la
tasa se había extendido hasta el 60 por ciento. El informe añade que, sin tener en
cuenta la jerarquía de los empleos, nueve de cada diez estudiantes reciben su diploma con
una importante trayectoria laboral en sus espaldas. No obstante, las buenas noticias no
son para todos. Al empezar a estudiar, el 20 por ciento de los alumnos varones cumplía
funciones directivas en sus empleos, mientras que sólo lo hacía el 7 por ciento de las
mujeres. Y, lejos de variar, la proporción se mantuvo estable después de lograr la
licenciatura. |
Para el tiempo libre....(si queda) |
Psicología.
Del 1º de febrero al 31 de marzo estará abierta la inscripción para las carreras
interdisciplinarias de especialización que dicta la Dirección de Posgrado de la Facultad
de Psicología (UBA): Neurología clínica, Violencia familiar y Neuropsicología
clínica. Informes: H. Yrigoyen 3242, piso 1º, aula 10, Tel. 957-1210 o 931-6900/9026,
int. 156.
Ciencia. Del 25 al 27 de marzo se
realizará en Granada el congreso "Comunicar la ciencia en el siglo XXI",
organizado por la Unesco. Inscripción: hasta el 1º de febrero en la Secretaría del
Congreso, Parque de las Ciencias, Av. del Mediterráneo (18006), Granada, España, Tel.
958-133870, e-mail: cpciencias@parqueciencias.com.
Residencias. Durante febrero y marzo
se realizarán los cursos de apoyo para el examen de Concurrencias y Residencias
Hospitalarias sobre psicología, basadas en la bibliografía seleccionada por la
Dirección de Capacitación del gobierno porteño. Informes: Secretaría de Extensión de
la Facultad de Psicología (UBA), H. Yrigoyen 3242, piso 3º, Tel. 931-6900.
Arte. La Escuela Nacional de Artes
"Prilidiano Pueyrredón" organiza cursos de Pintura, Dibujo y
Transdisciplinariedad y análisis de obra, y seminarios sobre "Instalaciones y
producción, multimedia" y "De las palabras en libertad a la imagen
electrónica". Está abierta la inscripción en Av. Las Heras 1749, Tel. 812-6787.
Becas. El 1º de febrero abre el
concurso para participar de las Becas Master y del Programa de Investigación de la
Comisión Fulbright. Informes e inscripción: Viamonte 1653, 2º piso, Tel. 811-1494 o
814-3561/2.
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