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Por Pablo Ferreira Hay que poner de inmediato reintegros impositivos para mejorar la competitividad de las exportaciones, darles financiamiento a tasas internacionales y establecer un arancel transitorio a las importaciones para impedir una inundación de productos brasileños. Estas propuestas, surgidas tras el fracaso de la misión negociadora del gobierno del lunes último en Brasil, fueron expuestas ayer por Carlos Chacho Alvarez, candidato a vicepresidente de la Alianza y por el economista Pablo Gerchunoff. En una conferencia de prensa convocada por la tarde los referentes de la oposición, además de criticar duramente la estrategia de Roque Fernández, insistieron en rechazar la idea oficial de dolarizar la economía. Así mismo, Alvarez y Gerchunoff pidieron la renuncia del titular del Banco Central, Pedro Pou, a quien acusan de violar los deberes de funcionario público (ver página 3). Lo que estamos proponiendo aseguró Alvarez es el cuidado de las empresas, la producción y el empleo en Argentina tal como están haciendo los brasileños a través de las devaluaciones. Alvarez explicó que Brasil modificó su tipo de cambio para defender su competitividad ante la crisis de su balanza comercial. Este país se ha caracterizado en los últimos años por su agresiva política en materia de exportaciones. En tanto, Gerchunoff señaló que estas iniciativas son imprescindible en el régimen monetario que tenemos. En su opinión debemos aumentar la competitividad de la economía con medidas de reducción de costos, medidas fiscales e incentivos a la productividad. Esos son los instrumentos que tenemos y son los que deben ser usados, sentenció. Respecto de los reintegros impositivos a las exportaciones aclaró sería una medida generalizada salvo para commodities muy básicos. El investigador del Instituto Di Tella aclaró que aún es materia de discusión si, por ejemplo, el petróleo y el trigo tienen que incluirse o no. Alvarez, por su lado, destacó que está claro que esta medida está vinculada sobre todo con las producciones regionales que van a sufrir mucho. A propósito recordó que varias provincias son muy brasildependientes. Las otras propuestas, básicamente presentadas como lineamientos generales, Gerchunoff explicó a Página/12 la necesidad de adoptar ya mecanismos más robustos vía el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) al financiamiento de exportaciones a tasas internacionales. También dijo que hay que explorar la posibilidad de un arancel transitorio e improrrogable (por 180 días) para impedir una inundación de productos brasileños. Mientras el tipo de cambio esté tan arriba nos pueden inundar de productos y eso puede llegar a ser una situación sostenible. Por eso debemos protegernos del daño que esa situación puede causar. Es obvio que hay una estrategia integralmente equivocada, gatilló Gerchunoff aludiendo a la fracasada estrategia del gobierno llevada adelante por Alieto Guadagni, secretario de Industria, y por el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Jorge Campbel. La jugada incluía pedir que se redujeran los reintegros impositivos intrazona de Brasil, y presentar la propuesta local de dolarización. Pero a criterio de lo aliancistas debería haber adoptado antes de las conversaciones las medidas ahora propuestas de modo de poder negociar desde una posición de fuerza.
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