|
|
|
|
|
|
|
|
|
Por Facundo Martínez  ¿Cómo está Racing?–¿Cómo está... en qué sentido? –Bueno... con tantas cosas que se dicen. –Se dicen... pero mirá: el periodismo argentino está entrando rápidamente en la debacle del periodismo norteamericano. Los conservadores lo quieren voltear a Clinton y Clinton está cada vez mejor en las encuestas. Lo mismo pasa con Racing. El periodismo lo quiere voltear a Racing y Racing cada día está mejor. –Pero esta semana puede desaparecer si el juez Gorostegui lo determina. –Racing va a salir de su quiebra porque tengo cuatro o cinco variantes para ello, tiene y va a tener un equipo competitivo. Vamos a pagar solamente lo que tenemos que pagar, pero vamos a conseguir importantes descuentos. –¿Cómo llegó Racing a esta situación? –Cuando llegamos al club había una deuda majestuosa, de la que realmente no teníamos idea sobre su origen. Como todavía seguimos sin tener mucha idea de deudas que quedaron por ahí. –Se lo califica como el presidente residual de Racing. ¿Qué significa eso? –No, ésa es una boludez que dicen para tratar de ofenderme. Mirá: yo me cago de risa, me recago de risa de todos los periodistas... Yo me divierto, creen que el periodismo es polemizar. Todos los días te tiran un cadáver en la puerta para poder vender. Y en el fútbol es igual. Lo único que se busca es el quilombo. Por ejemplo inventan eso de que soy “patológico”, y yo los cago porque les subo la apuesta. Les digo que soy “un tránsfuga de palabra”, les subo la apuesta y les gano. Ahora hablo con vos, y yo dije que hasta el 30 de marzo no iba a hablar con nadie. –¿Entonces por qué me da la nota? –Porque es Página/12 y ahí tengo un amigo. Entonces hablo y hablo cuando se me canta el culo a mí. –Bueno, ¿con qué plata va a pagar el pase y el seguro de Mariano Juan? –Yo le dije al Ajax que lo contraten ellos que yo le pago la prima. Los clubes argentinos tienen que pasar a un sistema, a Página/12 la palabra no le va a gustar, más capitalista. ¿Por qué?, porque no hay plata para comprar jugadores y los ingresos apenas alcanzan para pagar los egresos. Es como dice David Pintado, si comprás es porque vendiste, si no, no podés. Acá tenemos que buscar inversores, pero sin seguro es un quilombo. –Está bien, pero ¿de dónde va a sacar Racing la plata para pagar el préstamo? –Los 50 mil del préstamo los voy a donar yo. –¿De su bolsillo? –No, le pedí un préstamo a un amigo mío. Por otro lado, estoy averiguando sobre una compañía de seguros inglesa para arreglar un sistema... –¿La misma compañía que aseguró los premios de Boca? –Boca hizo un seguro de premios, que es el mismo que yo voy a hacer con Racing ahora. Eso lo voy a hacer yo, no la sindicatura. Yo voy a pagar la prima porque les prometí a los jugadores 500 mil dólares de premios adicionales. Entonces, de mi plata voy a pagar la prima del seguro. El premio total va a ser de 1,5 millones. Lo que quiero decir es que hay criterios capitalistas que vamos a tener que aplicar al fútbol porque el fútbol se está moviendo hacia el capitalismo. Fijate la asociación mediática, es terrible. Todo lo que circunda al fútbol es guita y negocios. –¿Está de acuerdo con el proyecto de las Sociedades Anónimas Deportivas que impulsó Granillo Ocampo? –No, porque te pongo Peter Drucker, que es el gurú del management que asesora entidades sin fines de lucro y es lo mismo. Lo que nosotros necesitamos es un buen management. Los clubes pueden ser sociedades sin fines de lucro, pero lo que no pueden dejar de tener es un buen management, con un buen criterio económico financiero para poder pelear los ingresos, para bajar los gastos, para hacer acuerdos. –¿Los viejos dirigentes están caducos? –Sí, lamentablemente el mundo los pasó por encima. Yo tuve que enfrentarme con los grandes oligopolios y con los monopolios, como es el Grupo Clarín, porque están pagándole al fútbol una miseria. Ahora estamos logrando mejoras, junto con Julio Grondona, trabajando codo a codo con él, porque a nosotros nos pagan muy poco en relación con lo que pagan los cables en el resto del mundo. Esto es un problema. Los clubes tienen que luchar, sin experiencia, contra oligopolios. Ellos sí saben cómo hacer las cosas. Lo que queremos es llegar a una cifra alrededor de 80 palos. –¿Está solo en esta lucha? –No, no, no... –¿Macri está con usted? –Mauricio es ambivalente. De pronto está, de golpe no está... Bueno, como él es Mauricio Macri, de golpe se reúne con Magnetto (vicepresidente del Grupo Clarín), se reúne con Monetta (titular del CEI), pero no lo hace con otros presidentes de los clubes. Se reúne él, entonces yo no sé si lo hace para sacar guita para Boca o si lo hace para todos los clubes. Lo que está claro es que Raúl Gámez, Héctor Grondona y yo nos reunimos para sacar guita para todos los clubes. –¿La AFA lo apoya? –Julio Grondona está al tanto de todos los movimientos que yo hago, esté de acuerdo o no. Yo lo hago por todos los clubes, y ésa es mi ventaja. Si hubiese querido, podía haber arreglado, podía haber armado todo este quilombo y después ir y pedir que por abajo me tiraran unos manguitos. Pero estoy peleando 50 millones más por año, que en los 16 años que hay de contrato es mucha plata. ¿Te imaginás? –¿Cómo se lleva con la sindicatura, siendo uno de los principales acreedores del club? –A veces bien y a veces mal, depende de que la sindicatura se ajuste o no a derecho. La (síndico Liliana) Ripoll se tendría que empolvar menos, salir menos por televisión y dedicarse más a sus funciones, a las que se dedica bastante poco. Si le gusta salir por los medios, que no es la función de la síndico. La síndico, si estuviera en la quiebra de un sanatorio, no le puede decir al cirujano cómo tiene que operar a un paciente. Creo que un poco entiende, lo que pasa es que las luces del centro enceguecen. –¿A usted no? –Yo soy de Lanús. ¿Vos me viste alguna vez en la fotitos del jet set? –¿Cómo está legitimado para usted su poder sobre Racing? –Con el voto, a mí me votó la gente. Después yo puse mucha plata en Racing porque a mí me da satisfacción, pero la quiero recuperar toda. Sin interés, pero hasta el último centavo. Y lo voy a sacar campeón. Es una boludez lo que te digo... Vas a decir mirá este hijo de puta lo que dice, pero la realidad es que yo estoy haciendo esto para darle a Racing una alegría, la misma que me dio a mí en el ‘66. Después me las tomo. –¿Usted utiliza al club como un trampolín? –Yo soy peronista. De los peores, porque me hice peronista porque quise. Peronista por convicción por haber leído y por haber estudiado a Perón. No necesito de Racing para hacer política. Siempre hice política. Soy un homo politicus. Y voy a participar de la interna del Partido Justicialista. –¿Con Duhalde? –Sí, Duhalde-Palito y Reutemann en Santa Fe. –¿Qué piensa de la Alianza? –Yo me cago de risa de la Meijide y creo que el Chacho es un genio político. Al final él va a jugar con los peronistas como corresponde. El Chacho es el caballo de Troya del peronismo en la Alianza. La vieja Meijide no tiene la más puta idea de cómo se gobierna. Yo estoy haciendo política en este momento. ¿Te das cuenta? –¿No está de acuerdo con la re-reelección? –No, creo que es un disparate. El turco (presidente Carlos Menem) va a quedar en la historia porque sacó a la Argentina de la crisis alfonsinista. Como dice Dolina: el olvido es una de las peores cosas que hay. Y yo le tengo miedo al olvido. El problema del turco es que está rodeado de un cholulismo que le hace mal y que molesta a la gente. Yo tengo guita, pero no molesto a la gente. Ando por la calle, soy un reo. Se me nota que nací en Lanús. –Así como pone plata en Racing, ¿la pondría para un gobierno peronista? –No, porque ahí entramos en otro tema. Yo puse la guita en Racing, primero porque la tenía, segundo porque la pienso recuperar, y tercero porque Racing me dio alegrías y bien valía la pena gastarse unos mangos para volver a vivir esa alegría. –¿Se puede saber cuánta plata puso en Racing y cuánta plata le queda? –Sí, hasta el último peso, boludo... Pero no quiero decirla porque para la gente que gana 400 mangos es muchísima plata, un paquete de guita inalcanzable. Pero para los dueños de la guita es un vuelto. Esa es la diferencia, lo mío es un vueltito. –¿Y para usted? –No, no, yo me morí. Para mí fue todo. Y mis hijos ya saben: si no vuelve la guita esa, van a tener que laburar.
|
