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Por Cecilia Sosa La morosa reforma curricular de la UBA dio su segundo paso y llegó hasta la Facultad de Agronomía, que seguirá las huellas de la pionera Ciencias Económicas y aplicará, a partir de este año, la transformación consensuada por la comunidad académica allá por 1995. Los seis años de la carrera de Agronomía --el pivote de la facultad-- quedarán reducidos a cuatro y medio. El plan de estudios ya no incluirá el CBC y se dividirá en dos ciclos, uno general y otro profesional. Los cambios buscarán imprimir un nuevo perfil a los graduados: "Dejaremos de formar ingenieros agrónomos tranqueras adentro para educar profesionales que puedan integrarse de lleno en la gestión comercial y la producción de alimentos", afirma, en diálogo con Página/12, el decano Fernando Vilella, que ni aún durante enero abandonó su despacho. "Tenemos que poner todo en marcha", justifica. Como tercera pata de la reforma, en el 2000 se lanzará un amplio espectro de posgrados (todos pagos) dirigidos a intensificar la formación profesional de los egresados. Con esta batería de medidas, las autoridades ambicionan duplicar la cantidad de alumnos. "Tenemos capacidad para 4000 estudiantes y ahora sólo cursa la mitad", dice Vilella. La transformación del plan de estudios ya fue aprobada por el Consejo Superior de la UBA y, desde marzo próximo, los alumnos que ingresen en las carreras de Agronomía y de Veterinaria cursarán un primer año común (que reemplazará al viejo CBC) en el propio predio de la facultad, sobre la avenida San Martín al 4400. En tanto, los que ya aprobaron el ciclo básico en el '98, para pasar a segundo año tendrán que rendir una materia --Estadística-- y un curso complementario --de Física--. A la hora de los votos, el nuevo programa académico logró el apoyo de los claustros de docentes y graduados del consejo directivo de la facultad. El estudiantil, en cambio, prefirió abstenerse.
--¿Se eliminó el CBC? --No puedo decir eso pero, en realidad, es como si lo hubiéramos sacado. Vamos a tener un primer año en común con la carrera de Veterinaria, a la manera del ciclo básico específico creado para las carreras del área de la salud. Las materias serán casi las mismas que tenía el CBC y se sumará Estadística. La diferencia es que ahora, en la definición de los contenidos y en el dictado de las clases, participarán los docentes de la facultad. Porque si ellos no se insertan ahí, ¿qué hago?, ¿los tengo que echar? Además, Física, Química, Biología y Matemática sólo se dictarán en primer año y ya no en segundo, como se hacía antes. Así, la carrera pudo reducirse a cuatro años y medio, un año menos en los papeles y mucho menos en la práctica: los alumnos tardaban un promedio de siete años en recibirse. Todo esto no se logró eliminando contenidos, sino superposiciones. Y trabajando sobre un uso más eficiente del tiempo. Ahora esperamos que la carrera sea más atractiva.
--¿Qué otros ejes incluye la reforma? --Los cursos dejarán de ser cuatrimestrales y pasarán a ser módulos de entre dos y cuatro meses. También incorporamos talleres prácticos anuales, donde los profesores saldrán al campo para aportar a los estudiantes una perspectiva que integre teoría y práctica. En el último medio año de la carrera se darán cursos optativos --orientados a la elaboración de un trabajo final, requisito para obtener el título-- que sumarán créditos para quienes cursen los nuevos posgrados de especialización profesional. Estos posgrados estarán funcionando a pleno en el 2000 en áreas como gestión ambiental, producción y gestión empresarial. Además, este año se va a inaugurar una maestría en Agronegocios y Alimentos. Con todo esto, esperamos duplicar el número de nuestros alumnos.
--¿Qué le aportará el nuevo plan curricular a los graduados? --El graduado en Agronomía era muy "tranqueras adentro", un especialista en el campo, en las cosechas. Ahora, más importante que la producción en sí misma es saber qué pasa cuando el producto sale, cómo venderlo, a quién y cuándo. Por eso, abrimos el panorama para que los futuros ingenieros agrónomos puedan sumar una visión desde la gestión empresarial del campo y el procesamiento de alimentos. No tiene la misma rentabilidad vender lechuga en un cajón en el Mercado Central que en bolsitas con atmósfera controlada en la góndola de un supermercado. Todas estas instancias de la producción se incorporarán como perfiles diferentes del tronco común de la carrera.
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