OPINION
Hecha la ley...
Por Marta Maffei y Hugo Yaski * |
La
Junta Ejecutiva de CTERA cree necesario hacer pública su posición respecto de la
situación generada por el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Educativo y al
proyecto de reglamentación de la misma que circula en los últimos días por algunos
despachos oficiales y que agrega más elementos de conflicto a este ya controvertido tema.
En primer lugar el veto presidencial, inducido por la presión desde el Ministerio de
Economía, desnaturaliza esta norma legal y como única certidumbre surge que los docentes
no percibirán la tan anunciada mejora salarial ni en los montos ni en los tiempos
originalmente previstos.
En estas condiciones se hace imposible determinar la retribución que correspondería por
cargo docente, ni el monto de los recursos a asignar a cada jurisdicción, en la medida en
que el gobierno nacional se mantenga en la tesitura de no hacerse cargo de asegurar lo que
la norma establece claramente en relación con los 700 millones de pesos, ¿cómo hacerlo
si sólo una vez vencido el año fiscal se podrá verificar cuánto fue lo efectivamente
recaudado? De esto se deriva el otro interrogante que tiene que ver con los plazos a
partir de los cuales los educadores podrían comenzar a recibir el incremento de los
salarios. La falta de esa garantía impide también la regularidad, está claro que
recién a fin de año se podría asegurar el monto final y establecer de ese modo la
asignación definitiva correspondiente.
En definitiva el monto de la recaudación es impredecible, no hay quien garantice el piso
que la ley establece, no es posible determinar el monto a pagar ni tampoco la regularidad
de los pagos.
Para terminar con las consideraciones que tienen que ver con la ejecución de la ley y la
incidencia negativa y desnaturalizadora que ha tenido el veto presidencial para su
efectivo cumplimiento, no debemos dejar de llamar la atención sobre la actitud
parsimoniosa y casi negligente con que las autoridades de la AFIP (ex DGI), subordinadas
al Ministerio de Economía, han encarado la implementación del cobro de este impuesto.
Tan evidente ha sido la decisión de seguir boicoteando la constitución del Fondo por
parte del gabinete económico, que la propia ministra de Educación, en un hecho
insólito, se ha visto forzada a denunciar a través de los medios de comunicación lo que
ella misma calificó como pretensión de generar la primera experiencia de impuesto
autogestionado.
* Secretarios de CTERA. |
|