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Se supo tarde en la noche de anteayer: el Vaticano ha intercedido ante Gran Bretaña en favor de Augusto Pinochet, retenido en Londres a la espera de que la Cámara de los Lores dictamine posiblemente la semana próxima si el ex dictador cuenta o no con inmunidad ante el pedido de extradición de España. Posiblemente, la intervención del Papa Juan Pablo II apunte a razones humanitarias, como la edad del octogenario carnicero, para lograr que lo suelten. En todo caso, la noticia produjo beneplácito en el gobierno chileno y consternación entre las víctimas. La campaña pinochetista del Vaticano, que intervino ante el gobierno británico a favor de la liberación del ex dictador chileno Augusto Pinochet, ha provocado la repulsa de grupos de derechos humanos que abogan por juzgar al general en retiro. Según confirmó ayer un portavoz del Vaticano, el paso diplomático de la Santa Sede se llevó a cabo a petición del gobierno chileno, que niega a Gran Bretaña el derecho a retener al general en retiro y a permitir su posible extradición a España. El portavoz señaló que el contenido del mensaje se publicará en el momento conveniente. Aunque un vocero del Foreign Office se apresuró a negar que la carta llevara la firma de Juan Pablo II, el ex secretario de Finanzas Normal Lamont, del Partido Conservador, se mostró convencido de que se trata de una iniciativa de Wojtyla. Según Lord Lamont, Juan Pablo II está presionando para conseguir la liberación de Pinochet por reconocer la gran contribución del general a la protección del mundo occidental en la Guerra Fría. El Foreign Office señaló que la carta fue enviada por un alto funcionario del Vaticano. La opinión de Lamont coincide con la información que ofreció ayer el diario conservador londinense The Daily Telegraph, que afirmó que el Papa instó al gobierno británico a detener el proceso de extradición del ex dictador chileno. La revelación de la misiva del Vaticano se conoció a través de una iniciativa del propio Lamont, quien anteayer había recibido una respuesta oficial del gobierno a su consulta sobre la existencia de una carta desde la Santa Sede. Según el Daily Telegraph, el Papa apeló a la indulgencia por razones humanitarias y también por el interés de la reconciliación nacional en Chile. De acuerdo al rotativo, el Papa opina que Pinochet goza de inmunidad. El diario afirmó que el Vaticano también solicitó a España renunciar a la solicitud de extradición. Sin embargo, este extremo fue desmentido por fuentes oficiales en Madrid. No nos consta haber recibido alguna carta (de la Santa Sede) en este asunto, señalaron fuentes diplomáticas. En Londres, el presidente de un grupo antipinochetista Chile Democrático, Carlos Reyes, expresó su repulsa por la intervención del Vaticano. Estamos consternados por el hecho de que el Papa apoye a Pinochet, máxime cuando el mismo Papa dijo en una homilía en diciembre que los responsables de los genocidios tienen las manos manchadas de sangre y que deben ser condenados, dijo Reyes. Nunca debería olvidar que en Chile cinco curas fueron matados por Pinochet y que miles de católicos fueron encarcelados, torturados y asesinados, mientras que miles fueron enviados al exilio, agregó. ¿Cómo puede el Papa defender a una persona así?, se preguntó. Lamont no tardó en explicarlo: Habiendo vivido en Polonia, él entiende lo que es una dictadura marxista; como gran líder cristiano, él valora la vida humana y entiende lo que pasó en Chile. En términos similares se expresó ayer en la ciudad española de Toledo el dirigente socialista José Bono, presidente del gobierno regional de Castilla-La Mancha. Como creyente me ha hecho daño, me ha molestado profundamente que el Papa escriba y se moleste por un asesino, con la cantidad de gente buena que hay en el mundo por la que el Papa podría preocuparse antes, manifestó Bono. Pinochet, de 83 años, permanece retenido en Londres desde octubre del año pasado, La justicia española, que lo acusa de los delitos de genocidio, terrorismo y tortura, ha solicitado su extradición.Actualmente, la Cámara de los Lores debate si Pinochet goza de inmunidad por su condición de ex jefe de Estado. El fallo se conocerá probablemente la próxima semana. Durante el régimen de Pinochet, entre 1973 y 1990, más de 3000 personas fueron asesinadas o desaparecidas. El Papa Juan Pablo II visitó Chile en 1987, cuando el ex dictador aún ostentaba el poder.
ESCALADA MILITAR-GUERRILLERA EN COLOMBIA Por Pilar Lozano desde Bogotá
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