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 El próximo
10 de marzo el escribano mayor de Gobierno abrirá la caja fuerte de su despacho y le
entregará al titular de la oficina de Etica Pública, Luis Ferreira, la declaración de
bienes del presidente Carlos Menem, quien la dará a conocer en un acto en el que también
se difundirá el flamante Código de Etica que regulará de ahora en más los bolsillos de
los funcionarios públicos. En caso de que la declaración sea la misma que se conoció a
fines del año pasado, Menem jurará que tiene bienes por un valor estimado en los dos
millones de pesos. De ellos los últimos 500 mil lo acumuló entre 1991 y 1997, durante su
gestión presidencial por la que cobra un salario mensual de 8 mil pesos, mientras gasta
35 mil en cuotas de alimentos a tres mujeres.Los bienes del Presidente es uno de los secretos de Estado más celosamente custodiados por el Gobierno. El propio Presidente se negó en reiteradas oportunidades a reconocer públicamente el monto de su patrimonio y cuál era el origen de éste. Sin embargo ahora el jefe de la Oficina Pública de Etica anunció que a su regreso de Washington, donde participará junto con el vicepresidente, Carlos Ruckauf, de la primera conferencia mundial contra la corrupción, le entregará a Menem el formulario para que vuelque en él los bienes que están a su nombre. El contenido de éste será dado a conocer el 10 de marzo a las 11 en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, donde se revelará la incógnita. Por lo pronto se sabe que en 1982, al poco tiempo de haber recuperado la libertad, Menem se vio obligado a venderles a sus hermanos la parte que le correspondía de la bodega familiar, la que después recuperó al asumir, en 1983, la gobernación de la provincia de La Rioja. Hasta 1988 su única propiedad en la Capital Federal era un departamento de tres ambientes en la calle Cochabamba esquina Jujuy. “Cuando lo conocí –memora el ex ministro del Interior Gustavo Beliz–, Menem tenía un estilo de vida sencillo. Andaba en un auto rojo, chiquito, y se vestía muy austero, con ropa pasada de moda.” Según la declaración jurada de bienes que firmó a fines de 1997, las cosas cambiaron para el Presidente. Ahora dice tener autos por valor de 110 mil dólares, sin contar los de colección. En cuanto a las propiedades, ahora es dueño de dos departamentos en la Capital Federal, la casa de Anillaco y de medio Chilecito –en La Rioja– además de otros inmuebles que en total fueron valuados en 580 mil pesos. Aunque el valor real de la propiedad en la que vive Zulema Yoma junto a su hija, sobre la avenida del Libertador es tan sólo de 600 mil pesos. Si a esto se agrega que la propiedad de Anillaco, bautizada con el nombre de “La Rosadita”, valdría unos 500 mil pesos. No cualquiera tiene una casa a metros de una pista de aterrizaje similar en extensión a la de aeroparque. En lo que respecta a Chilecito, el Presidente reconoció en la declaración jurada de 1997, la que fue difundida por una revista de actualidad sin consentimiento del Gobierno, que era propietario de 26 lotes en esa ciudad riojana, cuyo valor total sería de 320 mil pesos. Aunque según informaron inmobiliarias de la zona se calcula que esos terrenos no valdrían menos de un millón trescientos mil pesos, de los cuales el 50 por ciento le corresponden a Menem y el 50 restante al actual secretario de Comunicaciones y futuro vicegobernador de Córdoba, Germán Kammerath. De ese modo, lo que Menem declaró en ese momento que valía 580 mil pesos, en realidad, si alguien quisiera comprarlos, cuestan un millón ochocientos mil pesos. Menem también consignó entre sus bienes acciones, créditos, obras de arte, caballos de carrera y otros por un valor cercano a los 620 mil pesos. Lo que no explicará la declaración es el origen de bienes. En principio, entre la declaración que presentó en 1991 y la última, el ‘97, se destaca un crecimiento de 500 mil pesos en el patrimonio del Presidente, quien sólo cobra 8000 pesos de sueldo por su cargo, mientras debe pagarle a Zulema Yoma 8500 por alimentos, 20.000 a Martha Meza (madre del hijo natural de Menem), y 2000 a otra mujer con la que estuvo vinculado: Amalia Pinetta.
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