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DUHALDE APURA LA INTERNA DEL PERONISMO BONAERENSE
Con ganas de jugar de local

El duhaldismo fijó la fecha de la interna para principios de mayo.
Sigue confiando en ganar arrasadoramente en su provincia.


Por F.Y.

t.gif (862 bytes) En el entorno de Eduardo Duhalde juran que nadie escuchó el discurso de Carlos Menem, pero todos aseguran frente a los micrófonos que “fue la despedida de un presidente, un estadista”. Pero ello no implicó que descuidaran la intrincada interna bonaerense. Ayer el consejo bonaerense del PJ definió que la elección se concretará el 9 o 16 de mayo en un intento de volver a forzar al menemismo a definir el candidato presidencial el mismo día. Esta puede ser una de las decisiones a que Menem y los gobernadores arriben el próximo jueves a la mañana, cuando se reúnan como resultado de los acuerdos alcanzados el sábado cuando se encontró con Duhalde en la quinta de Olivos. Mientras tanto, en la provincia ya casi nadie duda de que la boleta duhaldista llevará la fórmula Carlos Ruckauf-Felipe Solá.
Sin duda la jugada del duhaldismo se repite. En diciembre del año pasado, cuando el menemismo jugaba con la indefinición de la fecha de la interna nacional, el consejo partidario de Buenos Aires definió que las elecciones se realizarán el tan mentado 11 de abril. La fuerza de un rotundo triunfo de la lista de Duhalde en la provincia forzó una respuesta de la gente del Presidente que concluyó con la famosa cena de Menem con los gobernadores en Olivos el 9 de febrero, donde se decidió, aunque por poco tiempo, llamar a elecciones en abril. Pero ante el traspié que significó la decisión del juez Manuel Blanco de anular las internas bonaerenses, el gobernador ordenó cumplir con las exigencias del magistrado y luego de que el consejo nacional del PJ postergó las elecciones nacionales Duhalde decidió que era preciso concretar la compulsa a lo sumo un mes más tarde de lo previsto. Ahora sus operadores tienen todo listo y hasta la fecha en un intento de volver a forzar la unificación de las internas nacionales y bonaerense.
Aparentemente, el objetivo de Duhalde puede concretarse ya que ayer se conoció que la reunión de Menem con los gobernadores justicialistas, uno de los puntos que Duhalde acordó con el Presidente el sábado pasado en Olivos, se realizará el jueves. En ese encuentro puede definirse la fecha, aparentemente definitiva, de la interna justicialista. Tanto menemistas como duhaldistas creen que el cónclave, al que asistirá Duhalde, se producirá el jueves poco después de la reunión de gabinete. De ser así y si no hay contratiempos es probable que los acuerdos alcanzados se transmitan a la reunión del consejo nacional, que tiene que definir la fecha de la interna.
Mientras tanto, en la provincia los duhaldistas cuidan todos los detalles para evitar otros sustos jurídicos. “Nadie podrá impugnarnos. Así que los que no llegan, tendrán que esperar cuatro años”, se jactó uno de los encargados de la campaña del gobernador en la provincia en una obvia alusión a la postulación del senador Cafiero. Este mismo operador, ya en una casi exagerada muestra de optimismo, destacó que “el antiduhaldismo está muy debilitado y no se presentará”.
En lo que respecta a los candidatos de Duhalde, ya no se discute la fórmula preferida por el gobernador: Ruckauf-Solá. Las encuestas que maneja el equipo del gobernador echaron por tierra las aspiraciones de algunos de los precandidatos que pujaban por suceder a Duhalde en el primer distrito electoral del país. Atrás quedaron las ilusiones de José María Díaz Bancalari, Graciela Giannettasio. Sólo mantienen algunas esperanzas, cada vez más pequeñas, Osvaldo Mércuri y Hugo Toledo, el primero por sus gestiones para concretar el acercamiento entre Duhalde y Palito, y el segundo por todo el trabajo que hizo al unificar el PJ bonaerense tras la mesa Duhalde Presidente. Todos recibieron promesas de importantes puestos en el futuro gabinete presidencial.
Sin embargo, tanto Ruckauf como Solá insisten en mantener un bajo perfil y prefieren no hacer declaraciones, algo que no sucede con sus operadores que están indisimuladamente felices. Pero si algún periodista les consultaa los protagonistas del binomio ellos dicen que estarán donde Duhalde los convoque.

 

El otro adiós

Carlos Menem no fue el único mandatario que hizo su último discurso ante una Asamblea Legislativa. Eduardo Duhalde también pasó por el mismo trance en la provincia. El gobernador destacó en su discurso el rol activo que tuvo el Estado provincial, enumeró las obras públicas y anunció un incremento del 33 por ciento en los haberes de los jubilados. Con respecto a este último tema, señaló que en 60 días más la jubilación mínima en su provincia será de 300 pesos. Sin embargo, y a pesar de la promesa, Duhalde no pudo evitar una serie de críticas desde la oposición. El presidente del bloque radical de senadores, Eduardo Florio, calificó el discurso como “pobre de contenido y demagógico”. En la Cámara baja provincial tampoco ahorraron críticas, desde las bancas de la Alianza Alejandro Mosquera, Daniel Salvador y Aldo San Pedro coincidieron en que “Duhalde demostró una alta dosis de autismo político cuando mencionó las medidas que puso en marcha ante la incidencia de la crisis brasileña”. Otro que le lanzó dardos a Duhalde fue el senador del Frepaso, Jorge Drkos, quien criticó las referencias a las reformas en el área seguridad: “Frente a los reclamos para frenar la violencia lo único que ofreció es mayor represión”.

 

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