|
|
|
|
|
|
|
|
|
 El Sub-17
que dirige Hugo Tocalli debutó ante Perú en la primera fecha del Sudamericano. Y anduvo
moderadamente bien. Ganó con lo justo, controló siempre el trámite, no corrió peligro
pero le faltó contundencia. Creó pocas situaciones de gol en comparación con el tiempo
de que dispuso de la pelota. Sólo sobre el final, con el gol de Marclay, estableció la
diferencia justa. Desde el arranque, después de unos primeros minutos que tardó en acomodarse en el terreno, Argentina demostró que era más que Perú. Apoyado en una muy segura labor de la línea de fondo, donde Spinelli tomaba al más adelantado de los peruanos –el hábil Barreto– mientras Coloccini quedaba libre y los laterales se proyectaban con criterio: muy bien March y Perzán, los dos de Ferro. En el medio, muy criterioso Medina por el medio, con el riverplatense Ahumada por derecha y Moreno por izquierda algo desdibujado. El zurdo Marinelli era el enganche –mayor responsabilidad– y no anduvo tan bien, sobre todo porque no pudo conectarse tan bien con Calandria, un poco aislado, mientras que Rovira, moviéndose sobre todo por derecha, fue el que mejor se las ingenió para crear peligro. Sin embargo no hubo demasiadas llegadas después de que Marinelli la levantara desde el punto del penal. El partido era parejo entonces. El gol llegó de penal después de una ingenuidad del arquero que derribó al mismo Marinelli y convirtió Medina. No hubo muchos cambios pese al tanto. Sobre todo porque Perú no lastimaba sino con remates de lejos. El penal para los rojiblancos llegó en una jugada aislada y Reyes lo pateó muy mal: Lux respondió bien y Argentina se fue con ventaja mínima al descanso. El complemento fue brusco, flojo y sin llegadas hasta que sobre el final, y ya con Perú sin González, Argentina definió. Un buen comienzo.
|
