|
Por A.H.M. Desde Catamarca Como ocurre desde septiembre de 1990, el de ayer tampoco fue un día más en la vida de los Morales. Las menciones al asesinato de su hija María Soledad que se hicieron durante la campaña por parte de los dirigentes justicialistas les dieron un color trágico a las elecciones catamarqueñas y sólo sirvieron para remover el dolor. Ada y Elías, que concurrieron a votar, "como lo hacemos siempre", criticaron duramente al presidente Carlos Menem por haber comparado el escándalo Lewinsky-Clinton con el crimen de su hija. Y no dudaron en considerar que el triunfo de Ramón Saadi hubiera significado "la libertad para Guillermo Luque y Luis Tula", quienes cumplen condena por el asesinato de María Soledad. En el patio de su casa de Valle Viejo, bajo la sombra de un árbol, Ada y Elías Morales conversaban con un amigo cuando recibieron a Página/12. Casi anticipando el resultado del comicio y a la misma hora en que Saadi se adjudicaba el triunfo, Ada interpretó lo que sería la respuesta de sus coprovincianos en las elecciones: "Las esperamos con mucha paz y tranquilidad, porque sabemos que hoy (por ayer) va a seguir triunfando la justicia y sabemos que miles de catamarqueños que nos han acompañado siempre, y muchos otros más, quieren la libertad". Elías también encontró su forma de decir "nunca más". "En Catamarca se da una elección totalmente distinta. Digo distinta, porque de un lado está la corrupción, Saadi y compañía del orden nacional, y del otro lado están la gente y la dignidad de la gente. Creo que va a triunfar la dignidad de la gente". Mientras se acomoda en su hamaca, Ada sabe que miles de catamarqueños esperaban una señal de su familia para inclinar su voto, pero es muy cuidadosa con sus opiniones, por eso se califica de "independiente". "El voto es secreto", dice la mujer con el fervor cívico que le enseñaron en la escuela. Pero no puede eludir hacer una referencia a los comicios de ayer. "No queremos que vuelva el pasado. Queremos un futuro mejor para nuestros hijos. En política, sea el color de camiseta que sea, nosotros no estamos con nadie, somos independientes. Nos va a llenar de satisfacción si cualquiera, menos el pasado, resulta ganador", añade. Ada no va a decir cuál es el color de camiseta que eligió, pero revela cuál es la camiseta que no quiere volver a ver. "Si triunfa Oscar Castillo o Juanita Vaccaroni (candidata del Frepaso), cualquiera de los dos significa la libertad, la paz para Catamarca". Ada sabe que, además de haber soportado la violación y muerte de su hija y tener una espera de ocho años para que los asesinos fueran condenados por la Justicia, la presencia de Ramón Saadi en la vida política de Catamarca referirá inevitablemente al crimen de su hija. "Creo que hay muchos justicialistas honorables en Catamarca, a los cuales mientras Ramón siga... en toda Catamarca y a todo el país, Ramón Saadi le hace daño al peronismo". Sobre la amenaza del ex diputado del PJ, Angel Luque, de que su hijo iba a ser liberado si Saadi ganaba, Ada no duda en responder: "El (por Saadi) inmediatamente lo va a indultar a los dos. Porque eso se estaban jugando; la libertad por Tula y Luque". Ada no puede evitar exteriorizar el dolor cuando se le pregunta sobre la frase que Menem usó en una de sus visitas a Catamarca para señalar que Saadi fue "víctima de una campaña de difamación". La madre de María Soledad es muy clara: "Menem, a pocos metros de la tumba de nuestra hija, vino a festejar con los asesinos y encubridores de Sole. Primero le dictó el sobreseimiento a Saadi, cuando todos sabemos que el encubridor político del crimen de Sole es él, Ramón. Y, en segundo lugar, cuando hizo la comparación tremenda, que nos causó mucho dolor a los Morales, del asesinato de Sole con el caso Lewinsky-Clinton con María Soledad. Lewinsky viaja por todo el mundo, está llena de dinero, mientras que mi hija está muerta, sepultada, violada, desfigurada. Es tremenda la comparación que usó. Además Clinton, al menos tuvo arrepentimiento, porque pidió perdón al pueblo por haber mentido, en cambio Ramón Saadi, no. Fue él el que ordenó la difamación y calumnias a nuestra hija y a la familia Morales". Por el dolor de Ada es aún mayor cuando recuerda que Menem pronunció esa frase en un acto realizado a fines de febrero en "la cancha de la liga chacarera de Valle Viejo. Allí hizo la comparación, o sea que está a poquitos pasos del cementerio donde está enterrada nuestra hija y también a poquitos pasos de donde fue encontrado el cuerpo de Sole", en septiembre de 1990.
|