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Por Ian Traynor desde Bonn  El misterio sobre el
destino y el estado del líder albano-kosovar Ibrahim Rugova se profundizó ayer cuando el
político apareció en televisión junto a su archienemigo, el presidente yugoslavo
Slobodan Milosevic, manifestándose con él a favor de la paz y las negociaciones. Para
embrollar aún más la confusión, previamente Rugova había hablado en términos
altamente despectivos de Milosevic en una entrevista con el semanario alemán Der Spiegel,
que se publicó ayer. En declaraciones del lunes pasado, antes de ser detenido por la
policía serbia, Rugova había pedido el emplazamiento de tropas terrestres de la OTAN en
Kosovo y había afirmado que Milosevic estaba desestabilizando la totalidad de los
Balcanes para apuntalar su poder.“La OTAN ahora debe concentrarse en una cosa y, de ser necesario, amenazar a Serbia con la destrucción total –dijo Rugova a la revista alemana–. Tengo la esperanza de que la OTAN impida que los locos gobiernen el mundo. La alianza debe enviar 20.000 soldados rápidamente para que se sumen a los 12.000 que se encuentran en Macedonia e inmediatamente entrar en combates en Kosovo.” Sus declaraciones a Der Spiegel contradijeron el tono conciliatorio que le atribuyó ayer la televisión estatal serbia, principal usina propagandística de Milosevic. “El presidente Slobodan Milosevic ha recibido al doctor Ibrahim Rugova en Belgrado –dijo la tevé serbia–. Discutieron los problemas de Kosovo. Llegaron a una posición común en su compromiso mutuo a un proceso político y a que los problemas sólo podrán resolverse con éxito y para el largo plazo por medios políticos” (ver pág. 19). El canciller británico Robin Cook confirmó que Rugova estaba en manos de la policía serbia y demandó que no se le hiciera daño. Javier Solana, secretario general de la OTAN, dijo que creía que Rugova se encontraba en Belgrado “bajo coacción” y no libremente. Gente muy cercana a Rugova, quien está casado y tiene dos hijos y una hija, dijeron que las declaraciones que le atribuyó la televisión serbia son totalmente inconsistentes con sus puntos de vista conocidos y reiterados. “Sobre las especulaciones de que estoy muerto, o herido, y que mi casa ha sido incendiada, quiero declarar que estoy bien, que estoy en mi casa y que me encuentro bajo protección de la policía serbia”, fueron las frases de Rugova citadas por los medios serbios. Interrogado sobre los bombardeos de la OTAN, se afirma que Rugova contestó: “Deben pararlo todo”. “Está todo trucado –sostuvo Donika Gervalla, vocera en Alemania de la Liga Democrática de Kosovo, el partido moderado encabezado por Rugova–. El ha estado pidiendo la intervención de la OTAN durante los últimos nueve años.” Bujar Bukoshi, ex secretario general del partido de Rugova, destacó que “se encuentra bajo la ‘protección’ de la misma policía que está ejecutando a gente. Estas declaraciones no son creíbles”. Rugova, líder de los albano-kosovares desde 1989, ha sido seriamente desafiado por los militantes del Ejército de Liberación de Kosovo durante el pasado año. La confusión también ha rodeado la situación de otros dos prominentes activistas albano-kosovares. El lunes, funcionarios de la OTAN informaron que Fehmi Agani, vicepresidente de la LDK de Rugova, y miembro clave de la delegación albanesa a las frustradas negociaciones de paz de Rambouillet, había sido ejecutado por un escuadrón de la muerte serbio. Pero anteayer, un hijo de Agani llamó a la sede central de la OTAN en Bruselas para revelar que su padre aún estaba vivo. Se cree que Agani se encuentra escondido en algún lugar de Kosovo. Hay menos certezas sobre la situación de otro activista. Después de informar del asesinato del joven periodista y editor Baton Haxhiu, funcionarios de la OTAN se retractaron de su versión el miércoles. Los exiliados albaneses en Alemania que se mantenían en contacto con Pristinaayer dijeron haber sido informados de que Haxhiu estaba vivo. Pero otra fuente dijo que no había dudas de que había sido asesinado.
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