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PREPARAN LA ACCION TERRESTRE
Bienvenidos a la Primera Guerra
(del siglo XXI)

Ayudada por la guerrilla del ELK, la OTAN capturó el primer soldado serbio desde que empezó al conflicto, en medio de signos crecientes de que se prepara la entrada de tropas terrestres. En estas páginas, un repaso por la guerra y las alianzas que se vienen, que pueden marcar los puntos de fractura del próximo siglo.

Por Claudio Uriarte

t.gif (862 bytes) En las guerras, la dirección futura de los acontecimientos aparece a menudo en la forma de un detalle distinto que no se había distinguido antes. En el caso de los Balcanes y de esta guerra, los “detalles” nuevos que han aparecido en el curso de los últimos días son tres: la caída en manos de la OTAN del primer prisionero de guerra serbio desde que empezaron los bombardeos (ver pág. 22), el llamado a filas de Bill Clinton a 30.000 reservistas y el primer pronunciamiento público de Croacia, desde el inicio del conflicto, llamando a la intervención terrestre de la Alianza. Después de los fracasos de las sucesivas mediaciones diplomáticas que se intentaron –principalmente por vía de Rusia y Alemania, y más tímidamente de Naciones Unidas–, estos signos indican que la intervención de tropas terrestres, por mucho que Bill Clinton y Tony Blair se cansen de descartarla en público, es prácticamente una decisión tomada y puede empezar tan pronto como la semana entrante.
Primero, está la novedad del prisionero serbio. El oficial fue capturado en territorio de Kosovo, pero no por fuerzas de la OTAN, sino por guerrilleros del Ejército de Liberación de Kosovo, que luego lo entregaron a Albania, que a su vez lo pasó a las fuerzas de la Alianza Atlántica que están llegando a ese país bajo la cobertura de la operación “humanitaria” Refugio Aliado (7300 tropas de infantería de la OTAN). Es decir, el ELK está actuando como vanguardia y como recolector de inteligencia de la Alianza Atlántica. Del dato se deduce que la intervención terrestre inicialmente no tendrá el escenario “desembarco en Normandía”, sino más bien la forma de infiltraciones fronterizas a cargo de grupos comando que operarán en sincronización con el ELK, que no está destruido sino refugiado en las montañas. Las vanguardias de la Alianza Atlántica ya están esperando en las dos antesalas de la provincia rebelde: Macedonia –donde hay 12.000 soldados estacionados, en una operación de “mantenimiento de la paz” que puede cambiar de misión rápidamente– y Albania. Precisamente, el comandante militar de la OTAN, general Wesley Clark, realizó ayer dos visitas relámpago a Macedonia y Albania, donde se entrevistó como el presidente macedonio Kiro Gligorov y el primer ministro albanés Pandeli Majko.
Por el momento, parece seguro que el objetivo es la conquista de Kosovo y no de Serbia, aunque también es seguro que la Alianza reforzará asimismo sus tropas en uno de sus flamantes miembros, Hungría, que limita con el norte serbio. La limitación de los planes a Kosovo se puede deducir del hecho de que no está en los intereses de la Alianza absorber una población indigerible, que va a seguir admirando a Slobodan Milosevic y detestando a los norteamericanos. Una salida diplomática cuando la intervención esté más avanzada y Serbia más aniquilada ya está en los planes: consiste en ceder a Milosevic una tajada de territorio kosovar al norte de la provincia, donde se encuentran los lugares más caros a la mitología fundacional serbia. Kosovo, en este escenario, quedaría como un protectorado cuasi permanente de la OTAN, para los refugiados que quieran volver a una tierra arrasada para la que deberá amasarse una enorme cantidad de recursos financieros. Otra posible concesión a Milosevic sería la anexión de la República Serbia de Bosnia, que sólo se mantiene en el estado binacional de Bosnia gracias a la presencia de 32.000 soldados de la OTAN. En ese caso, parte o la totalidad de esas tropas atlánticas debería desplazarse hacia la vecina Federación Croata-Musulmana –segunda entidad de ese Estado binacional–, que quedaría convertida en otro protectorado atlántico y, de facto, en un nuevo integrante de la OTAN.
Pero las consecuencias de esta operación en términos geopolíticos y militares serían gigantescas, por lo que queda fuera de ella. La charla de una “Unión Paneslava” entre Rusia, Bielorrusia y Yugoslavia es algo más que charla: Rusia ha visto a la OTAN iniciando una guerra de agresión destinada esencialmente a rediseñar las fronteras de los Balcanes, y por más débil económicamente que esté se encuentra obligada a considerar estos movimientos aliados como una amenaza a su seguridad nacional. En esta situación, la polarización geopolítica y étnica inevitablemente volcará a Ucrania hacia el lado de la Unión Paneslava. Esto implica un nuevo Pacto de Varsovia, un Pacto de Varsovia en miniatura, pero mucho más firme en potencia que la vieja alianza prosoviética cuya capital polaca es hoy territorio de la OTAN: mientras el viejo Pacto de Varsovia era una coalición ideológico-militar, el nuevo estaría basado en una alianza del mundo eslavo y cristiano-ortodoxo contra un exterior percibido como una amenaza. La nueva Guerra Fría sería una realidad. Rumania, Bulgaria, Albania y Macedonia quedarían del lado de la OTAN, mientras la permanencia de Grecia dentro de la Alianza estaría seriamente minada.
Lo que lleva al desenlace más sorprendente de la ecuación que está surgiendo, que es la constitución de una alianza occidental con el mundo musulmán moderado. De algún modo, esto ya estaba prefigurado en lo que algunos analistas han llamado “la alianza fantasma” entre Estados Unidos, Israel y Turquía. Significativamente, cuando el canciller israelí de línea dura Ariel Sharon abrió la boca para proclamar su oposición a la independencia de Kosovo, el premier centroderechista Benjamin Netanyahu se encargó de cerrársela aclarando que ésa era sólo la posición personal de Sharon. También significativamente, se ha hablado de una alianza militar entre Milosevic de Yugoslavia y Saddam Hussein de Irak.
Es que, traducido a la política israelí, independencia para Kosovo significa independencia para Palestina. Las elecciones israelíes son el 17 de mayo y luego de su desenlace Netanyahu puede decidir cambiar de alianzas, optando por el centro laborista en lugar de la derecha religiosa, lo que implicaría la reactivación del proceso de paz. Todavía es demasiado pronto para vaticinar lo que ocurrirá en este terreno, pero la presencia de una ayuda israelí a los refugiados kosovares tal vez sea otro indicio de la nueva, sorprendente, dirección de los acontecimientos.

 


 

CLINTON PIDIO 6000 MILLONES DE DOLARES Y SEGUIRA ATACANDO
Inhumano, demasiado inhumano

Los desastres de la OTAN en la semana que pasó empiezan a poner en ridículo la pretensión humanitaria de la operación Fuerza Aliada en EE.UU. La respuesta de Clinton es: más bombas, más plata, más armas.

General Clark, comandante de la OTAN, en Albania ayer.
Fue en una gira relámpago que también lo llevó a Macedonia.


Página/12 en EE.UU.
Por Mónica Flores Correa desde Nueva York

t.gif (862 bytes) “Una política exterior humanitaria, que no se guíe sólo por los intereses en juego, no es un disparate. No es una mala idea, aunque este intento en Kosovo sea, por el momento, un fiasco”, reflexionó Jonathan Alter, analista político de la cadena televisiva NBC, en un programa nocturno donde varios expertos en asuntos políticos y militares debatían la crisis en Europa y la inserción de Estados Unidos en el conflicto.
Con las muertes de un centenar de refugiados por el bombardeo de la OTAN, la expresión “por razones humanitarias” cobró esta semana un matiz más ambiguo que el que había tenido los días previos. La administración Clinton trató inmediatamente de desplazar el foco de atención de las muertes accidentales a las atrocidades de los serbios. James Rubin, vocero del Departamento de Estado, dijo que había pruebas convincentes “de asesinatos en masa y fosas comunes para los asesinados” perpetrados por las fuerzas de Slobodan Milosevic y el Pentágono respaldó esta afirmación indicando que tenía fotos, presumiblemente satelitales, de las tumbas masivas. El estremecimiento –en realidad, desconcierto– que provocó el “daño colateral” de las bombas aliadas en la opinión pública norteamericana no modificó el discurso de la administración. La campaña aérea “puede durar meses”, dijo Bill Clinton. ¿Tropas terrestres? De eso ni hablar, dieron a entender el presidente y todo alto funcionario que trató el tema en público. La administración ofreció poner más tiempo (“puede durar meses”), más plata (Clinton pidió al Congreso que apruebe una partida de 6000 millones de dólares para la emergencia) y más hombres (el Pentágono convocará a 33.000 reservistas). Lo que no ofreció es una estrategia de salida del conflicto, dijeron los críticos. Algunos observadores opinan que este silencio acerca de la resolución de la crisis podría tener un costo político que iría en aumento, de la misma manera que va escalando esta guerra.
“Muchos historiadores creemos que éste es el peor desastre humanitario desde la Segunda Guerra Mundial. La administración debería aprovechar este sentimiento emocional que producen las imágenes de Kosovo en el público norteamericano, esta impresión de que ‘algo debe hacerse’, si desea tomar el paso más riesgoso de enviar fuerzas de tierra”, opinó la historiadora Doris Kearns Goodwin, que ha publicado libros sobre las presidencias de Franklin Roosevelt y de Lyndon Johnson. Pero a diferencia de otras voces cuestionadoras, Kearns Goodwin no criticó al gobierno por no dar una estimación de plazos: “Roosevelt también dijo que la lucha iba a ser larga y que no podía asegurar cuánto iba a durar”.
La historiadora también apuntó otras inquietudes de la administración que harían que ésta actuara con especial prudencia. “Se aproxima un año electoral. Para que Al Gore u otro candidato demócrata triunfe en el 2000, Clinton no puede cargar con un fracaso bélico, pero tampoco podrá soportar muchas bajas norteamericanas. Además, tiene que lidiar con un Congreso republicano que puede obstruir iniciativas, como la de un plan tipo Marshall para reconstruir Kosovo”, señaló.
Si bien la idea de enviar tropas de tierra divide al Congreso, varios legisladores criticaron esta semana más enfáticamente al Ejecutivo por no ejercer una mayor presión en los aliados europeos para que se lleve a cabo una operación terrestre. En las audiencias en las que declararon el secretario de Defensa, William Cohen, y el general Henry Shelton, jefe del estado mayor conjunto, el representante demócrata Gene Taylor, del Comité de Fuerzas Armadas de la Cámara baja, sostuvo: “Creo que Milosevic estásentado diciéndose: ‘No son serios. He visto lo que hacen cuando deciden actuar con seriedad y esta vez no están haciendo lo mismo’”.
Por su parte, Shelton reconoció que él había advertido a los funcionarios que la acción única del bombardeo podría no lograr el objetivo político buscado de que los kosovares expulsados retornen a su tierra. “He señalado que esta opción militar (...) podría no conducir al resultado diplomático deseado pero esto es lo que se acordó políticamente”, informó el general.
Empeñada en tomar medidas que quizá “no conduzcan al objetivo deseado”, la administración decidió también intervenir más activamente en el frente propagandístico. Con imágenes conmovedoras de los refugiados albanokosovares, Hillary Clinton apareció en un aviso televisivo solicitando a sus compatriotas que hicieran donaciones para las víctimas de la llamada “limpieza étnica”. Y la secretaria de Estado, Madeleine Albright, grabó en lengua serbia (aprendida en su infancia europea) un mensaje radial internacional destinado al pueblo yugoslavo para denunciar los crímenes del gobierno de Milosevic. Un analista opinó irónicamente que este último gesto era simplemente un long shot, un lance con remotísimas posibilidades de éxito.

 


 

MARKO GASIC, REPRESENTANTE SERBIO EN LONDRES
“Ya hay ataques radioactivos”

Página/12 en Gran Bretaña
Por Marcelo Justo desde Londres

t.gif (862 bytes) El Centro de Información Serbio en Londres aseguró a Página/12 que la OTAN inició una guerra radioactiva en Kosovo de “incalculables consecuencias para la región”. “No tengo opinión formada sobre Milosevic. Nosotros apoyamos al pueblo serbio contra el criminal bombardeo de la OTAN”, indicó Marko Gasic a Página/12.
–La OTAN ha dicho que sólo ataca objetivos militares y que los dos incidentes ocurridos esta semana fueron lamentables accidentes.
–El bombardeo de la OTAN es una acción criminal que sería condenada por un Tribunal Internacional Criminal. Pero recordemos que lo ocurrido esta semana no es una excepción o un desafortunado accidente. Forma parte de un deliberado plan de la OTAN de atacar puentes, carreteras, escuelas, monasterios con el objetivo de destruir la infraestructura del país. Antes de que sucediera esto, la OTAN bombardeó zonas residenciales y atacó una planta automotriz ocupada por miles de trabajadores que querían proteger su fuente de trabajo. Ahora están lanzando bombas de fragmentación y misiles que contienen uranio que, de acuerdo con expertos de las Naciones Unidas, están convirtiendo a Kosovo en tierra arrasada. Este tipo de uranio deja un residuo de radiación que va a envenenar ecológicamente esta zona. Lo que la OTAN está haciendo es un asesinato en masa no sólo de la gente que habita en Kosovo hoy sino de los que la poblarán en el futuro.
–¿Cómo es que estos hechos no han tenido repercusión internacional?
–El Centro de Acción Internacional de Nueva York ha condenado lo que se ha hecho. La subdirectora indicó que se está convirtiendo a Kosovo en un baldío nuclear. La Asociación de la ONU condena la ilegalidad de la acción y el impacto que va a tener el ataque con uranio. Lo que pasa es que hay una campaña constante de desinformación. El canciller Robin Cook dijo hace poco que habían masacrado a 20 maestros en Godan. Pero Godan es un aldea kosovar de no más de 200 personas. Con suerte si tiene un maestro.
–¿Todo lo que dice la OTAN son mentiras sin fundamento?
–Mire, lo que hizo Robin Cook es manipular una información que desde el punto de vista histórico es cierta. En 1941 hubo una masacre similar, en Zastav, donde está la planta automotriz a la que me refería antes. Las fuerzas de ocupación nazis asesinaron a una serie de maestros en represalia por una acción armada de la resistencia. De modo que este hecho histórico fue manipulado y tergiversado para contar una mentira más. Ahora se está empezando a hablar de violaciones masivas y sistemáticas de mujeres, como también se habló en el caso de la guerra de Bosnia. Son puras mentiras. No ha habido persecución étnica de ninguna manera. La gente que huyó de Kosovo lo hizo, forzada por el ELK y el bombardeo de la OTAN, no por la persecución de los serbios.
–¿Qué solución ve a la situación actual?
–La OTAN tiene que dejar de bombardear a Serbia y volver a negociar. Debe también cesar en su apoyo a ese grupo de terroristas del Ejército de Liberación de Kosovo. Estados Unidos creó el problema porque armó a la guerrilla, los entrenó y ahora el ELK, que quiere crear con Kosovo una Gran Albania, está reclutando a la fuerza a los hombres, separándolos de sus familias y radicalizando a la población. El objetivo de Estados Unidos es desestabilizar la zona para promover sus propios intereses.
–¿Qué interés estadounidense están en juego?
–Estados Unidos quiere crear un nuevo orden mundial bajo su hegemonía en el que las Naciones Unidas no tenga peso y la OTAN sea la fuerza internacional dominante. En este caso está ampliando su zona de influencia a regiones más cercanas a Rusia y el Medio Oriente que tienen valorestratégico por su riqueza en minerales. No es casual que debido a esta intervención militar Rusia y China hayan advertido sobre el peligro de una conflagración mundial.

 


 

PLEURAT SEGDIN, DEL EJERCITO DE LIBERACION DE KOSOVO
“Estamos negociando ayuda de la OTAN”

Por M.J.

t.gif (862 bytes) Calificada previamente de organización terrorista, denunciada como banda islámica, maoísta o narcoguerrillera, el Ejercito de Liberación de Kosovo (ELK) se ha convertido en los últimos meses en una de las piezas clave del complejo mosaico balcánico. El habilidoso manejo que hizo en las negociaciones de Rambouillet, cuyo fracaso desencadenó la ofensiva occidental contra Serbia, le ganó el apodo de moderados y el papel de “niña bonita” de la OTAN. Esta semana la trágica muerte de decenas de refugiados kosovares como consecuencia de un ataque de la OTAN tuvo el paradójico efecto de acercar más la posición de la guerrilla y la alianza militar transatlántica. En el curso de una larga entrevista, el representante del ELK en Londres, Pleurat Segdin, indicó a Página/12 que su organización puede evitarle a la OTAN la pesadilla de la intervención terrestre y que las propuestas de Rambouillet “ya no son suficientes para una salida a la crisis”.
–¿No prueba lo sucedido con el convoy de refugiados kosovares esta semana que el operativo de la OTAN ha fracasado?
–No. Fue un trágico error. Los kosovares lo hemos aceptado así. La intervención de la OTAN dio esperanzas a nuestro pueblo frente a las atrocidades serbias a que estamos expuestos. Lo que pasa es que muchos pensaban que Milosevic se derrumbaría muy pronto. Sólo los que conocíamos la realidad de primera mano sabíamos que es capaz de destruir su país con tal de permanecer en el poder. ¿Cuánto va a tomar el operativo? Todo dependerá de Milosevic. Si quiere que su país sea destruido o si prefiere aceptar las lecciones de la democracia. A mi juicio el derrumbe del régimen no va a ser gradual sino completo y repentino. El pueblo serbio va a comprender que la ofensiva de la OTAN no se dirige a ellos sino a un régimen fascista.
–¿No es cada vez más evidente que para lograr ese objetivo se va a necesitar una intervención militar terrestre de la OTAN?
–Los bombardeos aéreos no son suficientes. Nos gustaría que sí lo fueran para no poner en peligro las vidas de jóvenes soldados norteamericanos y británicos. Pero lamentablemente no es así. Creo que la alternativa es que la OTAN acepte que el ELK debe modernizar su capacidad militar para defender al pueblo kosovar. Tenemos suficiente dinero, pero necesitamos que se levante el embargo para poder enfrentar a la maquinaria militar serbia.
–¿Hay alguna promesa de que esto vaya a suceder?
–Sí. Estamos en conversaciones, pero por el momento preferimos no hablar del asunto.
–¿Estamos hablando de días, semanas, meses?
–Es algo que va a definir dentro de poco. En una o dos semanas.
–¿Cómo afectó al ELK la ofensiva serbia de las últimas semanas?
–Perdimos algo de nuestra capacidad. Pero también aumentamos nuestro reclutamiento. Cada vez hay más voluntarios. Tenemos unos 25.000 miembros armados y unos 16.000 más entrenándose.
–¿Qué pasa si la ofensiva de la OTAN no consigue sus objetivos? ¿Hay un plan alternativo?
–Estoy seguro de que conseguirán sus objetivos. Si no lo hicieran, tendríamos un Kosovo sin albaneses. La limpieza étnica sería total. Pero no contemplamos esta posibilidad. No hay un plan B.
—Esta ofensiva de la OTAN se desató porque los serbios rechazaron las propuestas de Rambouillet que ustedes en cambio aceptaron. ¿Esas propuestas siguen siendo la meta del ELK?
–Ya no. Queremos más que un período de tres años para conseguir nuestra autonomía. Esto ya no es posible. Creo que es necesario establecer un Kosovo bajo el protectorado internacional de la OTAN y que después de tres años el pueblo kosovar vote sobre su futuro en un referéndum. Una de las opciones será la independencia.
–¿Independencia para ser una nación autónoma o para unirse a Albania y formar una Gran Albania?
–Eso lo decidirá el pueblo kosovar en su momento.

 


 

ATRAPADO POR LA GUERRILLA ALBANO-KOSOVAR
Primer prisionero serbio de la OTAN

t.gif (862 bytes) En el día 25 de sus bombardeos, la OTAN tuvo su primer prisionero serbio. Pero sus captores no fueron tropas aliadas, sino el Ejército de Liberación de Kosovo (ELK), quien tomó a un oficial yugoslavo cerca de la frontera con Albania y lo entregó a las fuerzas norteamericanas en ese país. Los ataques aéreos de la Alianza Atlántica ocurrieron en la madrugada del sábado, ya que durante el día se interrumpieron por mal tiempo. Los medios serbios informaron que los blancos se concentraron en una fábrica de Valjevo, a 90 kilómetros de Belgrado, en la ciudad de Uzice y en los suburbios de la capital yugoslava, donde habría muerto una niña de tres años. También dijeron que la defensa antiaérea yugoslava derribó un avión aliado, algo desmentido por la OTAN. Lo que no cesó es el flujo de refugiados hacia Albania, Macedonia y Montenegro: 25.000 personas sólo en el día de ayer, según el Alto Comisionado de la ONU para Refugiados (ACNUR).
“Los bombardeos aéreos van a aumentar y serán más intensos”, dijo el general Wesley Clark, jefe de las tropas de la OTAN, que ayer fue a Macedonia y Albania. Y desde Estados Unidos apoyaron con datos su pronóstico. El secretario de Defensa adjunto norteamericano, Charles Cragin, declaró que los 30.000 reservistas que el Ejército estadounidense piensa enviar a los Balcanes “podrían entrar en acción” unas horas después de ser convocados. El general Charles Wald, jefe del Estado Mayor norteamericano, dijo que los 24 helicópteros Apache AH-64 que salieron hacia los Balcanes “probablemente” lleguen hoy a Albania. Y el portavoz del Pentágono, Kevin Bacon, indicó que se mandarán cinco bombarderos B-1, cinco EA-6B para bloquear radares y diez aviones cisterna.
El gran problema se concentró ayer en los refugiados: además de las cifras publicadas, el ACNUR dice que hay 100.000 personas que están marchando hacia Macedonia. “Mi país quiere convertirse en un inmenso campamento de refugiados”, dijo el ministro de Defensa macedonio, Nikola Kljucev, y reiteró que quienes llegan allí debe ser derivados hacia otros países. La OTAN está estudiando tres planes, en el que no aparece ninguna respuesta para el reclamo macedonio, para sofocar la crisis de los refugiados: arrojar víveres y medicamentos desde aviones, abrir una suerte de corredor interno en Kosovo o ayudar a organizaciones no gubernamentales encargadas de transportar alimentos a la provincia yugoslava.
Mientras tanto, Alemania se ganó un lugar entre los países más “solidarios”: ayer abrió un campamento en Macedonia y recibió más refugiados en su país, que ya llegan a 10.000.

 

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