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Por Mariana Enriquez El canal Magic Kids, de a poco, se está convirtiendo en una señal para adolescentes y adultos. Ante la imposibilidad de emitir cantidad de dibujos animados de los que tiene licencia Nickleodeon o el Cartoon Network o Fox Kids, Magic va ocupando su pantalla poco a poco con animación japonesa, un género que no es específicamente infantil, y que tiene un público mucho más amplio: los fans más fervientes no son los chicos, sino los adolescentes, y también una gran porción de adultos. El año pasado se desató la manía de Dragon Ball, serie de la que se estrenó una película en cine y que encontró en los chicos consumidores hambrientos de merchandising y en los fans adolescentes y adultos una alegría sin precedentes: Dragon Ball fue una de las series más esperadas por el otaku (fan de la animación y el cómic japonés) local. Después de 3 años de éxito Magic levantó Sailor Moon, la serie de origen japonés de las chicas guerreras con problemas de adolescentes de secundaria: pocas nenas en Argentina han dejado de comprar su muñeca Sailor, como si se tratara de Barbies. Otra que salió de la pantalla fue Los Caballeros del Zodíaco, repetida hasta el hartazgo. Y hace una semana se fueron las Guerreras Mágicas, una serie interesante e intrincada, pero que contaba con pocos episodios, y no podía seguir siendo repetida. Aparentemente decidido a involucrarse en la animación japonesa, todos los sábados y domingos a las 9 de la mañana (con repeticiones) el canal emite "El Club del Anime", un programa de dos horas especializado en el tema donde se emiten capítulos de Dragon Ball "explicados", además de presentaciones de material inédito: series japonesas como Bastard, rarezas, noticias del mundo manga y homenajes a clásicos como Mazinger Z. Y para reemplazar la salida de Sailor Moon y Las Guerreras Mágicas, Magic lanzó dos series nuevas. Una de ellas, Zenki, no es demasiado original: apenas una variación en clave budista de los temas de Sailor Moon y Las Guerreras. Pero la otra, Ranma 1/2 (que va a las 18) es una de las series animadas japonesas y uno de los manga (cómic) más exitosos del mundo. La autora de Ranma 1/2 es Rumiko Takahashi, una guionista y dibujante de 42 años egresada de la universidad japonesa del cómic de Kazuo Koike. Pocos autores pueden medirse con Rumiko, que es lejos la mujer que más cómics haya vendido jamás. Antes de Ranma, publicó Urusei Yatzura Lamu, en 1979, y otros, como Juliette J'Taime. Pero fue Ranma 1/2 el dibujo que le dio fama internacional, con uno de los guiones más peculiares e inquietantes que existen en el mundo de la animación japonesa. La serie es la historia de Ranma Saotonome, una persona que es "acuatransexual". Lo cual quiere decir esto: Ranma es un chico de 16 años la mayor parte del tiempo, pero cuando se moja con agua fría, se convierte en una chica muy hermosa y de peligrosas curvas, Ranma Chan. Con sólo mojarse otra vez, pero con agua caliente, Ranma vuelve a su ser masculino. La transexualidad de Ranma tiene una explicación mística: cuando estaba entrenándose en China (como en cualquier cómic japonés que se precie, Ranma es un luchador), cayó en un manantial encantado: todo aquel que se sumerge en esas aguas, carga con el hechizo de transformarse en mujer. Ranma no fue el único en tener problemas con estos manantiales sagrados de la China: su padre, Genma también cayó en uno, sólo que él no se transforma en mujer, sino en un panda gigante. Como es de suponer, Ranma 1/2, la serie, es una comedia. Pero una comedia casi erótica. Por ejemplo: cuando Ranma vuelve a Japón con su padre, quieren casarlo con una hija de Soun Tendo, el mejor amigo de Genma Saotonome. Tendo tiene tres hijas, pero se le ocurre que sólo la menor, Akane, es la ideal para Ranma. Porque a Akane no le gustan los chicos. Y como Ranma es mitad mujer.... En rigor, la serie televisiva tiene bastantes variaciones con respecto al cómic de Rumiko, pero la ambigüedad se mantiene intacta. Cosa que motiva (como notaron los fans acérrimos que ya habían tenido acceso a los episodios) que los programadores de Magic "censuren", merced a su audiencia infantil, algunas secuencias donde los personajes están desnudos, cosa que además de la obvia mutilación arbitraria del original, a veces impide comprender la acción, porque cortan diálogos importantes. La serie de TV tiene 161 episodios, y se estrenaron en Japón en 1988. Rumiko ya dejó de dibujar cómics de Ranma: lo hizo durante 9 años, siempre con un éxito inmenso, y una fórmula sencilla: humor, amor y peleas. Y un poquito de sexualidad ambigua, una larga tradición en el cómic japonés.
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