Por Mariana Enriquez
La
gran potencialidad en los últimos 15 años de la literatura latinoamericana es la mirada
femenina y la recuperación de la novela histórica, apuntó Mempo Giardinelli en la
charla abierta con sus lectores en la Feria del Libro. La afirmación sorprendió a un
porcentaje de los presentes: la proliferación de novelas de tema histórico y de
novelistas mujeres está pareciéndose mucho a una moda excluyente, de best sellers
parecidos entre sí, que ocupan el mercado sin darle posibilidad a otras temáticas. Pero
Giardinelli, a pesar de considerar saludable la aparición de estos estilos y temas, no se
mostró ingenuo. Desdichadamente, se ha convertido en una moda, afirmó,
y, ya lo decía Borges, la estupidez es popular. La moda estupidiza. No me parece
mal la búsqueda de personajes históricos y situaciones para recrearlas en una novela,
pero es verdad que hoy es un cliché y en el origen, era más legítima la preocupación
por recuperar un tono narrativo sobre nuestra historia. Es un rasgo común de
Latinoamérica: quizá el único país que está demorado en la recuperación de la
historia es Chile, probablemente porque tienen al monstruo vivo. La otra moda es la de ser
mujer y ser novelista. Hay grandes escritoras mujeres, pero me gustaría que se las lea
porque son talentosas, no porque son mujeres.
Discreto, Giardinelli no nombró a las/los escritores que considera frívolos. Y se
mostró optimista (espero no pecar de ingenuo) respecto a la narrativa
argentina actual. Es para celebrar que tengamos una literatura viva y plural.
Estamos cerrando el siglo con buenos escritores. Puedo nombrar a unas dos docenas de
escritores que son gente seria, que trabaja bien, se entusiasmaba. No los nombró,
sin embargo, aunque aclaró que está preparando una antología de cuentos llamada Los
cuentistas argentinos del siglo XXI con relatos de autores treintañeros. Aunque sí
recorrieron la charla los nombres de algunos escritores a los que admira: Juan José Saer,
Angélica Gorodischer, Ricardo Piglia, Osvaldo Soriano, entre otros.
Uno de los temas recurrentes en las preguntas del público fue la relación del escritor
con la política, o la función social del narrador. Si debe tenerla, si debe escribir
desde una ideología. Para él el escritor no tiene por qué tener una función
social. No hay por qué esperarlo. Hay escritores que han sido fundamentales para la
literatura, y que no han tenido una función social. También tiene que ver con el momento
histórico. Hoy, una mujer poeta de Afganistán tendrá un rol revolucionario. La época
determina ese papel. Yo nunca me senté a escribir queriendo hacer ideología. Pero uno no
puede evitar ser el ciudadano que es y tener las lecturas que tiene. Y hay otra cosa: por
ejemplo, la sola descripción objetiva de un poblado toba, convierte a ese texto en un
texto político. Entonces quizá es eso lo que me sucede. Aunque no tengo la elegancia de
un Saer, o de Cortázar en un cuento como Casa Tomada, por ejemplo.
EUDEBA SALIO A LA CANCHA CON LOS BOTINES DE
PUNTA
Contra la patria deportista
Por C.B.
Esa voz la
conozco, se dijo en voz alta una señora de la segunda fila, una oyente fiel
devenida en lectora en rigor de las circunstancias. A las 21.30, hora en que debía
comenzar la presentación de Jugados. Crítica a la patria deportista, la sala estaba
llena y había mucha más gente en la puerta, que formaba inútilmente cola para entrar.
En las primeras filas, algunos asistentes marcaban con el dedo la primera hoja del libro,
que esperaba la firma de Víctor Hugo Morales. Alejandro Apo, Hugo Lencina, Reinaldo
Martínez, Guillermo Salatino, Fabiana Segovia y Walter Vargas también esperaban a
Víctor Hugo. El equipo del ciclo de radio Competencia se había reunido en la
exposición para comentar el lanzamiento de un libro escrito en conjunto, que acaba de
publicar Eudeba.
El representante de la editorial universitaria, cuyo catálogo se compone en gran medida
de trabajos académicos, expuso que Jugados era el resultado de un
planteo que hicimos hace dos años, acerca de la necesidad de ofrecer productos que tengan
que ver con fenómenos que se dan en la sociedad, y no sólo con la investigación
universitaria. La alianza, que sus integrantes describieron como la unión de una de
las pocas editoras independientes con el autodenominado único equipo de periodistas
deportivos independientes (al no responder a los intereses de un multimedio), fue
detallada por Pepe Eliaschev, invitado a presentar el volumen. Es un libro valiente
en los tiempos de concentración económica, y al incorporar firmas tan famosas rompe el
mito de los intereses creados. Uno puede ser masivo y no perder la adrenalina ni el juicio
crítico, consignó.
La mirada cuestionadora sobre el panorama del periodismo deportivo marcó el tono de la
charla. Víctor Hugo, autor del prólogo del libro, sintetizó la postura colectiva:
Todos nos dicen tomá, masticá, soñá fútbol. Y no es casualidad, es el producto
del peligroso cóctel entre la televisión y el fútbol para llevarse por delante todos
los otros valores culturales. Si lo pensamos como periodistas deportivos, esto puede
parecer fenómeno, pero como ciudadanos nos genera una gran angustia.
Profundizando puntos de vista construidos frente al micrófono, el libro ofrece una serie
de ensayos para llegar al deporte por distintos recorridos. En Yo no lo vi jugar a
Martino, pero lo vi, Apo ahonda en la historia de los cracks hasta llegar a
Maradona. Diego Fucks aborda las injusticias de los jueces de fútbol; Segovia la emprende
con la ineficacia de las políticas deportivas de los organismos públicos; Martínez
investiga la violencia en las canchas y Salatino recorre la historia del tenis local. En
el acto, Hugo Lencina fue tajante al comentar su texto sobre el negocio del fútbol:
Los intereses de las empresas avanzaron sobre los principios de las empresas. Los
multimedios han comprometido nuestra profesión en los 90. A mi juicio,
definitivamente.
Otra polémica, esta vez la iniciada el año pasado con la aparición de La era del
fútbol, de Juan José Sebreli, fue retomada por Vargas. No tengo nada personal
contra Sebreli, no me enojó que fuera futbolero, ni que nunca jugó. Mi problema fue que
en nombre del espíritu democrático me obligaba a elegir entre una novela de Flaubert y
el fútbol, argumentó, para luego preguntarse: ¿Por qué nos parece bien que
Paco de Lucía esté 15 horas tocando la guitarra, que un financista haga millones sentado
15 horas en una mesa de dinero, y un tipo que le dedica mucho tiempo al fútbol, y que se
angustia y llora cuando pierde su equipo, es descalificado?.
Las principales actividades de hoy |
Estas son las principales actividades de hoy en
la Feria del Libro:
16.00 Recital de poemas Homenaje a Borges. Presentación del libro Anual
XXXIII, 1998. Coordinan María Rosa Berdou de Bello y Nora Lilián Séculi. (Sala Domingo
Faustino Sarmiento.)
17.00 Encuentro Internacional: Homenaje a Jorge Luis Borges. Los temas de
Borges. Coordina Miguel Russo. Participan Adriana Bergero, Lisa Block de Behar y Alfonso
de Toro. Auspicia la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. (Sala José
Hernández.)
18.00 Mesa redonda En la 1ª Feria, no sabía leer: ahora es escritor.
Coordina Juana Libedinsky. Participan Marcelo Birmajer, Pablo De Santis, Pedro Mairal,
Diego Paszkowski y Cecilia Szperling. (Sala Ricardo Rojas.)
Fundación El Libro. Ingrid Pellicori leerá a Alejandra Pizarnik. Coordina Solange
Fernández Ordóñez. (Salón de Lectura.)
Ernesto Sabato firmará ejemplares en el stand de Losada.
20.00 Presentación de los libros Las aventuras de Sarmiento, Las
aventuras de San Martín, y Las aventuras de Facundo Quiroga, de Araceli Bellotta, Eliana
de Arrascaeta, María Luna, Mercedes Pérez Sabbi, Graciela Repun y Nerio Tello. (Sala
Ricardo Rojas.)
20.30 Presentación del libro Ataques a la prensa. Informe 1999 de
Periodistas. Mesa redonda Un mundo con periodistas. Participan Nelson Castro, Joaquín
Morales Solá, Magdalena Ruiz Guiñazú y Horacio Verbitsky. (Sala Juan Rulfo.)
21.00 Mesa redonda Multiculturalismo, culturas fragmentadas y
globalización. Coordina Carlos Alvarez. Participan Gabriela Bianco, Nicolás Casullo,
Ruth Corcuera, Aníbal Ford y Eduardo Grüner. (Sala Victoria Ocampo.) |
|