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Por Martín Pérez  En su último disco,
Ramilonga, el cantante gaúcho Vitor Ramil hace referencia sobre una estética del frío,
que supone la principal característica de su tierra. “El frío es el símbolo de Rio
Grande do Sul”, escribe. Y agrega: “El frío inventa en nosotros una contracara
para cada característica que define al ser brasileño. El frío define a lo gaúcho,
construyendo una estética mucho más brasileña de lo que se cree”. Nativo de la
ciudad de Pelotas, Ramil es una de las voces convocadas para el álbum Porto Alegre canta
tangos, quizá el producto más acabado del aceitado vínculo cultural entre la
Municipalidad de Porto Alegre y el gobierno porteño. Un proyecto al que Ramil ayuda a
explicar con su enumeración mítica de siete capitales musicales gaúchas: Rigor,
claridad, profundidad, concisión, pureza, levedad y melancolía. Capitales a su vez de la
música a la que Porto Alegre homenajea a partir de hoy en una nueva edición del festival
Buenos Aires en Porto Alegre, esta vez dedicado al tango, y que cuenta con las visitas de
Luis Cardei, La Chicana y Adriana Varela, entre otros artistas porteños invitados al
evento que se extenderá hasta el domingo.“La interacción entre las ciudades es necesaria para buscar un espacio de expresión no sólo para los expertos en economía, sino también para quienes trabajan por la cultura en el Mercosur”, escribió en 1996 el entonces jefe de gobierno de Porto Alegre, Tarso Genro, para explicar la necesidad del multitudinario primer Porto Alegre en Buenos Aires. Desde entonces y hasta hoy, una considerable cantidad de artistas gaúchos se presentó en Buenos Aires en las cuatro ediciones del evento: fue posible acceder así a músicos como Andrea Calcanhoto, Jorge Guedes y el propio Ramil; retrospectivas cinematográficas y teatrales y varios etcéteras que no hubieran pisado suelo porteño de otra manera. Como contrapartida, sin embargo, hasta el evento que se inaugura esta noche en el bello Teatro San Pedro se había concretado un solo Buenos Aires en Porto Alegre, realizado dos años atrás, en el que se habían destacado los dos shows a sala llena de Adriana Varela. Será precisamente Varela la encargada de cerrar el próximo domingo este segundo festival, un tanto más austero que su predecesor. Con un lógico protagonismo de Varela y Luis Cardei (que tocará el viernes), por el San Pedro durante estos cinco días pasarán también Lidia Borda y Brian Chambouleyron (mañana) y el Quinteto Argentino de Cuerdas (el sábado). La velada de apertura está reservada para el show en el que los cantantes locales Bebeto Alves, Lourdes Rodríguez, Hique Gómez, Leonardo Ribeiro y Ramil –acompañados por una banda porteña dirigida por Esteban Morgado, productor del disco auspiciado por ambas municipalidades–, mostrarán en su ciudad los tangos grabados el año pasado en Buenos Aires, y presentados en el Teatro San Martín en diciembre pasado, como parte del Festival Internacional de Tango. En la nota de apertura de Porto Alegre Canta Tangos, firmada en conjunto por Margarete Moraes y María Sanchez Quesada, secretarias culturales de ambas municipalidades, se puede leer otra cita de Ramil: “El gaúcho, el que vive en el sur del Brasil, lo hace en una permanente crisis de identidad. Por eso, al igual que el candombe uruguayo y el samba, el tango está siempre presente”. Este segundo Buenos Aires en Porto Alegre, en tal caso, intentará hacer honor a esa presencia.
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