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 Hasta ahora fueron los
universitarios los que salieron a la calle para rechazar el recorte presupuestario que el
Gobierno impuso a la educación. Pero hoy será la comunidad educativa en su conjunto la
que manifestará su repudio al tijeretazo de Roque Fernández y Carlos Menem: los maestros
de la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) realizarán un paro en todo
el país y junto a los estudiantes y profesores de las universidades nacionales
–también en huelga– marcharán desde la Carpa Blanca hasta el Ministerio de
Economía. Carlos Menem exhortó a los docentes a trabajar y su flamante ministro de Educación, Manuel García Sola, recomendó a las provincias descontar el día a aquellos que paren. El paro docente promete ser uno de los más contundentes de los últimos tiempos. “Adhieren todos los gremios de trabajadores de la educación, además de las organizaciones estudiantiles”, explicó la secretaria general de CTERA, Marta Maffei. Los profesores universitarios están en huelga desde ayer y la Asociación de Trabajadores de Estado (ATE) anunció que también se plegará al cese de actividades, en rechazo al ajuste en el área de la salud pública. La CTERA se sumará así a las protestas que se desencadenaron el martes pasado en las universidades nacionales, al día siguiente de que el rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Oscar Shuberoff, anunciara que esa casa de altos estudios no tendría otro remedio que cerrar sus puertas en octubre porque el recorte presupuestario le impediría seguir funcionando a partir de esa fecha. Con 280 millones de pesos, la educación se llevó la carga más alta del ajuste impuesto por medio del decreto 455/99. De un plumazo se recortaron 100 millones a las universidades; 135 millones asignados al Ministerio de Educación para infraestructura, equipamiento y capacitación docente y 17 millones presupuestados para el área de Ciencia y Técnica. Menem llamó ayer “a la reflexión a maestros, profesores y estudiantes” y, al poner en funciones a García Solá, les advirtió que “no se dejen utilizar políticamente”. También se quejó del paro, después de asegurar que “los maestros están cobrando en tiempo y forma su sueldo y las reformas se van a seguir realizando”. Su flamante ministro consideró que la CTERA hace “un paro por las dudas” y le atribuyó motivaciones “políticas” a la huelga. Ambos coincidieron en afirmar que “no hay recortes presupuestarios, sino redefinición de partidas”. Naturalmente, la Alianza votará en contra del ajuste en educación y apoyó el reclamo de la comunidad educativa. “El paro docente está implicando un reclamo de toda la ciudadanía para que no se toquen los recursos para la educación”, explicó ayer el candidato presidencial de la Alianza, Fernando de la Rúa, después de recibir a la conducción ceterista y a quince rectores de universidades nacionales junto a Carlos “Chacho” Alvarez. Además de expresar “todo nuestro apoyo a las acciones que a las acciones que realiza CTERA”, la fórmula aliancista se comprometió a visitar hoy la Carpa Blanca, donde hoy a las 11 de la mañana se concentrará la comunidad educativa para marchar después hasta el Ministerio de Economía. “Aunque al Presidente le parezca increíble, no paramos por los salarios de los trabajadores de la educación. Paramos para defender a la escuela pública porque somos solidarios con los alumnos, sus padres, su presente y su futuro”, sostuvo Maffei, quien criticó a Menem y García Solá por sus “afirmaciones temerarias”. “Eso de hablar de desaceleración de la inversión o reasignación de partidas –explicó– es un eufemismo que significa la expresión de un Gobierno que ya no encuentra palabras para justificar sus atrocidades”. En el oficialismo, al alejamiento de Susana Decibe del gabinete nacional y al pronunciamiento de todos los ministros de Educación del país contra el recorte, hay que sumar ahora las voces discordantes de varios gobernadores del PJ. El gobernador de Santa Fe, Jorge Obeid, calificó ayer de “gorila” a Fernández y advirtió que “si Menem le sigue haciendo caso puede terminar peor que (Raúl) Alfonsín”. En privado, el pampeano Rubén Marín transmitió a la CTERA su apoyo al reclamo docente. Y, en su carrera a la presidencia, el bonaerense Eduardo Duhalde prometió socorrer financieramente a las universidades de su provincia, además de instruir a sus diputados para que mañana voten en contra de la reducción del presupuesto educativo en la Cámara baja. Allí, el jefe del bloque del PJ, Humberto Roggero, recibirá hoy a los universitarios para ratificarles el voto de esa bancada a favor de la restitución de los 100 millones de pesos que le quitaron a las casas de altos estudios. En medio de la crisis, García Solá anunció su gabinete: Sergio España ascenderá al rango viceministro; Juan Carlos Del Bello seguirá al frente de Ciencia y Técnica, porque le prometieron el reintegro de 15 de los 17 millones recortados a esa área; y en Políticas Universitarias, asumirá Aníbal Jozami.
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