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“Menem no quiere que la protesta se nacionalice, pero ya fracasó”

El rector de la UBA dijo a Página/12 que el Presidente fija su crítica en él para desviar la atención. Ayer, los rectores universitarios se reunieron con De la Rúa y Duhalde. Hoy lo harán con García Solá.

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Por Javier Lorca
y Cecilia Sosa


t.gif (862 bytes)  “Menem está intentando evitar que se federalice y nacionalice la protesta contra el recorte a la educación. Pero ya fracasó y están reclamando todas las universidades del país”, dijo a Página/12 Oscar Shuberoff, rector de la Universidad de Buenos Aires. “Además –agregó–, quiere centrar el problema en el sistema universitario, cuando el ajuste afecta al conjunto de la educación pública.”
Así, Shuberoff respondió a los dichos del Presidente, quien focalizó en la figura del rector radical sus críticas a los reclamos universitarios. Cuando hoy se cumpla una semana de desatada la protesta, el nuevo ministro de Educación Manuel García Solá recibirá, a las 19, a los rectores de las universidades nacionales. Y también planea convocar a los estudiantes de la FUA.
Ayer, las autoridades de las universidades nacionales sacaron sus baterías para enfrentar el ajuste presupuestario. Los rectores de las universidades nacionales –tras una sesión del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)– se reunieron con los candidatos a presidente de la Alianza y del justicialismo, con Fernando de la Rúa y Carlos Chacho Alvarez, por un lado, y con Eduardo Duhalde por otro (ver aparte). También se entrevistaron con legisladores de la oposición y hoy lo harán con los del oficialismo. Además, el CIN resolvió que cada institución haga una presentación judicial, tal como ya hizo la UBA, para lograr la nulidad del decreto que redujo sus fondos en cien millones de pesos.
–El presidente Menem centró en usted, Shuberoff, sus críticas contra las protestas universitarias –interrogó Página/12, ayer por la tarde.
–Menem está intentando evitar que se nacionalice y federalice la protesta contra el recorte a la educación. Pero no lo logró. Lo que él quiere es aislar lo que ocurre en Buenos Aires del resto de la Argentina. Pero las protestas son muy importantes en todas las universidades nacionales. Además, el presidente intenta centrar el problema en el sistema universitario. Pero el recorte afecta a toda la educación pública.
–¿Cómo va a seguir su reclamo?
–Hoy, los rectores del CIN decidimos promover acciones judiciales desde todas las universidades, como ya se hizo desde la UBA. También se decidió reclamarle al Parlamento que haga respetar el presupuesto que votó para este año.
–¿Confía en que van a lograr buenos resultados?
–Nuestra expectativa es que el Congreso salve a la educación pública. Y confiamos en la Justicia. En un caso similar, ya los jueces se expidieron a favor nuestro.
–Ya pasó una semana desde que anunció que, con el recorte de 17 millones, la UBA deberá cerrar sus puertas el 1º de octubre. ¿Hasta cuándo cree que durarán las protestas en la calle?
–La indignación pública es de tal envergadura que no se acabó con la renuncia de la ministra (Susana) Decibe. Las manifestaciones públicas sólo terminarán cuando, ya sea vía legislativa o vía judicial, se dé marcha atrás con el recorte.
Cuando concluyó la sesión del CIN, realizada en Buenos Aires, los rectores participantes (fueron 31 sobre 36 universidades nacionales) se dividieron en dos grupos. Algunos viajaron hacia La Plata, para encontrarse con Duhalde. Otro grupo, encabezado por el propio Shuberoff y por el titular del consejo, Enrique Isola, mantuvo una entrevista con De la Rúa y Alvarez, para interiorizarlos de su reclamo. Se fueron de la sede del gobierno porteño cosechando el apoyo de los candidatos a presidente y vice de la Alianza UCR-Frepaso. Antes del encuentro, se habían entrevistado con el presidente del bloque de diputados nacionales radicales, Federico Storani.
“Si sigue el recorte, la universidad argentina tendrá que cerrar en su conjunto”, dijo el rector de la Universidad de Salta, Juan Carlos Go- ttifredi. “La reacción social demostró que quien quiera gobernar el país deberá seguir a la gente y no lo que manda el FMI”, concluyó. “Queremos que el miércoles la Cámara de Diputados deje sin efecto el recorte presupuestario. Por eso, decidimos apoyar el proyecto presentado por el diputado Mondino”, comentó Isola. Tras la reunión, varios rectores describieron a Página/12 la situación que viven sus universidades. “Estamos en rojo. El déficit recae en asuntos como las jubilaciones y servicios”, dijo José Martín, rector de la Universidad de Cuyo. El rector de la Universidad de San Juan, Tulio del Bono, aseguró que el ajuste “afecta a la totalidad de los programas de becas y de equipamiento. Sólo se podrán pagar sueldos y servicios”.

 

“La UBA no es la única”
“En los medios lo único que se ve es lo que pasa en la UBA. Pero no es la única”, se enojó, en diálogo con este diario, el vicerrector de la Universidad de Misiones, Eduardo Solís: “En Misiones quedarán eliminadas toda la cobertura social que se les da a los estudiantes, las becas, los albergues y los comedores. El consejo superior tiene la voluntad de sostener el dictado de clases hasta las últimas consecuencias, pero no sé hasta cuándo se podrá”, lamentó. Por su lado, el rector de la Universidad de Villa María, Carlos Omar Domínguez, dijo: “No podremos seguir mucho más. Nuestra casa tiene sólo tres años y no puede funcionar con el mismo presupuesto del año pasado”.



Una clase de Derecho en la calle

Por C. S.

“La educación está regida por los principios constitucionales de equidad gratuidad, autonomía y autarquía. Esos son derechos de cada uno de ustedes. Y nadie tiene derecho a manotearlos. Las universidades son personas jurídicas de administración pública no estatales. No estatales”, subraya el doctor Germán Bidart Campos. Está sentado, con las piernas cruzadas, sobre el pavimento de la avenida Figueroa Alcorta. A sus pies, decenas de estudiantes de la Facultad de Derecho se aglutinan para no perderse las palabras que salen a bajo volumen de un megáfono. Los baches del sonido se llenan con elogios: “Es todo un lujo –dice Dora Portugal, una alumna de 40 años–. Bidart Campos, además de ser uno de los mejores constitucionalistas argentinos, está dando una muestra de gran humildad dando clase en el medio de la calle. Este es un ejemplo que ni la Constitución predica”, se emociona.
“La Constitución consagra derechos y garantías sociales. Y, a pesar de que pueden no estar reglamentados, siempre tienen un reducto esencial que debe ser buscado y aplicado”, instruye el profesor, que a lo largo de una hora reloj no escatima citas, lectura de artículos e incisos ni referencias bibliográficas.
El público, en el que abundan los trajeados, toma nota. Con voz pausada y tranquila, el constitucionalista enseña desde el piso como si estuviera en el estrado. Y el esfuerzo tiene una razón: “Son también los estudiantes los que están encomendados a defender el carácter supremo del derecho a la educación y a exigir que se cumpla”, dice a Página/12, una vez que, concluida la clase, se ve rodeado de estudiantes que se acercan a pedir su firma sobre ejemplares de la Constitución, libros de su autoría, apuntes o cualquier papel. Sebastián se retira orgulloso con su trofeo: “Adelante, siempre, con coraje y en paz”, escribió Bidart Campos.
El tráfico atascado insiste con sus bocinazos. Pero la clase sigue adelante. “Se dice que la educación debe ser gratuita y equitativa para todos. Pero, ¿qué quiere decir equidad? Que además de ser gratuita la universidad debe dar subsidio a quienes por falta de recursos no puedan hacerla”, alega Bidart Campos. Un grupo de motos burla el vallado policial y se cobra el retraso con un arsenal de insultos a los alumnos. Por la mitad de Figueroa Alcorta, Gastón Sánchez se acerca con a su hijo. “Que cierre la UBA es terrible. Fue mi casa de estudios, es el lugar de producción científica por excelencia y es también, el futuro de mi hijo”, dice mientras mira a Rodrigo, que corre atrás de un remolino de volantes repudiando el recorte. En la cima de su escalinata, el imponente edificio de la facultad está embanderado con la consigna “La UBA no se cierra”. Durante del día, no vivió mucha actividad: la mayoría de los docentes se sumó a la consigna de trasladar la clase a las calles. “Nunca se vio tanta gente –alega Juan Manuel Pedreira, 21 años–. Esta facultad siempre tuvo una actitud fría. Es una suerte que una eminencia como él se haya solidarizado”, comenta y señala al profesor, que ahora se enfrasca en la lectura del artículo 75 de la Constitución. A metros, los automovilistas maldicen.
La clase llega a destino: Bidart Campos prueba la inconstitucionalidad del recorte presupuestario y defiende a rajatabla la autonomía universitaria. “Gracias, juventud. Ojalá que también a ustedes les toque dar clase, alguna vez, a los futuros alumnos”, se despide.


LA PROVINCIA PONDRIA LA PLATA
Promesa bonaerense


t.gif (862 bytes) Los rectores de las universidades nacionales con sede en la provincia de Buenos Aires consiguieron ayer una promesa: el gobernador Eduardo Duhalde les aseguró ayer que si el gobierno nacional no da marcha atrás con el recorte de 100 millones de pesos al presupuesto universitario, el Estado bonaerense aportará a las casas de estudio los recursos que les sean quitados.
La promesa de Duhalde no puede ser leída sino en el marco de su campaña presidencial. Así, el gobernador bonaerense se diferenció de la administración menemista y al mismo tiempo del candidato de la Alianza, Fernando de la Rúa, quien aseguró que restituirá el presupuesto recortado a las universidades en caso de ser elegido presidente, pero que no anunció ningún socorro inmediato con fondos de la comuna porteña a la Universidad de Buenos Aires.
Duhalde reunió ayer por la tarde en La Plata a los rectores de las casas de altos estudios con sede en el territorio bonaerense y, después de escuchar un informe acerca del impacto del recorte en cada una de ellas, les explicó que “desde la época de la colonia tenemos en la provincia cinco universidades; hoy tenemos diez con extensiones que llegan a todos los rincones, con carreras que tienen que ver con la producción regional. Hemos progresado mucho y no vamos a retroceder ahora por un problema presupuestario”. Después les dijo: “Quiero que sepan que tienen garantías de que no van a tener dificultades por falta de fondos en caso de que no podamos modificar el temperamento nacional porque la provincia se hará cargo”.
El mandatario bonaerense aseguró a los rectores que los diputados duhaldistas votarán mañana en contra del recorte y les anticipó que “vamos a ser muy duros si el Gobierno insiste”. La idea de Duhalde para el caso de no poder detener así la poda dispuesta por la administración central es socorrer a las universidades con subsidios del “fondo provincial anticrisis”. Para cumplir con su palabra, deberá desembolsar entre 25 y 30 millones de pesos de las arcas provinciales.

 

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