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Franco Squillari estuvo a un solo punto de dar un nuevo batacazo y clasificarse para las semifinales del Abierto de Roma, pero no pudo aprovechar su momento favorable y finalmente cayó ante el número 7 del mundo, el español Alex Corretja, por 5-7, 7-6 (7-4), 7-5 en casi tres horas de juego. Pese a la derrota, Franco quedará ubicado por primera vez en su carrera dentro de los 40 mejores del mundo y se llevó un premio de 50.800 dólares. Con un set ganado y el marcador 5-4 en el segundo en su favor, el argentino dispuso de un match-point, que no pudo capitalizar porque su tiro de aproximación se estrelló en la red. Luego de ese golpe anímico, el catalán se recuperó y forzó el tie-break, que finalmente se llevó 7-4. En el set decisivo, Corretja se colocó rápidamente 5-2, una ventaja que parecía indescontable. Sin embargo, con mucho coraje y arriesgando en cada pelota, Squillari levantó seis puntos de partido hasta lograr la igualdad en 5. En ese momento prevaleció la mayor experiencia del español para quedarse finalmente con el juego. Me apuré para definir en el segundo set admitió Squillari tras el partido. Aunque perdí estoy muy conforme porque pese a que me cansé mentalmente, en el tercero nunca bajé la guardia. La gente me aplaudió ya que no me entregué nunca, y eso al público le gusta. Este resultado se suma a la seguidilla de buenas actuaciones de los tenistas argentinos en lo que va de la temporada de polvo de ladrillo. Squillari se adjudicó hace quince días el torneo de Munich y Mariano Zabaleta llegó a la final del abierto de Hamburgo la semana anterior, donde cayó con el chileno Marcelo Ríos. En estos últimos torneos se produjo un verdadero boom de jugadores sudamericanos y espero que releve al boom español. Ojalá que también tengamos el mismo éxito que tuvieron ellos, remarcó Squillari.
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