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La Bolsa festejó el apoyo a la convertibilidad

Sin la histeria de los rumores sobre una devaluación del peso, las acciones líderes subieron 4,3 por ciento. Menem telefoneó a Cardoso para asegurarle que no tocará el tipo de cambio.

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Pese al repunte de los papeles empresarios en el recinto no domina el entusiasmo. Manda la prudencia.
Brasil también registró un fuerte repunte, al subir 6,1 por ciento. El Dow Jones mejoró 1,6.

t.gif (862 bytes)  Carlos Menem le aseguró a Fernando Henrique Cardoso que no habrá una devaluación del peso. Fue a través de un llamado telefónico efectuado anteanoche. Para el brasileño, la comunicación de Menem asegurándole la continuidad de la convertibilidad habrá sido el único dato tranquilizador del día, después de que una denuncia periodística lo había involucrado en un hecho de corrupción. Desde el punto de vista de los financistas, el diálogo Menem-Cardoso fue un ingrediente adicional que ayudó a revitalizar el mercado bursátil. Ayer, el índice de acciones líderes MerVal subió 4,3 por ciento y los títulos públicos se elevaron hasta 1,7 por ciento.
Al principio de la rueda, el MerVal mostraba una clara tendencia negativa. Era lo esperable, ya que el día del feriado los ADR argentinos (certificados de papeles locales) habían bajado con fuerza en Nueva York. Pero hacia el mediodía la tendencia varió. Sustentadas por el signo positivo en Wall Street, las acciones comenzaron un camino ascendente que se potenció en la hora final de operaciones. Fue cuando el Fondo Monetario dio a conocer su visto bueno a la nueva meta fiscal pactada con Economía, por un total de 5100 millones de dólares (ver aparte). El flamante acuerdo contempla parte de los recursos que el Gobierno destinará al sector educativo después de dar marcha atrás con el recorte presupuestario. El número dos del FMI, Stanley Fischer, no quiso dejar dudas tras el anuncio oficial, ofreció un fuerte respaldo al gobierno de Menem, y felicitó a la Argentina.
Durante la sesión se pactaron negocios por 62,4 millones de pesos, un monto superior al de las últimas ruedas, con los bancos de inversión estadounidenses recomendando a sus clientes comprar acciones. Perez Companc fue el papel que más subió: 11,5 por ciento, seguido por Banco Galicia (6,5%); Renault (6,2%); Bansud (5,4%) y Acindar (5,3%). Del total de acciones negociadas, 25 subieron; 12 bajaron y 9 no mostraron cambios respecto al cierre anterior. En lo que va de la semana, el MerVal lleva ganado el 1,5 por ciento, pero el balance mensual es negativo en un 7,95 por ciento. El mejor clima bursátil empujó hacia abajo a las tasas de interés. De hecho, el “call” (tasa interbancaria) cedió del 7,6 al 7,4 por ciento en pesos y del 6,80 al 6,60 por ciento para los préstamos dolarizados. “No hay que entusiasmarse. Los temores a una devaluación se han disipado; fue contundente el apoyo explícito del oficialismo y la oposición. Pero no hay que olvidar que las últimas bajas también fueron impulsadas por una posible alza de la tasa de corto plazo en los Estados Unidos. Y esa medida quitaría atractivos a los mercados emergentes”, analizó un analista de un banco de inversión.
La vitalidad del índice Dow Jones, avanzando 1,6 por ciento, arrastró consigo a las demás bolsas latinoamericanas. San Pablo se anotó la primera suba en ocho ruedas, con un 6,1 por ciento, mientras que la mayor tranquilidad política dio también aire al real que se revaluó el 1,5 por ciento y quedó a 1,72 unidad por dólar. Por otra parte, la bolsa mexicana subió 3,3 por ciento y la chilena, el 2,8.

 

Defensa del uno a uno

El próximo jueves, banqueros, empresarios, políticos y economistas darán un apoyo político a la convertibilidad, informó el presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Eduardo Escasany. Durante el encuentro —que fue convocado por los banqueros por expreso pedido del Palacio de Hacienda—, se prevé que el ministro de Economía, Roque Fernández, trace los lineamientos de la política oficial para los últimos meses de su gestión al frente del Palacio de Hacienda. Escasany explicó que “por iniciativa de los bancos y la coordinación de Economía realizaremos un foro económico y político para debatir sobre la actualidad económica argentina”. Por su parte, el referente económico de la Alianza, José Luis Machinea, informó que todavía no fue invitado a ese foro. “Voy a ver de qué se trata cuando me llegue la invitación. Si la idea es defender la convertibilidad y la estabilidad no tengo ningún problema en ir”, afirmó.

Una mano del Fondo Monetario

El Fondo Monetario le dio ayer una mano a su alumno preferido, al anunciar que aprobó la tercera revisión del Acuerdo de Facilidades Ampliadas firmado con Argentina. En medio de una ola de rumores sobre la posibilidad de un quiebre de la convertibilidad, Stanley Fischer, el número dos del FMI, elogió la “prudente” política económica de Roque Fernández. Después de ese respaldo, y entonado por la recuperación del mercado bursátil, el viceministro Pablo Guidotti afirmó que no escuchó “a ninguna persona seria de Wall Street que estuviera dudando del mantenimiento del régimen de convertibilidad”.
Con respecto a la dolarización, el FMI no fue tan enfático. Fischer aseguró que ningún miembro del directorio tomó posición firme a favor ni en contra de la dolarización. Opinó que la dolarización es simple “a nivel de concepto” pero su puesta en práctica es compleja. Y agregó que si Argentina toma la decisión de hacerlo “implicará un largo proceso de negociación con Estados Unidos”.
Según estimaciones del FMI, la economía bajará este año 1,5 por ciento debido a la crisis brasileña. Fischer dijo que Argentina “merece ser elogiada por mantener sus políticas prudentes” frente a los shock externos “que han tenido un impacto significativo en la economía”. Pero luego de los elogios vinieron los reclamos. El Fondo espera “progresos adicionales” en la agenda de reformas estructurales: la ley de convertibilidad fiscal y de coparticipación federal.
Por su parte, Guidotti consideró que “los mercados se han calmado”, ya que evaluaron que los rumores sobre una devaluación del peso “no tenían fundamentos”. Y concluyó que “hoy en día, nadie que mínimamente tenga uso de razón piensa que a la Argentina le conviene algún cambio”.


 

FRACTURA EN EL FRENTE RURAL. PROPUESTA DE LA ALIANZA
El campo va dividido a un nuevo paro

t.gif (862 bytes) El frente de las cuatro cámaras del campo se quebró luego de que el Gobierno sedujera a la Sociedad Rural y a Confederaciones Rurales Argentinas. Las otras dos entidades marginadas de las negociaciones, Coninagro y la Federación Agraria, decidieron como respuesta continuar con la protesta anunciando un paro de tres días con movilizaciones en todo el país, con una marcha de cierre sobre Plaza de Mayo.
Pese a la esperanza que tienen algunos ruralistas de conseguir respuestas a algunos de sus reclamos, el viceministro de Economía, Pablo Guidotti, salió a desinflarlas: “No se va a modificar ningún aspecto de la reforma tributaria”, uno de los principales pedidos del campo.
En ese clima de enfrentamiento, la Alianza entregó ayer a la dirigencia agraria la propuesta que llevaría a la práctica si la coalición gana las elecciones. Entre las propuestas, Fernando de la Rúa y Carlos Alvarez sugirieron la implementación de financiamientos “especiales” para algunos productos o servicios que utiliza el agro, como el caso de la rebaja en el costo de peajes, así como beneficios adicionales como mermas en los valores del consumo eléctrico.
En tanto, el referente económico de la Alianza, José Luis Machinea, acusó a Eduardo Duhalde y a Domingo Cavallo de hacer “declaraciones imprudentes” que afectan la estabilidad del peso. “Por caso, Duhalde que habla de crear un club de deudores”, señaló. Machinea sostuvo que “la Argentina no se merece un doble discurso”. Además, Machinea propuso hacer un recorte de gastos del orden de los mil millones de dólares mediante la eliminación de 17 secretarías y 34 subsecretarías del área de la Presidencia, además de la anulación de los polémicos Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y de los gastos reservados y de publicidad.

 

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