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Por Cecilia Bembibre  La pelota de
golf sobrevolando el campo, las pelusas casi imperceptibles sobre el traje de César
Mascetti o la lágrima de un desconocido pronto aparecerán en pantalla con una nitidez
nunca vista. Estas y otras imágenes integraron las primeras pruebas de televisión de
alta definición en la Argentina, con vistas a la futura implementación del sistema
televisivo digital. Una primera aproximación a la HDTV (high definition television,
televisión de alta definición) estuvo a cargo de la Comisión Nacional de Comunicaciones
(CNC), que mostró imágenes producidas por los canales de aire, y material con el que el
sistema se promociona en Estados Unidos, en un televisor especialmente importado en
préstamo para la ocasión. En Estados Unidos, las emisiones satelitales comenzarán a
fines de este año, lo que configura una enorme revolución en el mercado de los aparatos
receptores. Los actuales empiezan a parecer viejísimos.A nivel internacional, la televisión digital atraviesa un período de prueba. Se planifican ensayos de transmisión –generalmente de eventos especiales– como preámbulo a la introducción de televisores de alta definición al mercado, y, ahí sí, el lanzamiento del sistema digital a nivel comercial. Los primeros pasos en la Argentina incluyeron la creación de un Comité Consultivo sobre Televisión Digital (presidido por Roberto Uanini, vicepresidente de la CNC) y el establecimiento del marco normativo. Con un sistema de audiencia pública, se convocó a todos los autores a determinar la mejor norma. Se decidió adoptar el ATSC (Advanced Television Systems Committee), sistema usado en Estados Unidos y Canadá, en el futuro en México y, presumiblemente, también en Brasil (en el mundo hay tres: el japonés, el europeo y el norteamericano). “Si la mayoría del continente adopta esta norma, nos vamos a ver beneficiados por la economía a escala, y por una mayor accesibilidad en el menor tiempo”, evaluó Uanini. Los canales de aire de la Capital y varias señales del interior del país ya solicitaron autorización para iniciar las pruebas de transmisiones, y se les asignó una frecuencia distinta a la de la programación analógica que ya emiten. La TV digital es considerada como la próxima revolución tecnológica en el campo del entretenimiento hogareño, porque combina lo mejor de todos los medios disponibles hasta ahora: canales de radio AM-FM, sonido digital equivalente al CD y, en el futuro, funciones de computadora personal y acceso a Internet. La HDTV utiliza el mismo ancho de banda (seis megahertz) que se emplea en el sistema analógico. Sin embargo, puede transmitir seis veces más información que el sistema que lo precede: esto se traduce en mejor calidad de imagen y sonido. En la actualidad, la imagen de televisión está compuesta por 525 líneas que son escaneadas horizontalmente. Las imágenes de HDTV se crean al escanear 1080 líneas. Al agregar el doble de líneas multiplica la cantidad de pixeles (los pequeños puntos que crean una imagen más clara y detallada). La pantalla analógica contiene alrededor de 300.000 pixeles; la de HDTV más de dos millones. El resultado es una imagen más profunda, en la que se distinguen con claridad colores y texturas, acompañada de “sonido envolvente”. Otra de las innovaciones es el formato más ancho (en los llamados “home theater”) de los nuevos televisores, y los canales de sonido separados, que se asemejan más a la percepción sensorial humana. La pantalla más horizontal posibilita la lectura de texto pequeño. Además de hacer más legible el subtitulado, facilitará el empleo de la pantalla como monitor. La transición hacia el sistema digital implica una gran inversión de los canales argentinos en equipos y tecnología. “Es como crear una televisión paralela –estimó Uanini–, y eso a las emisoras les costará entre siete y trece millones de pesos.” Los dos primeros años son de prueba, y progresivamente se irán ampliando las horas de transmisión digital hasta reemplazar el sistema analógico en su totalidad. Hay que tomarlo con calma: el proceso llevará entre diez y quince años. “En Argentina ya se adoptó el sistema de muerte súbita de la televisión analógica. Ahora no se hará el traspaso total de sistema hasta que todos tengan acceso a la televisión digital”, aclaró Uanini. Los actuales aparatos de televisión, cámaras o videograbadoras no funcionarán bajo el nuevo sistema de transmisión digital. Los nuevos televisores, en cambio, sí captarán las señales analógicas. Todo indica, no obstante, que queda aún un largo camino por recorrer antes de que la televisión digital –la programación y los televisores– sean de acceso masivo. Hoy los precios de los aparatos receptores en Estados Unidos llegan a 9 mil dólares, y en la Argentina ni siquiera están disponibles al televidente ansioso. Uanini fue realista: “La gente me pregunta ¿me compro un televisor analógico o uno digital? Yo les digo que sigan comprando tranquilos el analógico”. Sin embargo, en el corto plazo la CNC realizará proyecciones en televisión digital abiertas al público, aunque más no sea para dar una idea del futuro que se acerca.
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