| Por Nora Veiras  Con el eco de los bocinazos de
la masa de camiones y colectivos que marchaban por Callao, los ministros de Educación y
los gremios docentes ratificaron su compromiso para que el impuesto sobre autos, aeronaves
y embarcaciones “se cumpla tal como dice la ley y se destine sin excepciones
exclusivamente al aumento del salario de los maestros”. “Si los docentes pagan,
nadie tiene por qué dejar de hacerlo”, dijo el ministro de Educación, Manuel
García Solá, siguiendo el argumento de la secretaria general de la CTERA, Marta Maffei.
La dirigente anunció que la Carpa Blanca se levantará “cuando se realice el cobro
efectivo del impuesto y el pago a los maestros”.
–¿Es decir que en julio se levanta? –le preguntó un periodista.
–En julio habrá que ver si se recaudaron los 700 millones de pesos que establece la
ley de Incentivo Docente –respondió Maffei.
Después de más de cinco horas de debate, ministros, y gremialistas dieron una
conferencia de prensa en la que los roles parecieron intercambiarse. El titular de
Educación, Manuel García Solá, leyó el comunicado conjunto del Consejo Federal, la
Comisión Bicameral de Diputados y Senadores y las organizaciones gremiales, en el que
“ratifican su compromiso conjunto para extremar los recaudos que aseguren el efectivo
cumplimiento de la ley de Incentivo Docente, que establece taxativamente que el producido
del impuesto creado se destinará en su totalidad al mejoramiento de la retribución
docente, sin que pueda ser afectado por desvíos, recortes o afectaciones de ninguna
índole, ni imputado al pago de retroactivos, deudas, saneamiento o cualquier otro destino
diferente al previsto por la ley”.
Flanqueado por las responsables de Educación de Entre Ríos, Blanca Osuna, y de Santa Fe,
María Rosa Stanoevich, el ministro remarcó que “a partir del 8 de agosto será
obligatorio exhibir la oblea que prueba el pago del impuesto” y destacó que
“vamos a alertar a los que hagan fraude”. Los criterios para distribuir el fondo
todavía no están definidos. Maffei, que estaba parada a un costado de la mesa, empezó a
contestar una pregunta y los cronistas a coro le pidieron: “Señora acérquese a los
micrófonos”. García Solá, el único hombre sentado cerca de ella, le cedió la
silla y se produjo el insólito desenlace de la rueda de prensa: la titular de la CTERA
continuó informando mientras el ministro se paró primero detrás, al lado de la
bonaerense Graciela Giannettasio, y luego se retiró porque –dijeron sus
colaboradores– “recibió un llamado”.
Maffei explicó que en la comisión integrada por los ministros de Misiones, Mendoza,
Corrientes, Neuquén, Chubut, y la ciudad de Buenos Aires “acordamos que el 93 por
ciento del total de lo recaudado se distribuya en forma proporcional a los cargos en todo
el país y el 7 por ciento para beneficiar a las ocho provincias con salarios de bolsillo
inferiores a los 300 pesos, Chaco, Formosa, Entre Ríos, Corrientes, Chubut, Misiones,
Salta y Jujuy”.
Maffei rechazó las críticas de los empresarios del transporte por el pago de impuesto
porque “entre 1992 y 1999, el boleto aumentó un ciento por ciento, es decir que no
entendemos por qué no quieren pagarlo” y suscribió los cálculos realizados por
Educación según los cuales, la incidencia del impuesto en el costo del boleto no llega a
un centavo”. La dirigente dijo que “el primer semestre se pagará todo junto, de
enero a junio”.
–¿Qué pasará si no se llega a los 700 millones para repartir? –le preguntó
Página/12
–Para nosotros, el primer semestre son 350 millones de pesos, eso es lo que se
liquidará en julio. En el segundo semestre se recaudará lo que falte.
La comisión integrada por los seis ministros y los cuatro gremios nacionales (CTERA, los
privados de SADOP, los técnicos de AMET y la UDA)tiene que precisar la equivalencia
salarial entre el maestro de grado y el profesor de educación media: en principio, se
equipararía el haber de un maestro al de un profesor que dicta 15 horas cátedra.
| La oblea como botín A un par de días de iniciado, al Fondo Nacional de Incentivo Docente ya le
encontraron la vuelta. Algunos automovilistas denunciaron, a través de las radios, que se
encontraron con el parabrisas de su vehículo roto y la oblea robada. Según los rumores,
ésta está siendo vendida en la calle a 20 pesos. Carlos Silvani, titular de la AFIP, sin
embargo, insistió en que “la oblea debe ir pegada al vidrio” y en que es
“ilegal” llevarla en cualquier otro lado. Al conocerse algunas denuncias sobre
la reventa de obleas, Silvani señaló que no se puede llevar la oblea dentro del auto.
“Es como si usted tuviera la patente del auto en su casa –señaló–, no
está donde tiene que estar, es ilegal”. Por otra parte, opinó “yo nunca quise
la oblea, pero lo dice la ley. Me parece que éste no es el mejor sistema. El mejor lo
sugerí, es poner un recargo a la patente, y nadie tiene que ir al banco y nadie tiene que
hacer nada”. |
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