Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


Otro juez pidió indagar a Moneta
y lo obliga a abandonar el refugio

Literas pidió indagarlo bajo los cargos de  asociación ilícita y defraudación fiscal. Ya pesa sobre él una orden de captura del juez Leiva.

Raúl Moneta está acusado de asociación ilícita y defraudación fiscal.
Prófugo de la justicia federal mendocina y reclamado por la porteña.

na16fo01.jpg (7734 bytes)
Por Raúl Dellatorre

t.gif (862 bytes) Al banquero menemista Raúl Moneta se le cerró ayer la puerta de salida para zafar de la orden de captura dispuesta por el juez federal mendocino Luis Leiva. En una causa paralela que se sustancia en los tribunales porteños, el magistrado Gustavo Literas lo citó a prestar declaración indagatoria para el próximo 1º de julio, bajo los cargos de asociación ilícita y defraudación fiscal. Si se presenta, podría ser detenido en cumplimiento del fallo de Leiva. Si no se presenta, el juez Literas podría dictarle la orden de detención. Por ahora, el principal accionista del CEI Citicorp Holding y ex director de Telefónica de Argentina se mantiene en la única situación que le asegura la libertad: prófugo.
Las defensas de Moneta y de otros nueve directivos del Banco Mendoza (dos de ellos actualmente en prisión) pretendían desconocer la competencia de Leiva y que la causa pasara al juzgado de Literas, donde esperaban un trato más amable para sus defendidos. El juez porteño pidió la inhibición de Leiva para unificar las causas en sus manos, lo cual fue interpretado, en su momento, como una maniobra a favor de Moneta. Pero la citación de ayer ordenada por Literas lo despega de las maniobras políticas en favor del banquero prófugo.
Literas ordenó la citación de Moneta y de los restantes miembros del último directorio del Banco República tras analizar los elementos que obtuvo en el allanamiento al Banco Central, el viernes último. En esta causa se investigan las supuestas irregularidades que habría cometido la conducción del República hasta su caída, fundamentalmente en operaciones cruzadas con el Banco Mendoza, bajo control de Moneta desde su privatización.
De comprobarse las irregularidades denunciadas, no sólo quedaría comprometida la situación de Moneta, sino también la de las propias autoridades del Banco Central. Tal cual informó el propio juez interviniente, es a partir de las mismas constancias que obraban en manos de la autoridad monetaria que se resolvió la imputación contra el directorio del Banco República. Por lo tanto, recaería sobre Pedro Pou y otros miembros del directorio del Central el cargo de no haber actuado de acuerdo con sus obligaciones en el momento en que tomó conocimiento de los manejos irregulares.
La documentación secuestrada el viernes último en el Banco Central abarca desde la homologación de la fusión entre el Mendoza y el República hasta las auditorías realizadas por el BCRA en el último. Anteriormente, el mismo magistrado había practicado allanamientos en las sedes de ambos bancos, pero recién a partir de los elementos recabados este último viernes Literas estuvo en condiciones de imputarle cargos a Moneta, a una decena de directores y a un apoderado “con actuación directa” en algunas de las operaciones bajo sospecha.
La defensa de Moneta había pedido ante Literas el beneficio de eximición de prisión inmediatamente después de que Leiva dictara la orden de detención. El magistrado porteño se la otorgó, contra una fianza de 100 mil pesos y determinados compromisos que debía cumplir el investigado. Según relató Literas a Página/12, “el beneficio fue otorgado pero nunca efectivizado, porque el solicitante nunca se presentó ni depositó la fianza en el juzgado; hicieron una presentación ante escribano que este tribunal no consideró válida”. No obstante, con la nueva citación, “aquel pedido de beneficio se transforma en abstracto, porque ahora tiene obligación de presentarse y, si no lo hace, le cabe el pedido de captura”, agregó el magistrado.
Literas está a la espera de una resolución del juez Leiva respecto del pedido de inhibición que le formulara el primero, para unificar las causas en la Capital. Pero Leiva no parece dispuesto a ceder su investigación, centrada fundamentalmente en el proceder de los directivos del Banco Mendoza. “Yo no descarto que siga así, con dos investigaciones paralelas, si se ve que parten de hechos diferentes”, señaló Literas a este diario.”La responsabilidad de los directivos del República es el paso previo a determinar la que le corresponde a las autoridades del Banco Central, y seguiremos la investigación en ese camino”, adelantó.

 

Sin salida

El juez federal de Mendoza Luis Leiva denegó ayer el pedido de eximición de prisión de Raúl Moneta. El fallo sucede a otro dado a conocer el miércoles por el juez de la misma provincia Alfredo Rodríguez, quien rechazó el hábeas corpus presentado por la defensa del ex banquero menemista, en busca de resguardar la libertad de su cliente. El argumento de los abogados de Moneta era que la orden de captura en su contra tenía “naturaleza ilegítima”, recurso que el juez Rodríguez calificó de “improcedente”. Por otra parte, Leiva dispuso anoche la excarcelación de Hugo Emili bajo fianza y se esperaba que pudiera tomar la resolución con respecto de Jorge Rivarola, los dos únicos ex funcionarios del Mendoza detenidos.


 

SPOLSKI NO QUIERE VER AL JUEZ CAVALLO
Un golpe al corazón

t.gif (862 bytes) “Si el médico forense no confirma el problema cardíaco aducido por (Alberto) Spolski, será traído por la fuerza pública”, señaló a Página/12 un colaborador del juez Gabriel Cavallo. Y agregó que el médico fue enviado al Tigre, donde se encuentra el ex banquero, acompañado por un policía. Esa era la situación del ex presidente del Banco Patricios tras eludir ayer la cita con el magistrado. Una alta fuente judicial confirmó a Página/12 que el banquero, en el mejor de los casos, tendrá 48 horas improrrogables para presentarse a declarar en la causa en la que lo acusa de vaciamiento de la entidad. En esa misma causa, Cavallo procesó a Pedro Pou, titular del Banco Central.
La denuncia que movilizó a la Justicia contra los banqueros, que involucra también a Rubén Beraja, ex titular del Banco Mayo, fue promovida por los diputados aliancistas Jorge Rivas, Héctor Polino y Alfredo Bravo. Antes de la convocatoria al evasivo Spolski, Cavallo interrogó a diversos directivos del fallido banco. Entre ellos, a los directores Víctor Santa María y el ex ministro de Trabajo Enrique Rodríguez.
Según la fuente tribunalicia las declaraciones de los adláteres de Spolski carecieron de línea argumental y pusieron el eje en frases como “no me acuerdo” o “de eso no me ocupaba”. Según los oficiales judiciales, ese comportamiento se explica por el hecho de que los indagados “no pueden dar explicaciones concretas ante las abrumadoras pruebas acumuladas”.

 

PRINCIPAL