Llegó la información de que por iniciativa del embajador en España, Carlos Amar,
le pusieron el nombre de Presidente Menem a la biblioteca del Colegio Mayor
Nuestra Señora de Luján de Madrid, patrocinado por nuestro país. Consultamos al
vicecanciller Cisneros y él le trasladó la preocupación al Presidente. Menem dijo que
no sabía nada del tema y ordenó que se cambie el nombre por el de Joaquín V.
González. La historia dará a determinadas cosas o lugares el nombre de Carlos
Menem o Raúl Alfonsín porque, nos guste o no, han ocupado un lugar histórico. Pero la
actitud del embajador ha sido lamentable. No sé si calificarla de obsecuencia o
qué.
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