| Por Raúl Kollmann  La pelea electoral por la
presidencia sigue siendo pareja, aunque parece haberse detenido la escalada del candidato
justicialista Eduardo Duhalde. Prácticamente en todas las encuestas se percibe que el
gobernador bonaerense ya aparece menos fogoneado por su clásico enfrentamiento con el
presidente Carlos Menem y esto frenó su trepada. En la suma de Capital Federal y Gran
Buenos Aires, Fernando de la Rúa lleva una ventaja de cinco puntos, diferencia que puede
llegar a recortar el PJ en el interior del país. En el voto a gobernador bonaerense,
Carlos Ruckauf supera ligeramente a Graciela Fernández Meijide y en la Capital Federal,
Aníbal Ibarra aparece como favorito, pero la pelea será ardua si Domingo Cavallo se
postula para enfrentarlo.
Las conclusiones surgen de una encuesta realizada por la consultora Media Personalizada,
que prepara sondeos para la campaña electoral de Cavallo. El relevamiento fue dirigido
por Eduardo Lauzán y Diego Palacios. En total se encuestaron 900 personas de Capital
Federal y Gran Buenos Aires, respetándose las proporciones por edad, sexo y nivel
socioeconómico.
Aunque la encuesta se realizó en forma telefónica, sus resultados se acercan mucho a los
últimos estudios de opinión que manejan tanto la Alianza como el justicialismo. En el
duelo por la presidencia, Duhalde fue creciendo en los últimos meses, descontando
prácticamente toda la enorme ventaja que le llevaba De la Rúa. Ahora ese ascenso se
frenó y el candidato de la Alianza parece recuperar el protagonismo.
Como se ve en el sondeo, el jefe de Gobierno porteño saca una enorme ventaja en la
Capital Federal –casi 30 puntos–, el territorio tradicionalmente adverso al PJ.
En el Gran Buenos Aires –que duplica a la Capital en cantidad de votantes–,
Duhalde saca una pequeña luz y eso lo acerca bastante, de manera que sus expectativas de
ganar están en la ventaja que pueda sacar en el interior. De todas maneras, no será
fácil: la Alianza puede disputar palmo a palmo los grandes distritos como Córdoba, Santa
Fe, Entre Ríos y Mendoza.
En el nivel de gobernador bonaerense, Ruckauf aparece adelante y se nota una fuerte
presencia de Luis Patti, que cosecha el 15 por ciento de los votos. Si el otrora
torturador renunciara a la candidatura, el camino para Ruckauf parece más sencillo. De lo
contrario, un leve crecimiento de Patti pondrá a Ruckauf en situación difícil.
Igualmente, es muy posible que la gobernación bonaerense termine definiéndose por el
peso de la campaña presidencial: la gente suele guiar su voto por el voto a presidente y
en la provincia de Buenos Aires son pocos los que cortan boleta.
En cuanto a la jefatura de gobierno de la Capital Federal, la Alianza prácticamente juega
de local. La encuesta de Media Personalizada –empresa que trabaja en la campaña de
Cavallo– muestra al ex ministro en muy buenas condiciones de confrontar con Ibarra y
evidencia que Beliz no es un contendiente de esa envergadura. Si la elección de jefe de
Gobierno se hace junto con la presidencial, seguramente el candidato de la Alianza se va a
imponer por goleada porque será arrastrado por el voto de De la Rúa. Si la votación a
intendente se posterga para el año próximo, el mapa electoral será distinto y es muy
difícil hoy hacer un pronóstico que perdure tantos meses.
NUEVO CRUCE ENTRE MENEM Y DUHALDE
“El apoyo es relativo”
“Lo
único que dije es que me siento superior a ambos, a ambas fórmulas, a la de la Alianza y
el justicialismo, que estoy a años luz de ellos, así ha quedado planteada la cosa”,
repitió ayer el presidente Carlos Menem. “El apoyo (a la fórmula del PJ) no se
declama, se lleva a la práctica. Si un día (Menem) dice que nos apoya y otro que
‘está a años luz’, el apoyo es muy relativo”, replicó el candidato
Eduardo Duhalde.
Las palabras de ambos en nada contribuyen al acercamiento que fogonean algunos dirigentes
del PJ. Las palabras de Menem saltaron al aire en un reportaje que le efectuaron en la
oficialista Radio Nacional. Luego de recordar su superioridad ante Duhalde y Fernando de
la Rúa, con resignación el Presidente dijo que “a los argentinos no les queda otra
posibilidad que el triunfo del justicialismo” en las elecciones de octubre.
Duhalde, de gira proselitista en Entre Ríos, apeló a la ironía: “Si bien es
importante que (Menem) tenga elevada su autoestima y eso lo ayuda, nuestra pretensión es
superarlo en la función de gobierno, donde queda mucho por hacer”. No obstante, el
candidato dijo que está dispuesto a reunirse con Menem y los otros aspiramntes a la
presidencia pórque, consideró, "la Argentina está en área de turbulencias".
Domingo Cavallo no quiso quedarse afuera de la verborrea de fin de semana y dijo que le
dio lástima que Menem lo haya tratado de Judas. “Está amargado y angustiado porque
se le termina el poder”, diagnosticó el ex ministro.
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