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Roque pintó un cuadro rosa que en el gabinete nadie compró

Roque Fernández junto a José Uriburu, de Trabajo. El titular de Hacienda dijo que “la gente está ahorrando”.
Un grupo de funcionarios hizo una minicumbre con Menem para expresar su disconformidad con el diagnóstico de Roque.

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Por Claudio Zlotnik

t.gif (862 bytes) Roque Fernández utilizó la reunión de gabinete de ayer para anunciarles a sus colegas que la economía recién despegará hacia fines de año, y no durante el tercer trimestre como él mismo venía pregonando. No es la primera vez que las expectativas del ministro se ven superadas por la realidad. En oportunidades anteriores había ubicado la reactivación para el segundo trimestre y, más tarde, para el tercero. Sin embargo, a la hora de explicar los motivos de la depresión en el consumo popular, el titular de Economía y otros miembros del Gobierno señalaron que “la gente gasta menos para ahorrar más”. Esas apreciaciones irritaron a los legisladores, quienes al término del encuentro le dieron otro punto de vista a Carlos Menem.
La mayor parte del tiempo de la reunión en Olivos se la llevó un informe de Roque Fernández. “Estamos atravesando un período recesivo del que saldremos hacia fin de año. Sin embargo, la situación no es grave. Vemos un crecimiento de los depósitos en el sistema financiero y las necesidades de financiamiento están aseguradas por los próximos seis meses”, aseguró el funcionario. Durante su monólogo, Roque no perdió la oportunidad de lanzar críticas a Duhalde y a De la Rúa, aunque prefirió no nombrarlos. “Las declaraciones de los candidatos poniendo en tela de juicio el pago de la deuda generó incertidumbre entre los inversores externos. En los hechos, eso se tradujo en un aumento importante de la prima de riesgo país argentina durante el último mes, a diferencia de lo ocurrido en Brasil pese a que ambos compartimos la misma región. En el extranjero, las palabras de los candidatos son tomadas en serio”, aseguró el titular de Hacienda.
El clima de la reunión se fue espesando cuando el propio Roque intentó explicar la caída en el consumo. “Por primera vez, el consumidor argentino está tratando de cuidarse en situaciones de incertidumbre. Y, a diferencia de cuando había inflación y debía correr a adquirir productos para que su dinero no se desvalorizara, ahora, con la estabilidad, prefiere ahorrar”, ensayó.
–Al respecto, quisiera relatar mi propia experiencia –interrumpió Carola Pessino, funcionaria de la Jefatura de Gabinete. Y contó sus vivencias en los Estados Unidos (ver recuadro).
Fue entonces que María Julia Alsogaray no quiso perderse la oportunidad de ponderar al modelo.
–Señor Presidente, quisiera decir que en los últimos años hemos asistido a una profunda modificación de las pautas culturales en la Argentina; cambios que fueron motorizados por la reforma de la economía. Es totalmente cierto que la gente, con la estabilidad, prefiere consumir menos para así poder ahorrar más.
Las palabras de la secretaria de Estado acabaron con la paciencia de varios de los presentes.
“Presidente, quisiéramos hablar dos palabras con usted”, ensayó Humberto Roggero, el titular de la bancada del PJ de Diputados, acercándose al jefe de Estado no bien finalizó el encuentro. “Los argumentos que acabamos de oír no forman parte de la realidad del país. La situación, si bien no es dramática, es muy difícil. Hay descontento popular, especialmente en las provincias”, argumentó Roggero. Además de Menem y el diputado cordobés, de la charla espontánea participaban Carlos Corach, Eduardo Amadeo (secretario de Prevención y Lucha contra la Drogadicción), Alberto Pierri y el senador Alberto Tell. “Los funcionarios mienten. Sus exposiciones quizás tengan que ver con su propia historia personal, pero no con lo que está pasando en el país. Tienen una visión totalmente equivocada de la realidad”, disparó Tell. La minicumbre no terminó ahí. “No puede ser que haya quienes, en la crisis, no pongan el hombro. Tenemos el ejemplo de las empresas privatizadas, que nunca dejaron de ganar plata. No se les vio hacer algún aporte en los momentos difíciles como el que estamos viviendo. Algo hay que hacer”, aseveró Roggero.
Con la bronca descargada, los legisladores partieron de Olivos. Menem sólo los escuchó con atención sin dar su consentimiento a esas quejas.

 

Recaudación

Una nueva señal de la profundización de la recesión, tal vez la que más inquieta al Gobierno, fue la abrupta caída de la recaudación de impuestos el mes pasado. El retroceso fue del 9,5 por ciento respecto del sexto mes del ‘98, pero hubiese trepado a 15 puntos de no ser por los ingresos adicionales del impuesto destinado al Fondo Docente. En rigor, esos fondos no pueden utilizarse para cubrir gastos públicos, con lo cual la baja en la recaudación fue más pronunciada de lo que indica la cifra oficial. En junio ingresaron 4179,1 millones de pesos, de los cuales unos 250 millones corresponden al fondo para la educación. El IVA derrapó 15,2 puntos, Ganancias bajó 20,8 y los impuestos al comercio exterior aportaron 23,8 por ciento menos.


Carola pobre

Carola Pessino, secretaria de Equidad Fiscal, escuchaba con atención el monólogo de Roque Fernández. Cuando el ministro exponía su interpretación sobre la caída en el consumo, creyó válido relatar, ante el resto del gabinete, su propia experiencia de vida para refrendar las palabras de Roque. “Siendo una estudiante en los Estados Unidos, vivía bajo la línea de pobreza”, dijo trayendo a su memoria una historia que, en parte, ya había revelado a Página/12. “Recuerdo que la gente me miraba azorada cuando hacía las compras en el supermercado. Pensaban que acumulaba víveres para la guerra. Pero no, acostumbrada a la inflación, yo iba gastando mi dinero apresuradamente, como si los productos fueran a aumentar de precio. No me acostumbraba a la estabilidad. Y los estadounidenses no podían entender mi conducta. Ahora, en la Argentina, la gente ya comprendió y consume menos para poder ahorrar”, finalizó.


 

MOVILIZACION DEL SINDICALISMO OPOSITOR CONTRA EL MODELO
La crisis llama a la protesta

t.gif (862 bytes) Los movileros y periodistas estaban divididos ayer al mediodía entre la sede de la CGT y la Avenida de Mayo donde se reunía la otra central obrera, la CTA. La reunión de la CGT había creado expectativas por un posible cambio en su conducción que no se produjo, en tanto que la central combativa sentó a su conducción en pleno en medio de la Avenida de Mayo para anunciar las diferentes modalidades del paro convocado para el próximo 6 de julio.
Justo en el cruce con Perú había quedado una sola mano libre de Avenida de Mayo. Las otras tres estaban ocupadas por los gremialistas que realizaron una conferencia de prensa entre bocinazos, humo de escapes y las oleadas de transeúntes que se mezclaban con periodistas y curiosos cada vez que el semáforo se ponía verde.
El encargado de hacer los anuncios fue el titular de la CTA, Víctor De Gennaro, que estaba acompañado por la dirigente de los maestros, Marta Maffei, el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, representantes de las pequeñas y medianas empresas (APYME), de los jubilados y Pablo Hatkin, de la FUA, junto con representantes de otros gremios.
El secretario de organización de la CTA, Edgardo de Petri leyó un largo listado con las modalidades que tendrá el paro del 6 de julio al cumplirse el quinto aniversario de la Marcha Federal. Las acciones, que incluyen a la mayoría de las ciudades del país, desde La Quiaca a Tierra del Fuego, consistirán en paros activos, concentraciones, marchas, cortes de ruta, radios abiertas, marchas con antorchas y ollas populares. En La Quiaca, por ejemplo, cortarán el puente, en tanto que en Tucumán se concentrarán en la plaza Independencia con la consigna “Chau, Bussi, chau”.
De Gennaro subrayó en especial la solidaridad con los trabajadores de Neuquén y de Corrientes, donde “esta central es protagonista principal de las movilizaciones populares”. Indicó que otro punto importante de la jornada será la defensa de los 2500 luchadores gremiales que han sido procesados durante el gobierno de Carlos Menem, por participar en protestas obreras. En este sentido se refirió al juicio que empezará la semana entrante contra la secretaria general de ATE de Santiago del Estero, Alba Luna Aguirre de Castillo, que se encontraba entre los presentes.
“Esta jornada de lucha muestra las claras diferencias con las actitudes de otras organizaciones sindicales más preocupadas por sus internas –expresó De Gennaro–; los que decidimos realizar estos paros y movilizaciones en todo el país para decir “¡basta!” a las injusticias, a la miseria y la desocupación, fuimos 8400 delegados reunidos en Mar del Plata hace 15 días en el Congreso de esta Central”.

 

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