A los brasileños no les gusta nada el chiste de tener que eliminarse con Argentina. Se advierte en los gestos del plantel, en las declaraciones de rigor y en las variantes que anticipó el técnico Wanderley Luxemburgo.
El entrenador no es tonto. Hará una variante en la defensa y dos en el medio, modificando el esquema táctico y tomando más precauciones que si enfrentara a un rival más débil. Luxemburgo no atendió a la prensa después del entrenamiento de ayer en Foz de Iguazú como lo hizo durante todo el campeonato, donde plantó un equipo diferente al habitual y sólo dijo que “primero lo voy a hablar con Candinho”, su pintoresco asesor. La prensa brasileña especula con que después del entrenamiento de esta tarde quedarán confirmados los once titulares.
El zaguero Joao Carlos, del Cruzeiro, ocupará el lugar de Odvan, de Vasco da Gama. Era un cambio esperado porque Joao Carlos jugó muy bien en el triunfo por 1-0 ante Chile aunque nadie esperaba la salida de Odvan con quien formó la zaga ante los chilenos. Joao Carlos había jugado por Antonio Carlos, de la Roma, y ambos habían cumplido buena tarea. Flavio Conceiçao, del Deportivo La Coruña español, ocupará el puesto del lesionado Vampeta, volante del Corinthians pero la variante más sorprendente fue el la salida de Alex, astro del Palmeiras, campeón de la Libertadores, dejando el puesto a Zé Roberto, el experimentado ex hombre del Real Madrid ahora en el Bayer Leverkusen. Esto supondría que Brasil tendrá más contención en el medio con Emerson, Flavio Conceiçao y Zé Roberto, la creación quedará en exclusividad de Rivaldo y el ataque seguirá confiándose, por supuesto, a Ronaldo–Amoroso.