|
Por Adrián H. Mouján El escenario que le espera a Domingo Cavallo en la Capital Federal, ahora que aspira a suceder a Fernando de la Rúa, no es de los mejores, ya que si la elección para jefe de Gobierno porteño se celebraran hoy, el postulante aliancista Aníbal Ibarra se consagraría como ganador, derrotando tanto a Gustavo Beliz como a Cavallo, una pareja recientemente divorciada, y al justicialista Raúl Granillo Ocampo. En un eventual escenario que lo enfrentaría con Cavallo, el actual vicepresidente de la Legislatura ganaría con el 46,5 por ciento contra el 25,1 que reuniría el diputado de Acción por la República. Mientras que si debiera enfrentar al ex ministro del Interior, Ibarra conseguiría el 47,8 por ciento de los votos contra el 20 de Beliz. Los datos surgen de una encuesta realizada por la consultora Equis entre el 3 y el 4 de julio, sobre una muestra de 400 personas de todos los barrios porteños. La encuestadora del sociólogo Artemio López fijó dos escenarios: uno donde los contendientes son Ibarra, Cavallo y Granillo Ocampo y el otro: Ibarra-Beliz-Granillo Ocampo. Ambos escenarios dejaron de ser hipotéticos y cobraron trascendencia este fin de semana, cuando Beliz y Cavallo recurrieron a los medios para ventilar sus diferencias y anunciar a los cuatro vientos su divorcio, loque puso fin al acuerdo que tenían y que les permitió realizar una buena elección en las legislativas de 1997. En su tan mentado duelo con Cavallo, que hoy más que antes parece ir camino a concretarse, Ibarra también se alza con la victoria. En este caso, el vicepresidente de la Legislatura tiene una intención de voto de un 46,4 por ciento, Cavallo un 25,1 por ciento y Granillo registra un siete por ciento, que demuestra que el titular de la Acción por la República arrastra consigo los votos de la centroderecha que disputa con el titular de la cartera de Justicia. Para Equis este escenario es el que más cambios experimentó en el período febrero-julio. En el segundo mes del año, Ibarra reunía el 40,9 por ciento contra el 33,3 por ciento de Cavallo en una época en que el acuerdo entre el ex ministro de Economía y Eduardo Duhalde estaba en boca de todos. Para abril esa diferencia se estiró, ya que el postulante aliancista se mantuvo en el 40 por ciento, pero Cavallo descendió al 29 por ciento. Granillo, por su parte, subió de un 7,6 que tenía en febrero a un 13,8 en abril. La intención de voto de Cavallo es muy fuerte en el cordón Norte de la ciudad y es significativamente mayor entre las mujeres. Entre febrero y julio, se observa un proceso de crecimiento y caída simultáneo de Ibarra y Cavallo respectivamente, en un contexto en el que la intención de voto por el candidato del justicialismo y la proporción de indecisos estables en torno al siete por ciento, agregó López en sus explicaciones sobre los datos de la encuesta. Tanto en el cavallismo como en el duhaldismo se espera que Granillo Ocampo ceda su candidatura al ex ministro de Economía, si llega a concretarse el acuerdo en Duhalde y Cavallo. Pero ante la posibilidad de que De la Rúa ratifique el desdoblamiento de los comicios, Granillo sabe que sus posibilidades de negociar en mejor posición se diluyen con más rapidez. En una elección en la que se mediría con Beliz y Granillo Ocampo, el dirigente aliancista tiene el 48 por ciento de intención de voto, el legislador de Nueva Dirigencia el 20 por ciento, y el actual ministro de Justicia un 11 por ciento. Desde principios de año, Aníbal Ibarra mostró un crecimiento lento y continuo ya que en febrero midió un 43,6 contra un 24,5 de Beliz y un 10,2 de Granillo Ocampo. En abril descendió a un 41,2, pero Beliz también bajó a un 23,5, mientras que Granillo, quien fue elegido por esos días como candidato a jefe de Gobierno, subió hasta llegar a los 16,3 puntos. En julio, Ibarra trepó hasta el 47,8, mientras que Beliz perdió tres puntos y Granillo cinco. En sus considerandos, Artemio López señala que la intención de voto de Ibarra se muestra homogénea y sólo se observan diferencias significativas entre los entrevistados de ingresos hogareños mensuales superior a los 2.000 pesos ubicados 10 puntos por encima del promedio. En otro cuadro, el trabajo muestra que en relación con quienes los votaron en 1997, Ibarra retiene el 71 por ciento de los votantes de ese comicio, Beliz sólo el 46, mientras que Granillo mantiene el 43 por ciento de los votos que reunió en el 97, Daniel Scioli. En este escenario, la intención de voto por Beliz crece a medida que aumenta la edad de los consultados, mientras que la intención de voto por Granillo se caracteriza por su clara homogeneidad ya que entre los votantes que van desde los 18 hasta los 74, su porcentaje no sufre mayores movimientos.
|