Por Cledis Candelaresi Tal como anticipó ayer
Página/12, el Senado votó anoche modificaciones al proyecto de ley que dispone prorrogar
el vencimiento del impuesto docente hasta el 15 de noviembre. La iniciativa, que surgió
en el bloque oficialista pero conquistó el respaldo de los máximos dirigentes de la
Alianza, dispone eliminar el tributo a fin de año. Sin embargo, también intenta
garantizar la supervivencia del Fondo Docente, aunque sin precisar de dónde saldrá el
dinero para integrarlo. El texto remozado ahora será girado a Diputados, donde soplan
vientos de tormenta. “Insistiremos con la versión original”, desafió ayer ante
Página/12 Humberto Roggero, titular de la bancada del PJ.
“Sólo tuvimos el propósito de encontrar la mejor solución posible”,
reconoció el senador oficialista Carlos Verna, quien actuó como miembro informante.
“Yo, como otros tantos, tengo mandato hasta el 2001, y no quiero tener que enfrentar
el problema de los salarios docentes, nuevamente, en pocos meses”, confesaba uno de
sus pares fuera de sesión.
Verna, José Luis Gioja y Omar Vaquir fueron los tres únicos firmantes de la nueva
versión del impuesto para los docentes, respaldada por todo el bloque del PJ. Los
radicales José María García Arecha y José Genoud y el frepasista Pedro del Piero se
ocuparon de hacerla conocer a Fernando de la Rúa y Carlos Alvarez, respectivamente,
quienes dieron el guiño que el día anterior había dado Economía, a través de Pablo
Guidotti.
Con esta propuesta aprobada sobre tablas, el Senado cambió drásticamente la prórroga
dispuesta por Diputados:
 El pago se
prorroga hasta el 15 de noviembre, fecha tope para abonar el tributo. Cuando se haga el
balance final de lo recaudado –hasta ahora se recaudaron 319 millones, de los cuales
311 corresponden a los propietarios de automóviles–, ya se habrá elegido al futuro
presidente.
Quienes aún no
hayan pagado podrán hacerlo hasta en 4 cuotas, cuyo vencimiento será establecido por la
Administración Nacional de Ingresos Públicos (AFIP).
Quienes ya
hayan abonado el impuesto recibirán una gratificación por haberlo hecho en tiempo y
forma: podrán computar el 10 por ciento de lo tributado como un crédito fiscal a su
favor a partir del año próximo. Ejemplo: el propietario de un Ford K 1999, que pagó 129
pesos, durante el ejercicio fiscal del 2000 podrá descontar 12,9 pesos de sus
liquidaciones de Ganancias, Ingresos Brutos o, simplemente de Patentes (ésta es una idea
de los legisladores, ya que el texto no menciona ningún tributo).
Para que esto último sea posible, el artículo 2 del proyecto prevé que los gobiernos
provinciales y el de Buenos Aires “convendrán” con el gobierno nacional los
reintegros que correspondan. La AFIP deberá prever “en el curso del año 2000”
cómo “reintegrará” el efectivo a quienes el Estado no pueda compensar.
El último artículo
dispone incluir en el Presupuesto nacional del año próximo “otras fuentes de
financiamiento” para mantener la mejora a los salarios docentes, que demandará
“no menos de 700 millones de pesos”.
Por un lado, los senadores transfirieron a la próxima administración el problema de
financiar el ajuste docente que intentan garantizar. Al mismo tiempo, la redacción
aprobada sienta las bases para que se reemplace un “impuesto específico”, algo
que los legisladores critican tanto como el FMI, por otro del mismo tipo.
|
