Por Felipe Yapur y Diego Schurman Eduardo Duhalde aseguró a
Página/12 que está esperando un llamado de Carlos Menem para reunirse a conversar de
cuestiones partidarias durante este fin de semana. El gobernador se preocupó en aclarar
que el encuentro aún no está acordado, pese a que fuentes de la Casa Rosada y del propio
entorno del candidato del PJ confiaron que esa cumbre se iba a desarrollar durante esta
misma jornada. La reunión es clave para definir los futuros pasos del PJ ya que de ella
depende la fecha y el lugar del acto de lanzamiento. Es que si bien fue convocado para el
sábado 14 en la cancha de Boca, el propio candidato del PJ puso en dudas la posibilidad
de su realización. Ni yo sé cuándo se hará, reconoció.
Duhalde dijo no tener problemas en conversar con Menem sobre la campaña, pero dejó en
claro que la última palabra sobre el tema es suya. Tenemos que acordar los detalles
de la reunión del Consejo Nacional Justicialista, del congreso partidario y también para
que quede bien claro que la campaña la conduzco yo, aseguró a este diario.
Usted dice que mañana (por hoy) no se reunirá con Menem. ¿Entonces cuándo?
No sé cuándo, pero efectivamente tengo previsto reunirme con él por estos días.
¿Es verdad que usted no quiere sacarse una foto con él en el acto de lanzamiento?
Esas son patrañas. Le reitero: si él me llama yo estoy dispuesto a reunirme.
La necesidad de una cumbre fue eje de la conversación telefónica que Duhalde mantuvo el
miércoles por la noche con el ministro del Interior, Carlos Corach. El candidato del PJ
le dijo que quiere explicar de la forma más pedagógica y política posible
por qué no le conviene que el Presidente comparta el palco del acto de lanzamiento.
Duhalde insiste en consolidar el frente interno y encolumnar a todo el justicialismo
detrás de su figura. Y a propios y extraños les asegura que Menem, con quien intenta
diferenciarse desde hace meses, debe ser uno más entre todos. Pese a las
desmentidas, hombres de su entorno aseguran que el gobernador confesó ayer, en una
reunión de campaña, que una foto con Menem sería igual a un abrazo del oso.
Pero Corach le dijo que Menem no puede quedar relegado a un papel secundario. Y el propio
Presidente, desde los Estados Unidos, condicionó ayer su presencia en la cancha de Boca a
tener asegurado un lugar en el palco. Hay que tener en cuenta que si el Presidente
asiste, su lugar es en el palco, caso contrario no voy, aseguró Menem hablando en
tercera y en primera persona.
La sola posibilidad de que la campaña se vuelva a eclipsar por el protagonismo de Menem,
llevó a Duhalde a poner en duda al realización del acto de lanzamiento en la Bombonera.
Eso explica en parte por qué ese acto sufrió dos cambios de fecha, ya que primero se
dijo que se realizaría el 7 de agosto, luego el 6 y finalmente el 14. Así lo admitió
Duhalde.
¿Cuál fue la razón de tantos cambios? le preguntó este diario.
La cancha de Boca está clausurada y nosotros no podemos ir a realizar un acto en
esas condiciones.
Pero eso se sabía de antes.
Sí, pero no queríamos que utilicen al acto como elemento de presión para levantar
esa prohibición que pesa sobre la Bombonera.
Otra de las razones de la postergación del acto es la necesidad de cerrar acuerdos con
partidos chicos y personalidades de peso político. Entre ellos se volvió a hablar de un
acuerdo inminente con Domingo Cavallo.
Hasta ahora, tanto Duhalde como el líder de Acción por la República admitieron que
estarían dispuestos a ir juntos pero sólo ante la eventualidad de un ballottage. Cavallo
no es al único que Duhalde tiene en la mira. También se produjo en estos días un
acercamiento con Gustavo Beliz, ex pareja electoral del ex ministro de Economía. Beliz
renunció a su cargo de ministro del Interior del gobierno menemista asegurando que era
un nido de víboras. Por lo tanto parece poco probable que termine cerrando
trato con Duhalde si éste finalmente decide mostrarse junto con Menem.
Fue el propio gobernador quien quiso bajar los decibeles del acercamiento con el titular
de Nueva Dirigencia, al sostener que hace tiempo que no habla con Beliz. Lo que pasa
es que como yo soy mudo, muchos hablan. Y hasta imaginan cosas, esto incluye a alguna de
mi gente, y pueden llegar a podrir alguna negociación, se justificó el candidato.
La deuda al Parlamento La estrategia duhaldista de insistir en la problemática de la deuda externa
tuvo ayer una vuelta de tuerca. Varios diputados nacionales, entre los que se encontraban
Hilda Chiche Duhalde, Mario Cafiero y Daniel Scioli, presentaron un proyecto
de resolución donde se crea un Foro Argentino para el Jubileo 2000. Pero allí no
terminó todo. Cafiero aseguró, cuando justificó la presentación, que durante el
gobierno de Raúl Alfonsín se intentó confundir al decir que la deuda era de
60.000 millones de dólares y no de 90.000 millones. Se ocultaron 30.000 millones de pesos
de deuda como si fueran cadáveres en el placard. Chiche Duhalde, por su lado,
indicó que los organismos crediticios internacionales son los que buscan una
solución a la actual situación y a esto se suma la Iglesia Católica, que no es experta
en economía pero sí es experta en humanidad y a los problemas humanos hay que buscarle
soluciones humanas.
Unidos en la campaña
Fue durante un acto realizado en la Universidad de La
Matanza. Hacia varios meses que no se encontraban, pero todo indica que la campaña los
volvió a unir y los participantes del evento fueron testigos del reencuentro de Duhalde
con el titular de la Cámara de Diputados, Alberto Muñeco Pierri. Los dos
encabezaron el acto de entrega al municipio de 40 equipos viales para pavimentación. Fue
así que en el salón de exposiciones que la comuna tiene en la universidad, Pierri
escuchó a su viejo padrino político reiterar sus quejas sobre la campaña
sucia de la Alianza en su contra y retomar su discurso de la deuda externa y la
posición de la Iglesia: Seguiré apoyando la tesitura del Santo Padre Juan Pablo II
tendiente a humanizar la economía. |
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