Por R. C. Apenas si terminaron de romper lanzas, y
Domingo Cavallo y Gustavo Beliz ya se cotizan alto en el mercado electoral. El candidato
del PJ, Eduardo Duhalde, mantiene conversaciones con ambos y un sector de la Alianza está
negociando para incorporar a la coalición al líder de Nueva Dirigencia. En el entorno de
Cavallo niegan que el ex ministro vaya a cerrar filas detrás del candidato del PJ.
Es una estrategia de campaña de Duhalde, pero nosotros no vamos a abrochar,
dicen. En Nueva Dirigencia reconocen que tienen por delante una decisión difícil:
Si Gustavo se va con Duhalde, la oferta tiene que ser muy tentadora porque a él,
que dejó el gobierno de Menem antes del Pacto de Olivos, lo horroriza verse levantando
los brazos junto a (el presidente Carlos) Menem, Duhalde y Cavallo en la que va a ser la
foto de final de campaña, especula un operador. Y explica que el problema con la
Alianza es la mala relación Beliz-De la Rúa.
En el entorno de Cavallo reconocen que Duhalde intenta sumar al líder de Acción por la
República a su equipo, pero por ahora se resisten a aceptar el convite. Cavallo es
candidato a presidente. No vamos a cerrar un acuerdo con Duhalde porque tenemos nuestro
plan, pero nos halaga que el gobernador haya mostrado interés por nuestras ideas,
dijo a este diario uno de los colaboradores del ex ministro. Sin embargo, ayer, desde Mar
del Plata, Cavallo criticó al actual referente económico y potencial ministro de
Economía de la Alianza, José Luis Machinea, al asegurar que su propuesta, como la de
Fernando de la Rúa, es la continuidad perfecta de Carlos Menem y Roque
Fernández. En cambio, se cuidó mucho de volcar alguna reflexión sobre Jorge Remes
Lenicov, el candidato a ministro de Duhalde, que no se diferenció para nada de Machinea
cuando ambos disertaron el miércoles pasado, en un seminario organizado por un importante
banco de inversión norteamericano.
Beliz también está recibiendo y evaluando ofertas. Por el lado de la Alianza mantiene
conversaciones con el Frepaso. Gustavo tiene una gran empatía con Chacho (Alvarez),
pero se lleva muy mal con Fernando de la Rúa porque está convencido de que en el
gobierno de la ciudad hay mucha corrupción, explicó un hombre de su entorno.
También está negociando con Duhalde. Gustavo quiere la Capital. Escribió cinco
libros en los que trabaja el tema. Si lo ponés a Cavallo en el Obelisco, se pierde,
bromeó un operador, y explicó que si la intención del gobernador bonaerense es coptar
al líder de Nueva Dirigencia, las ofertas deberán orientarse hacia la ciudad.
En el entorno de Gustavo Beliz nadie pierde de vista el costo que éste deberá pagar si
se pasa a las filas del duhaldismo. Gustavo es un tipo que se fue antes del Pacto de
Olivos y logró generar un espacio independiente. Si se saca la foto de final de campaña
con Menem, Duhalde y Cavallo levantando los brazos..., esa foto se la van a recordar los
próximos setenta años, reconoce el operador, y agrega que Beliz tiene 37
años y no más de cincuenta, como Cavallo. Es un tipo joven que no está desesperado por
el poder y que puede esperar.
Por eso, el otrora ministro del Interior de Carlos Menem piensa en una tercera
alternativa: dejar pasar la elección presidencial del 24 de octubre y concentrarse en el
2000, año en que los porteños decidirán cuál va a ser el nuevo jefe de Gobierno de la
ciudad de Buenos Aires. La definición del líder de Nueva Dirigencia, asegura la gente de
su entorno, va a conocerse recién el 20 de agosto.
Cumbre y fútbol El presidente uruguayo Julio María Sanguinetti visitará hoy la quinta de
Olivos, donde analizará con Carlos Menem la agenda del próximo encuentro de las máximas
autoridades del Mercosur, que se reunirán el próximo jueves y viernes en Montevideo. Lo
harán antes de partir juntos al estadio de River Plate, donde presenciarán el partido de
despedida en homenaje al futbolista uruguayo Enzo Francescoli. |
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