Por W. U.
Mañana
martes por la mañana la Casa Rosada se vestirá de rojo y púrpura cuando cardenales y
obispos católicos llegados desde el Vaticano y de diferentes partes del mundo se sumen a
la jerarquía local y, junto a un grupo de parlamentarios y científicos afines al
pensamiento católico sobre la natalidad y la familia, rodeen al presidente Carlos Menem
para inaugurar el llamado III Encuentro de políticos y legisladores de América, cuyo
título es Familia y vida, a los 50 años de la Declaración Universal de Derechos
Humanos. El acontecimiento, del que también participarán ministros, funcionarios,
legisladores y los candidatos presidenciales Eduardo Duhalde y Fernando de la Rúa, forma
parte de la estrategia político-diplomática del Vaticano para consolidar su doctrina
sobre los temas ligados a la familia, la procreación, el control de la natalidad y el
aborto, que ha encontrado en el gobierno de Carlos Menem a su principal aliado
internacional.
Antes de la inauguración oficial en la Casa Rosada se celebrará una misa en la catedral
metropolitana que será presidida por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio.
Durante tres días, entre el martes y el jueves, la capital argentina será un punto de
referencia para la Iglesia Católica. Aquí estará un grupo de las máximas autoridades
del catolicismo mundial: el arzobispo Jean Louis Tauran, secretario para las Relaciones
con los Estados (canciller) del Vaticano, el cardenal colombiano Alfonso López Trujillo,
presidente del organismo vaticano para la Familia, el obispo español Cipriano Calderón,
vicepresidente de la Pontificia Comisión para América Latina y el observador permanente
de la Santa Sede ante la ONU, arzobispo Renato Martino, el mismo que condecoró a Menem en
Nueva York dos meses atrás.
De Menem se espera que ratifique su política de adhesión a los postulados del Vaticano
en el tema, consolidando su alianza con la cúpula internacional de la Iglesia. Para
Duhalde y De la Rúa, que también serán oradores en el encuentro, habrá oídos atentos
porque en este escenario la jerarquía católica espera de ellos que adelanten aquellas
que serán sus propuestas en el tema de la familia, especialmente en aspectos de gran
sensibilidad institucional eclesiástica, como el aborto y todo lo que está relacionado
con la bioética. El canciller Guido di Tella hará uso de la palabra en una de las
sesiones, pero la posición oficial del Gobierno se transmitirá a través de las
intervenciones del subsecretario de Población, Aldo Carreras, y del asesor presidencial
para la Defensa de los Derechos de la Persona por Nacer, el ex ministro
Rodolfo Barra.
La organización del encuentro ha estado directamente en manos del Pontificio
Consejo para la Familia del Vaticano. Para la oportunidad el Vaticano logró movilizar
hasta Buenos Aires a científicos y especialistas internacionales que apoyan y defienden
sus puntos de vista. Confirmaron su presencia en el encuentro el presidente de la
Conferencia Episcopal, arzobispo Estanislao Karlic, y los obispos Bergoglio, Galán,
Mirás, Aguer, Rubiolo, Di Monte, Baseotto, Ogñenovich y García. De América latina se
sumarán el presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), el obispo colombiano
Jorge Jiménez, los cardenales Nicolás López (Santo Domingo), Eugenio Sales (Río de
Janeiro), Miguel Obando (Managua), Norberto Rivera (México) y Luis Aponte (emérito de
San Juan, Puerto Rico). Se agregan a la nómina los arzobispos de Montevideo, Nicolás
Cotugno, de Santiago de Chile, Francisco Errázuriz, de Caracas, Ignacio Velasco, de
Bogotá, Pedro Rubiano, y de Quito, Antonio González, entre otros. |