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 La polémica
por la seguridad en la provincia de Buenos Aires explotó la semana pasada y todo indica
que no se agotará hasta octubre, cuando se conozca el nombre del nuevo gobernador. Ayer,
la candidata por la Alianza, Graciela Fernández Meijide, criticó a sus rivales Carlos
Ruckauf y Luis Patti por sus loas a la mano dura y buscó destacar su propio perfil que es
más legalista. “Apegarse a la ley no es ser blando”, advirtió. Cuando vio que quedaba unos puntos atrás en las encuestas, Ruckauf pateó el tablero y agitó uno de los temas que más preocupan a los bonaerenses. Habló de “meter bala” a los delincuentes y manifestó que a los asesinos “los quería ver muertos”. La andanada derivó en la renuncia del ministro de Seguridad de la provincia, León Arslanian, y su reemplazo por el hasta entonces juez federal Osvaldo Lorenzo. En un primer momento, las declaraciones de Ruckauf provocaron incertidumbre en el equipo de campaña de Fernández Meijide pero, de inmediato, elaboraron su contraataque. “Las respuestas simples y directas no sirven. Cuando uno dice: `Metan bala’, es metan bala hasta dónde. Además, ¿a quién le pegan las balas?”, se extendió ayer la candidata aliancista que en su publicidad televisiva destaca que, aunque sea mujer, está en condiciones de garantizar la seguridad en la provincia. “Apegarse a la ley no es ser blando y mucho menos cuando uno es funcionario. La gente está harta de que los gobernadores, presidentes, y diputados se salgan por afuera de la ley. Ser duros es que todo el mundo se someta a la ley”, enfatizó. Pero no fue sólo a Ruckauf que se dedicó Graciela. También se ocupó de Patti y de su idea de “armar a los vecinos” para que se defiendan de los robos. “Cuando uno dice: que la gente `se arme y se defienda’, se está renunciando al papel del gobierno, que es garantizar la seguridad”, sostuvo la diputada para luego desestimar que un eventual acuerdo electoral entre Ruckauf y Patti pueda cambiar el escenario en la provincia. “Esta sociedad nunca mantuvo más de diez años un signo político, quiere un cambio no ya para alternancia sino para alternativa y todo hace suponer que nadie puede convencerse de que los que gobernaron hasta ahora van a hacerlo diferente después del 10 de diciembre”, afirmó. Para la legisladora de la Alianza, “ser duro es tener una policía fuerte. Para eso tiene que estar bien entrenada, buenas armas y un mapeo de delitos”. En otro tramo de la entrevista que concedió ayer a Radio Del Plata, Fernández Meijide reconoció que en la primera época de la gestión de Arslanian, la Alianza le brindó “apoyo legal y técnico” pero que la colaboración se cortó cuando “nos dimos cuenta de que no había voluntad política” para hacer la reforma policial. “No hicimos ningún tipo de miserabilidad política hasta que nos dimos cuenta de que se paraba la reforma, de que Arslanian tenía dificultades y que predominaban los viejos pactos”, añadió. Además, adelantó que no aceptará colaborar en caso de que la Alianza sea convocada por el gobierno provincial para resolver la crisis de seguridad en estos meses previos a las elecciones de octubre.
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