Por Raúl Kollmann Los fiscales Eamon Mullen y
José Barbaccia le pedirán al juez Juan José Galeano que cite a declarar al
vicepresidente Carlos Ruckauf porque ayer, sorpresivamente, dijo que sabe
seguro quién perpetró el atentado contra la AMIA. Ruckauf sostuvo que
detrás del ataque hubo una potencia extranjera, pero que en todos estos años se negó a
identificarla por razones de Estado. El vicepresidente en el momento del
atentado era ministro del Interior dijo también que en varias oportunidades les
reveló a los dirigentes de la comunidad judía el nombre de esa potencia extranjera. Los
titulares de la DAIA y la AMIA negaron terminantemente esa afirmación: Jamás
hablamos con él ni señaló país alguno. Desde la Alianza, el diputado Juan Pablo
Cafiero acusó a Ruckauf de encubrimiento. Todo indica que cuando lo llamen a declarar, el
candidato justicialista a la gobernación dirá que el país acusado es Irán, aunque
habrá que ver si exhibe alguna prueba.
Ruckauf salía del Hotel Marriot Plaza después de participar de un almuerzo con
empresarios petroleros. En ese momento, los periodistas esperaban en el lugar a Fernando
de la Rúa, pero el vicepresidente se detuvo a dialogar con los cronistas: Estoy
seguro de quiénes fueron los autores del atentado contra la AMIA. Detrás del crimen hay
una potencia extranjera involucrada y yo lo he dicho cuando era ministro del Interior,
cada vez que me ha tocado hablar sobre el tema con las organizaciones judías.
Ruckauf dijo que no podía identificar a la potencia extranjera porque se trata de
una cuestión muy delicada. Es un problema de Estado, de política exterior.
Según parece, el vicepresidente y candidato justicialista a la gobernación quiso subir
la apuesta ante las acusaciones por lo que fue una catastrófica investigación desde el
inicio, justamente cuando él era ministro del Interior. Por entonces, la Policía Federal
destruyó pruebas entre ellas, 30 casetes de escuchas telefónicas, la agenda de uno
de los imputados y aparecen algunos de sus efectivos vinculados con el momento en
que la Trafic fue dejada en una playa de estacionamiento muy cercana a la AMIA. De todas
maneras, la imputación más seria es que no se pusieron todos los esfuerzos necesarios
para hacer una investigación profunda en esos primeros tiempos y no hubo voluntad
política de investigar a las policías Bonaerense y Federal.
Entre los dirigentes de la comunidad judía, los dichos de ayer provocaron un fuerte
impacto. Con nosotros no habló nunca le dijo a Página/12 el presidente de la
DAIA, Rogelio Cichowolsky, ni nos señaló ningún país acusado. Si sabe qué
potencia extranjera estuvo detrás del atentado, debe señalarlo ante la Justicia. No
puede haber razones de Estado para guardar silencio. En un breve diálogo con este
diario, también el ex titular de la DAIA, Rubén Beraja, sostuvo anoche que en
ningún momento nos dijo nada sobre los responsables del atentado. Nosotros, por nuestra
parte, seguimos la investigación judicial y los informes de inteligencia que apuntaban a
Irán.
En verdad, la impresión es que Ruckauf terminará mencionando a Irán, una especie de
clásico, ya que el régimen de Teherán ha sido imputado por el juez Galeano y los
servicios de inteligencia de Argentina, Estados Unidos e Israel. La Corte Suprema, en
cambio, considera que no hay elementos concretos, pruebas sólidas, que evidencien la
participación de diplomáticos iraníes, aunque consideran más que posible que el
régimen de Irán haya estado financiando a los grupos terroristas. Después de sus
palabras de ayer, Ruckauf supuestamente tendrá que agregar algo a la información ya
conocida.
Lo más probable es que hoy mismo, los fiscales Mullen y Barbaccia le pidan a Galeano que
cite a declarar a Ruckauf para que no sólo diga de qué potencia extranjera
se trata sino, además, qué pruebas tiene para respaldar sus afirmaciones. Por su
investidura, el vicepresidente puede optar entre contestar las preguntas en persona o por
escrito.
Soria versus Ostrower El titular de la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Investigación de
los Atentados, el justicialista Carlos Soria, tuvo ayer un duro cruce con el presidente de
la AMIA, Hugo Ostrower. Soria increpó a los dirigentes judíos por los discursos en el
aniversario del atentado, cuando Diana Malamud, de Memoria Activa, dijo que el
Estado es la conexión local del atentado. Soria mostró ayer su enojo: no me
banco esas cosas. Se lo digo con todas las palabras porque tengo necesidad de sacarme este
entripado de adentro. Ostrower le hizo frente y sostuvo secamente: cuando se
pide justicia, no hay excesos. Ya en el acto del aniversario, el presidente de la
AMIA había adelantado que jamás pediría disculpas por los reclamos por el
esclarecimiento de los atentados.
Reacciones inmediatas
Graciela Fernández Meijide: Ruckauf es poco serio. Debe decir de inmediato
lo que conoce de este tema tan doloroso. Si no lo hace, estaría violando los deberes de
funcionario público.
Juan Pablo Cafiero: Las afirmaciones de Ruckauf lo
convierten en un encubridor de la causa, que pudiendo aportar elementos para el
esclarecimiento y el acceso a la verdad, los ha mantenido ocultos con un argumento
inaceptable como es el de la razón de Estado. Iguales argumentos se usaron durante la
época del terrorismo de Estado para no dar información. Este encubrimiento también
llega al Presidente de la Nación porque se supone que lo que sabe Ruckauf también lo
sabe Menem.
Familiares de las víctimas: Para la Justicia sólo valen
las pruebas y se deben aportar en el expediente. La responsabilidad institucional que le
cabe al doctor Ruckauf nos lleva a suponer que estas palabras están sustentadas en hechos
y que no se trata de un operativo de prensa dentro de su campaña para la
gobernación.
Diana Malamud, Memoria Activa: Me parece irresponsable,
es ofensivo, es una falta de respeto. Así como no fueron a la calle Pasteur para cuidar a
nuestros familiares, tampoco van ahora ahí cerquita, a los tribunales de Comodoro Py a
decir lo que saben. No olvidemos que fue el ministro del Interior en el momento del
atentado, es decir que estaba a cargo de la seguridad. |
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