Trusso se resiste a ser
extraditado a la Argentina
El ex titular del Banco de Crédito
Provincial, capturado por Interpol en Brasil, busca eludir la Justicia. Su condena podría
llegar a diez años de reclusión por estafa y asociación ilícita.
Francisco Trusso hijo vivía como un
magnate en San Pablo.
Cambiaba con frecuencia de apart-hotel y hacía vida deportiva. |
|
El ex
banquero Francisco Trusso junior, apresado en Brasil el viernes pasado, tras amenazar con
volver y someterse a proceso, decidió pelear legalmente para evitar su extradición a la
Argentina. El vástago de quien fuera embajador ante el Vaticano, y miembro del círculo
áulico del presidente Carlos Menem, es el principal acusado por la quiebra del Banco de
Crédito Provincial de La Plata (BCP), que dejó damnificados por unos 200 millones de
pesos. Interpol dio ayer detalles de su captura en la ciudad brasileña de San Pablo,
donde vivía lujosamente bajo el alias de Roberto Enriquez.
El ex vicepresidente del BCP, ahora encarcelado en Higienópolis, pudo ser localizado
gracias a la intercepción de teléfonos de sus familiares y del celular de su chofer.
Cuando lo abordó la policía brasileña, Trusso, que al principio no comprendió
bien lo que estaba sucediendo, pensó que era víctima de un secuestro, pero finalmente se
entregó sin resistencia, informaron autoridades locales de la policía
internacional. El jefe de Interpol, Jorge Cenabre, aseguró, además, que (Trusso)
inicialmente dijo que su interés era regresar a Buenos Aires para someterse a
proceso, pero horas después cambió de opinión y contrató al estudio más
caro de Brasil, que le garantizó que van a pelear la extradición.
La jueza platense Marcela Inés Garmendia, que pidió la captura internacional del ex
banquero, tiene 45 días para librar el pedido de extradición a la Justicia brasileña.
Los cargos que se le imputan van desde defraudaciones reiteradas, falsificación de
instrumento público y balance falso, hasta asociación ilícita, no excarcelable y con
pena de hasta 10 años de reclusión. Según Cenabre, Trusso no tendría chicanas
legales donde ampararse para evitar ser conducido a la Argentina.
No ha cambiado su fisonomía, pero estaba más delgado, y su estado de salud era
excelente. Evidentemente llevaba una vida bastante tranquila y activa
deportivamente, evaluaron las fuentes policíacas. Durante las pesquisas a cargo de
Interpol argentina y la policía federal del Brasil, se comprobó que Trusso cambiaba
continuamente de alojamiento, aunque siempre se instalaba en lujosos
apart-hotel. Tenía a su chofer como auxiliar y cómplice, y utilizaba el
nombre falso de Roberto Enriquez. Además, pese a que mantenía contactos en el vecino
país y solía recibir las visitas de un grupo de amigos brasileños, nunca dejó de vivir
solo. También se constató que no sólo se comunicaba telefónicamente con amigos y
familiares, sino también que realizaba frecuentes viajes entre las ciudades de San Pablo,
Río de Janeiro y Bahía.
El hasta entonces prófugo fue encontrado en la puerta de una lujosa residencia en el
barrio Jardín de San Pablo. La comisión, que logró detenerlo a raíz de un llamado a
través de un teléfono celular en poder de su chofer, había viajado a Brasil dos semanas
antes y había recorrido Río de Janeiro y San Pablo en busca de pistas.
Trusso declaró en los primeros interrogatorios que salió de la Argentina antes de
que se publicara su pedido de captura y que ingresó a Brasil a través del paso
fronterizo con Uruguay del Chuy. El chofer de Trusso, cuya identidad no fue revelada, fue
quien aportó los datos que permitieron la localización del ex banquero.
El escándalo del ex BCP comenzó con las investigaciones por supuestas maniobras
irregulares en el otorgamiento de 20.985 créditos por 64 millones de pesos a personas que
nunca los solicitaron ni los recibieron. Los investigadores descubrieron además la
falsificación de saldos de tarjetas de créditos por una suma de 16 millones de pesos y
el desvío de depósitos al exterior por 100 millones de pesos. En octubre de 1997 fueron
detenidos diez ex directivos, funcionarios y empleados de esa entidad bancaria,
sospechados de haber participado en la millonaria estafa. Hasta el momento permanece
prófugo solamente el ex directivo Renato Tarquino Dalle Nogare, cuya orden de detención
se impartió en octubre de 1997.
Caso Patricios El juez federal Gabriel Cavallo, que procesó al presidente del Banco
Central, Pedro Pou, y al ex presidente del liquidado Banco Patricios, Alberto Spolski,
comenzó ayer indagar a los directivos de esta última entidad por las responsabilidades
en su vaciamiento. Según informó ayer una fuente de la Justicia federal, el magistrado
que además de a Spolski también procesó a otros ocho directores del banco, tiene
previsto completar la indagatoria de media docena de gerentes y un abogado. El juez fijó
audiencias para que declaren, entre otros, Osvaldo Merlo, Alberto Banchetrit, Sergio
Spolski, Carlos Dátola y el letrado Ernesto Zanone.
Por otra parte, Cavallo dio curso a las apelaciones que las defensas presentaron contra
los procesamientos dictados hace algo más de un mes a la cúpula del Patricios, que ahora
deberá resolverá la Cámara Federal. |
EN EL BANCO CENTRAL DEFIENDEN A RAUL MONETA
Es víctima de un linchamiento
Por Susana Viau
Diputados
demócratas de Mendoza y legisladores aliancistas reiteraron el pedido de que el titular
del Banco Central, Pedro Pou, concurra a la Cámara baja para ratificar si, en efecto, el
BCRA ha rehabilitado al Banco República y si Raúl Juan Pedro Moneta, pese a su
condición de prófugo, mantiene su cargo en la presidencia del banco. Para la máxima
autoridad monetaria, sin embargo, la situación de Moneta y el República nada tienen de
particular: altas fuentes del Central opinaron ante este diario que Moneta es víctima de
linchamiento político y no ha sido apartado de su puesto ejecutivo en el
Banco República porque la condición de profugado es jurídica y no técnica.
Para el BCRA, el financista no violó la normativa vigente ni en el caso del República ni
en el del Banco Mendoza. Casi al mismo tiempo, el jefe de Interpol Argentina, comisario
inspector Jorge Cenabre, explicaba en rueda de prensa que el banquero es buscado en los
más de cien países afiliados a la organización.
Los diputados de la Alianza Jorge Rivas, Juan Pablo Baylac (por el radicalismo) y Alfredo
Bravo (del Frepaso) y el demócrata mendocino Gustavo Gutiérrez quieren saber por boca de
Pou si es verdad que el 4 de agosto el BCRA aprobó el plan de saneamiento presentado en
una asamblea de accionistas del mes anterior, mientras se encontraban huidos varios de los
integrantes del directorio. También pretenden que Pou aclare si es cierto que Moneta
decidió vender sus acciones una vez que el BCRA aprobó el plan de refinanciación
de las deudas del República. En los fundamentos de la solicitud, los legisladores
sostienen que desde la clandestinidad, Moneta le vendió al fondo de inversión
Hicks, Muse, Tate & Furst el 19,2 por ciento de las acciones del CEI por alrededor de
125,4 millones de pesos y agregan que la operación se firmó el lunes 9 entre
un apoderado del prófugo y representantes de ocho grandes bancos. Para el BCRA, en
cambio, la huida de Moneta es un hecho que pertenece a la esfera judicial y no incide en
las cuestiones técnicas. Para nosotros no hay delito, dijeron las fuentes y
negaron enfáticamente los cargos de vaciamiento y subversión económica que le imputa el
juez federal de Mendoza Luis Leiva.
En todo caso, será difícil que esos argumentos convenzan a los diputados opositores,
quienes adelantan que preguntarán a Pou si el mantenimiento de Moneta al frente del
República no viola el comunicado 27.263 del BCRA, donde se dispone que para la
designación y renovación del mandato de los directores de entidades financieras
(...) la autoridad monetaria verificará la calidad de esas personas, sobre todo en cuanto
a la idoneidad moral y profesional.
|