Por Raúl Dellatorre La emisión de los nuevos
documentos de identidad (DNI) bajo gestión privada para los ciudadanos argentinos se
iniciará en noviembre, según se anunció ayer, con un costo de 30 pesos –que
incluye su envío a domicilio-, salvo para los que demuestren su situación de pobreza o
incapacidad, quienes lo recibirán gratuitamente. La empresa adjudicataria, Siemens SA,
está obligada a emitir 75 mil documentos gratuitos anualmente, y el resto de los que se
emitan sin cargo quedarán a cargo del Estado.
En un rincón de Parque Patricios, sólo transitado por camiones de carga en días de
semana y por atribulados hinchas de Huracán los fines de semana (antes, los domingos y
ahora, los sábados), una patrulla de Gendarmería, de uniforme verde, custodia “el
área de seguridad” en la que, en pocas semanas más, comenzarán a confeccionarse
los DNI. Por ahora, no hay norma que obligue a quienes transitan con los actuales DNI a
renovarlos en fecha alguna. Las nuevas libretas serán distribuidas a domicilio por el
Correo Argentino, en un plazo no mayor a 30 días desde el inicio del trámite.
La inversión total a realizar por Siemens en equipamiento alcanzará a los 200 millones
de dólares –más de la mitad ya realizada–, y recibirá por la emisión de los
documentos 24,80 pesos por cada uno neto de IVA. El pago de los honorarios y servicios
técnicos a las empresas contratadas, así como el costo postal, está a cargo de Siemens.
Los nuevos documentos son de un aspecto exterior similar a los actuales, pero su primera
hoja –en la que constan los datos personales, foto y huellas dactilares del
empadronado– es plastificada, semejante a la cédula de identidad o la licencia de
conductor, y constará de un código de barras de dos dimensiones, cuya lectura por
scanner revela todos los datos del titular. Otros elementos de seguridad son la impresión
de las páginas en varios colores, con tinta ópticamente variable y sensible a la luz
ultravioleta e infrarroja, marcas de agua y numeración por perforación cónica (distinto
diámetro en cada hoja).
La máquina Kugler que confecciona los documentos trabaja “con un diseño único por
sus características” para la Argentina, según señalaron funcionarios de Siemens.
Además, no existirán documentos en blanco, ya que cada uno se confecciona completamente
a partir del ingreso de los datos personales al sistema. Toda la operación estará en
manos de personal del Estado, quedando a cargo de la licenciataria solamente la
contratación del equipamiento y los trabajos de soporte técnico y mantenimiento, además
de la capacitación del personal estatal.
Semejante superposición de normas de seguridad apunta a resolver uno de los
“agujeros negros” del control de documentación en la Argentina. Se calcula que
se encuentra en circulación una cantidad de DNI “truchos” equivalentes a entre
el 3 y el 10 por ciento de los “legales”, según la estimación corresponda a
fuentes oficiales o privadas, respectivamente. Ello significa una cantidad de 700 mil a
2,5 millones de documentos falsos.
“No es por intención de fraude electoral, sino para realizar defraudaciones
económicas, como la obtención de créditos, compraventas o contrataciones
diversas”, señaló una fuente empresaria a Página/12. Actualmente, el Ministerio
del Interior le despacha a cada provincia los documentos en blanco para que en cada
jurisdicción se realice el empadronamiento, pero no existe un control estricto de la
utilización de dichos formularios. “Se les va a acabar el negocio a unos cuantos,
porque un documento falso se cobra muy caro”, apuntó la misma fuente.
Otra tarea que tomará a su cargo la licenciataria es la informatización de los puestos
de control de migraciones fronterizos y la implementación de un sistema “on
line” de verificación y registro de datos. Ello permitirá acceder a información
“al instante” sobre la entrada y salida de personas del país, tarea que
actualmente la Dirección Nacional de Migraciones no cumple, salvo que se le brinde la
información exacta sobre el día y vuelo de la entrada o salida solicitada. A partir de
hoy se iniciará la operación de la prueba piloto de control de migraciones de vuelos
internacionales en el Aeroparque Jorge Newbery. Desde el 1º de octubre se hará lo propio
en Ezeiza. En cuanto a la emisión de los DNI, se iniciará sobre “una población
acotada” que abarcará únicamente a los extranjeros residentes –que deban
sacarlo por primera vez o renovarlos– a partir del 1º de octubre, y sólo se pondrá
en operaciones el sistema para los ciudadanos argentinos con posterioridad a las
elecciones del 24 de octubre. “Nos pareció poco compatible instalar el nuevo sistema
en forma coincidente con una demanda excepcional, como la que es habitual en las semanas
previas a elecciones nacionales”, justificó Jorge Castells, subsecretario de
Coordinación del Ministerio del Interior. Según voceros de Siemens, en cambio, se trató
de una decisión “política” para evitar suspicacias.
El trámite para obtener el DNI se seguirá realizando en los registros civiles, a los que
se sumarán 62 centros de recepción móviles, de los cuales 50 quedarán habilitados
antes de noviembre del 2000.
Siemens decidió desplazar, con posterioridad a la adjudicación, a la empresa Mail Fast
como responsable de la distribución de los documentos. Dicha empresa había sido
cuestionada por sus antecedentes judiciales en una denuncia del diputado frepasista Juan
Pablo Cafiero. Pero al ser reemplazada por el Correo Argentino, el juez que entendía en
la causa, Gabriel Cavallo, consideró que la denuncia quedaba sin sustento y la archivó.
RECHAZO DE PARAGUAY A UNA ZONA FRANCA EN
CLORINDA
“Una hipocresía insoportable”
El
ministro paraguayo de Industria y Comercio, Guillermo Caballero Vargas, manifestó hoy que
su país tendría que retirarse del Mercosur si la Argentina concreta la instalación de
una zona franca en la frontera con Paraguay. En el Mercosur “existe una hipocresía
insoportable, ya que se defienden a capa y espada los intereses del bloque en los foros
internacionales, mientras que aquí cada uno se encarga de reventar la economía del
vecino”, afirmó Caballero Vargas.
El ministro consideró como una “suerte de agresión” al espíritu del bloque el
proyecto argentino de convertir a Clorinda, en Formosa, ubicada a 25 kilómetros de
Asunción, capital de Paraguay, en zona de libre comercio. “Casi es lo mismo que
fuéramos a poner algo parecido en Palermo para que Buenos Aires pueda abastecerse de una
zona franca paraguaya en pleno centro porteño”, destacó Caballero Vargas, al
indicar que la idea no es la más adecuada si la intención de los socios es fomentar una
franca relación comercial.
“Estas son cosas que pareciera que pasan inadvertidas, pero para quienes somos
entusiastas de la integración, realmente nos ponen los pelos de punta”, matizó
Caballero Vargas, uno de los cuatro ministros de la oposición en el gobierno que preside
Luis González Macchi. El ministro anunció que instruirán a los negociadores paraguayos
para presentar una protesta formal al respecto ante la próxima reunión de políticas
macroeconómicas del Mercosur, que se celebrará el 23 y 24 de agosto en Montevideo. Esta
reunión fue convocada por el Consejo de Ministros, máximo organismo político del
Mercosur, para buscar soluciones a las diferencias comerciales desatadas entre la
Argentina y Brasil, lo que sumió al bloque en la peor crisis desde su creación, en 1991.
Más tarde, para matizar sus fuertes dichos, Caballero Vargas se comunicó con el
secretario de Relaciones Económicas de la Cancillería argentina, Jorge Campbell, para
aclarar que él no había mencionado que su país tenga intenciones de retirarse del
Mercosur. “El ministro Caballero Vargas manifestó su preocupación por la zona
franca de Clorinda y por los controles aduaneros en Ciudad del Este”, dijo una
portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
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