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Greene es la nueva estrella tras igualar el doblete de Carl Lewis

El velocista norteamericano había ganado los 100 metros y ayer se impuso en los 200 del Mundial de Sevilla. Lewis lo consiguió en los Olímpicos de Los Angeles. Su sucesor amenaza repetir en Sydney 2000.

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t.gif (862 bytes)  El velocista estadounidense Maurice Greene se convirtió en el primer atleta en conseguir el doblete histórico, 15 años después que su compatriota Carl Lewis lo hiciera en los Juegos Olímpicos de Los Angeles en 1984. A su título de campeón mundial de los 100 metros llanos, la prueba reina del atletismo, logrado el domingo pasado, Greene le sumó la medalla de oro, y correspondiente título, de los 200 metros al ganar ayer la final de la prueba, con un registro de 19s90/100 en el Mundial de Sevilla. Greene es el primer velocista que logra el codiciado doblete de los 100 y 200 metros en un Campeonato del Mundo y aunque confirmó su dominio en las pruebas de velocidad, en la carrera de ayer soportó una peligrosa arremetida del brasileño Claudinei Da Silva, quien se quedó con la plata, delante del nigeriano Francis Oblikwelu. Greene dijo que intentará repetir el doblete en los Juegos Olímpicos de Sydney del año próximo.
La versión femenina de los 200 metros la ganó ayer la estadounidense Inge Miller con un tiempo de 21s77/100 y la medalla de oro de los 400 metros con vallas para hombres se la adjudicó el italiano Fabrizio Mori, que cronometró 47s72/100. El atletismo chino hizo su presentación en los 20 kilómetros marcha femenino, ya que las atletas Hongyu Liu y Yan Wang tuvieron registros de 1h30m50s y 1h30m52s, respectivamente, para convertirse en las nuevas campeona y subcampeona del mundo. La carrera de los 5000 metros la ganó por segunda vez consecutiva la rumana Gabriela Szabo con 14m41s82/100. Las expectativas por la participación del cubano Iván Pedroso crecen a medida que se acerca hoy la hora de su aparición en la final del salto en largo. El campeón mundial quiere subir al podio por tercera vez, pero para eso deberá enfrentar al ascendente atleta español Yalgo Lamela y a un público hostil volcado totalmente a favor del campeón asturiano.
Con la victoria de Michael Johnson, quien se consagró campeón del mundo de los 400 metros llanos con record mundial incluido, y el triunfo de ayer de Greene, surgió la idea del negocio de enfrentarlos en un “duelo” de velocidad. Johnson ya había protagonizado otro con el canadiense Donovan Bailey después de Atlanta ‘96, pero ayer mismo descartó la posibilidad del enfrentamiento con Greene. Pero como desdramatiza y baja los desniveles a la tentación del duelo con su compatriota, Johnson suele hablar tan rápido como corre en las pistas. El velocista declaró que está capacitado para bajar los 43 segundos en la prueba de los 400 metros –registró 43s18/100 y marcó un nuevo record del mundo– y que nunca le fijó límites a su carrera, al tiempo que explicó que “el nivel de esta prueba ha bajado, ahora los rivales son más flojos, por tanto, tenía que batir el record mundial solo, sin que ninguno me ayudara con la presión”. El atleta estadounidense se ofreció al entrenador del relevo 4x400 para participar, incluso, en las semifinales si lo necesita.
Solange Witteveen, última esperanza argentina de conseguir un lugar en el podio, quedó eliminada ayer en la clasificación de salto en alto ya que no pasó los 1.85 metro.

 

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