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Los más activos senadores y diputados peronistas reconocieron a Página/12 que la concertación de Duhalde fue pergeñada para la campaña. Los legisladores ya dilatan los plazos del debate.

Roque Fernández vio a Roggero y a Alasino para “conversar” sobre la ley por la concertación.
En privado, Roque reconoció que el paquete “es un mamarracho” y de aprobarse propondrá vetarlo.

LEGISLADORES DEL
PJ DESCOLOCADOS POR EL CAMBIO DE LA ALIANZA
“Nadie pensó esta ley para que salga”

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Por Fernando Almirón

t.gif (862 bytes) “Los diputados y senadores justicialistas estamos soldados detrás de la concertación económica, aunque entre nosotros nadie piensa que este proyecto fue imaginado para que salga”, le aseguró ayer a Página/12 un activo legislador del PJ. La iniciativa que Eduardo Duhalde presentó el lunes pasado movilizó al oficialismo que necesitaba recuperar la iniciativa política para dar batalla en las presidenciales de octubre “descolocando a la Alianza con un proyecto de gobierno”.
Pero “los publicistas brasileños subestimaron al adversario”, señaló un importante diputado peronista. Según él, las previsiones de los asesores duhaldistas indicaban que la coalición se negarían a debatir el proyecto que impulsa Duhalde, lo que les otorgaría rédito político al candidato sin consecuencias para el Gobierno. Pero no fue así. “Raúl Alfonsín salió al cruce”, redoblando la apuesta, dicen en el PJ, “y ahora quieren dar el debate y amenazarnos con sancionar las leyes”, agregan descorazonados.
El candidato a vicepresidente por la Alianza, Carlos “Chacho” Alvarez, tomó la posta del desafío oficialista. Le bastó una oración para alterar los nervios de los estrategas duhaldistas en el Congreso: “la Alianza va a hacer todo lo posible para que ellos conviertan el proyecto (de concertación económica) en ley”, dijo (ver página 4).
“No tenemos dudas de que la contraofensiva partió de (Raúl) Alfonsín, el único radical que sabe de política”, aseguraron ayer en el bloque de legisladores del PJ donde –curiosamente– no festejaron el anuncio de la Alianza que ahora dice que dará quórum para debatir en lo inmediato la concertación en el recinto, tal como el PJ lo proponía hasta ayer.
De inmediato el justicialismo sacó arena de la manga para volcarla al reloj de los tiempos parlamentarios. Ya no tiene apuro en sancionar la ley ómnibus que ayer por la tarde presentaron en sociedad los presidentes de las bancadas del oficialismo en el Congreso: Augusto Alasino, en el Senado, y Humberto Roggero, en Diputados. Argumentaron: “Queremos que se trate de una verdadera concertación de la que participen todos los actores sociales y económicos del país”. Y explicaron: “esta ronda de consultas llevará tiempo, no menos de 30 días”.
“Duda Mendonça nos pidió que rompamos las bolas con el tema por lo menos hasta la primera semana de octubre”, le confesó a este diario uno de los legisladores seleccionados para ejecutar la operación diseñada por el publicista brasileño en el Parlamento.
“Creo que el tema llegará al recinto recién una semana antes de las elecciones”, especuló un senador ante la consulta de Página/12 confirmando la dilatación del debate. El mismo legislador señaló que la iniciativa, tal como está formulada en los proyectos, “es inaceptable para varias provincias que verían seriamente afectados sus programas de promoción industrial y que temen un recorte en los fondos que reciben en concepto de coparticipación federal”. Cuando se le preguntó al senador por qué ningún integrante de la Cámara alta se había pronunciado entonces en contra de la concertación, respondió: “porque todos sabemos que es una buena jugada electoral, pero nada más”.
Los presidentes de los bloques justicialistas y un grupo de legisladores llevaron ayer por la mañana el texto final del proyecto de ley hasta la Casa Rosada. En el despacho del ministro del Interior, Carlos Corach, también se encontraban el jefe de Gabinete, Jorge Rodríguez, y el ministro de Economía, Roque Fernández. “Si no es para apoyar la concertación económica, quiero que mantengas tu boca cerrada cuando te pregunten sobre el tema”, habría sido la indicación clara que recibió Fernández de parte de Carlos Menem. A los oídos del Presidente ya había llegado la opinión del jefe de Economía, que en la intimidad había calificado como “un mamarracho” la propuesta duhaldista (ver aparte).
Los legisladores abandonaron la Casa de Gobierno con el respaldo del Ejecutivo para impulsar la propuesta de concertación. Pero con lacondición de que los argumentos sobre la necesidad de sancionar la ley ómnibus eviten manifestaciones que pongan en duda la gestión del Gobierno, la estabilidad económica y mucho menos, por supuesto, hablar de “una situación de crisis”. También escucharon por lo bajo: “Cuentan con todo nuestro apoyo, pero ya saben cómo es ‘El Turco’, apenas le den media sanción va a salir a anunciar el veto”.

 


 

ROQUE CADA VEZ MAS DISCONFORME CON EL PLAN DUHALDE
Deseoso de proponer un veto

t.gif (862 bytes) A medida que el duhaldismo avanza en el diseño del plan para rebajar impuestos, Roque Fernández se manifiesta más distante de esa idea. Su primera reacción cuando el candidato presentó las medidas de shock para reactivar la economía fue declarar que le parecía “un programa muy interesante”. El ministro no quiso confrontar con el justicialismo en su mayor apuesta de campaña de este momento. Pero ante los pasos en firme del equipo de economistas que acompaña al gobernador y el respaldo de los legisladores del PJ, Roque empezó a recular en su apoyo. Ayer dijo que le recomendará a Carlos Menem vetar las leyes que atenten contra la solvencia fiscal, porque “esa es mi responsabilidad”.
“Si las medidas afectasen nuestra administración, de la cual somos responsables, alertaría al Presidente. Le diría: ‘mire, quienes van a ganar son responsables de la administración a partir del 10 de diciembre, pero hasta entonces los principales responsables somos nosotros’”, afirmó el jefe del Palacio de Hacienda. De todos modos, prefirió ser cauto en su advertencia, al remarcar en varias oportunidades que “no conozco el tema a fondo”.
“Nosotros evidentemente no formamos parte del equipo (de Duhalde). Estamos colaborando con dar toda la información. Pero nosotros somos parte de la administración presente, y ellos de la futura”, insistió Roque en sus declaraciones a Radio Ciudad. En todo momento, el ministro se limitó a opinar en su carácter de técnico, esquivando el compromiso político que en el fondo no está dispuesto a dar. “Creo que es factible mejorar la administración tributaria eliminando todas las exenciones (al IVA) y, al mismo tiempo, teniendo un sistema penal tributario más duro. Eso permitiría pensar en una reducción de impuestos. Pero, repito, creo que habría que conocer muchos más detalles para hacer una evaluación total”, concluyó.
Por otra parte, el tributarista Leonel Massad, quien asesora al titular de la AFIP, Carlos Silvani, se manifestó ayer contrario a la propuesta de Duhalde de rebajar de 21 a 15 por ciento la tasa del IVA. “Seis puntos del IVA equivalen a una recaudación de 6600 millones de pesos. Con la generalización del gravamen y la eliminación de exenciones al impuesto a las Ganancias, apenas se puede compensar la mitad de lo que se perdería”, sostuvo.

 

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