Con
incidentes de violencia y baja participación, la mayor democracia del mundo en términos
de población celebró ayer la primera fase de sus elecciones legislativas. El período
electoral se extiende a lo largo de un mes, y se determinará la composición del Congreso
de 545 bancas que elegirá al nuevo premier. Participan más de 600 millones de personas.
La asistencia electoral ayer habría sido baja, de alrededor del 50 por ciento de los
votantes habilitados. El partido con mejores posibilidades de ganar parece ser el partido
nacionalista del actual premier Atal Bihari Vajpayee. Cinco personas resultaron muertas y
15 heridas durante la votación, pero los analistas locales afirmaron que este es un nivel
bajo de violencia. En una potencia nuclear de 900 millones de habitantes, unas elecciones
donde miles de candidatos compiten por los votos de 605 millones de ciudadanos no pueden
sino ser complejas. La votación de ayer fue solamente la primera fase, y sólo 145 de los
545 escaños del Congreso estaban en juego. Sin embargo, más de 1000 candidatos,
representando a decenas de partidos nacionales y regionales de los 16 estados y
territorios del país, competían ayer por estas bancas. 150 millones de ciudadanos
estaban habilitados para votar. En los días 11, 18, 25 de setiembre y el 3 de octubre, se
votará por el resto de las bancas. Recién el 6 de octubre podrá proclamarse un ganador
absoluto. Esta votación escalonada es indispensable para que los 4,5 millones de
funcionarios electorales puedan manejar el volumen de votos. Un millón de soldados y
policías fueron movilizados para garantizar la seguridad. Con la victoria contra la
incursión de los milicianos islámicos en la provincia de Kashmir y la exitosa prueba de
una bomba nuclear, se estima que el premier Vajpayee será el principal beneficiario de
las elecciones. |