El Mundial
de Rugby podría verse sumergido en una controversia a 24 horas de la ceremonia de
apertura. La estrategia de alto riesgo con que el rugby pretende probar que el más alto
nivel del deporte está libre de drogas obligó a los organizadores a someter a controles
antidoping a la mitad de los 600 rugbiers que tomarán parte de la Copa, una proporción
sin precedentes en un Mundial, que representa un cambio dramático respecto de
procedimientos anteriores. Los organizadores del Mundial, bajo la protección del
International Board, dispondrán de los resultados hoy, un día antes de la jornada
inaugural. A medida que los equipos fueron arribando a sus concentraciones, se encontraron
con equipos de control antidoping de la firma Sport UK. Hasta el martes se habían
realizado 300 pruebas. Además, serán elegidos por azar dos rugbiers por partido. Keith
Rowlands, a cargo del operativo en Cardiff, dijo: Tiene que ver con el juego y la
gente que lo practica. Mañana (por hoy) podrán corregirme, pero tengo confianza en que
no habrá un solo positivo. Rowlands añadió que la decisión de extender los
controles fue tomada en junio y que el costo de estos tests previos trepa hasta los 200
mil dólares. El rugby ha dado pocos casos positivos de doping, ninguno en los tres
Mundiales precedentes. Pero ésta de Gales es la primera Copa del Mundo totalmente
profesional, y las presiones sobre los rugbiers son masivas, con altos salarios y premios
por victoria. Claramente, los organizadores arriesgan arruinar el torneo si anuncian hoy
la detección de casos positivos. El escándalo podría afectar la confianza del
aficionado en un deporte que jamás tuvo un caso positivo en competencias internacionales.
Michael Anderson, el oficial a cargo de los antidoping en los últimos dos Mundiales,
asegura que la magnitud de este control no tiene precedentes.Es una
apuesta para el rugby, pero es refrescante. Muchos están asustados de lo que puedan
encontrar, porque cuando encuentras algo, tienes que tomar medidas apuntó Michele
Verroken, de Sport UK.Aunque en otros deportes el atleta que produce una muestra positiva
no es suspendido hasta que una contraprueba confirme el veredicto, un positivo hoy,
automáticamente significará la suspensión, que dependerá de la contraprueba y una
eventual revisión del caso.
Pumas en su nueva jaula Los Pumas reconocieron ayer el terreno del Millenium Stadium de Cardiff
(foto), donde mañana debutarán ante Gales en el arranque del Mundial. Es un
estadio gigantesco, vamos a tener que estar muy concentrados y no dejarnos llevar por la
presión de la gente que va a ir a alentar a los galeses, explicó el centro Eduardo
Simone. La jornada dejó como saldo la lesión del ala Rolando Martin, que sufrió un
problema en el isquiotibial derecho. Sentí un pinchazo y salí como prevención. No
creo que sea nada grave, pero por las dudas preferí no terminar la práctica para
prevenir un mal mayor y no quedar afuera del Mundial, dijo el rugbier de Los Pumas,
a quien el entrenador Alex Wyllie había confinado al banco de suplentes para el partido
debut. El plantel completo realizó un entrenamiento de dos horas en el predio de la
Universidad de Cardiff, antes de reconocer el estadio. Wyllie nos pidió que
cuidemos la pelota y que no cometamos infracciones relató el medio scrum Agustín
Pichot. Nos dijo que será fundamental estar bien concentrados y evitar cometer
penales cerca de nuestro ingoal y que, a la vez, ataquemos. Simone agregó que
Wyllie hizo hincapié en que la pelota salga rápida de las formaciones móviles, ya
que los galeses se reagrupan muy bien en defensa. Deberemos ser implacables, porque si no
podremos sufrir varios tries. Gonzalo Béccar Varela, el sorpresivo colaborador de
Wyllie, dijo que la de ayer fue una práctica que sirvió para evaluar cómo están
Los Pumas en las funciones defensivas y de ataque. Se avanzó mucho en estos días que
estamos practicando, opinó. Los Pumas ya viven la cuenta regresiva. |
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