Oviedo
y Menem, la misma bosta. El cartel estaba listo ayer en el aeropuerto de Río
Grande, pero la Gendarmería Nacional dispuso a último momento que el avión que lo
trasladaba aterrizara en Ushuauaia y le evitó así al ex general golpista paraguayo el
mal trago de ser repudiado apenas pisara Tierra del Fuego. Poco antes de que Oviedo
quedara instalado en la estancia Rivadavia el lugar al que lo confinó el Gobierno
por haber violado las reglas de su asilo, el gobernador fueguino, José Estabillo,
recibió su retribución por tanta hospitalidad: el Banco Nación le comunicó que
acreditará a las arcas provinciales el préstamo de 20 millones de pesos que necesita
para pagar los salarios atrasados de los empleados públicos.
El operativo de traslado de Oviedo comenzó pasadas las 9 de la mañana, con las primeras
maniobras distractivas que realizaron sus custodios del grupo Albatros de la Gendarmería
para eludir a la prensa que aguardaba la salida del ex general golpista de su casona de
Moreno. El misterio incluyó la falta de precisión sobre el aeropuerto en el cual el
Oviedo golpista abordaría el avión de la Fuerza Aérea que debía trasladarlo a Tierra
del Fuego.
Oviedo partió finalmente desde la base aérea de El Palomar, adonde también llegó en
medio de un estricto operativo de seguridad. Los periodistas debieron conformarse con ver
desde casi 200 metros de distancia el despegue del Fokker F-28, matrícula TC-52, que
transportó a Oviedo a su nuevo destino. El avión decoló al término de un sobrevuelo de
la zona que efectuó un helicóptero militar para determinar que todo estaba en orden.
El secretario de Seguridad, Miguel Angel Toma, había anunciado que la mujer de Oviedo y
otros allegados acompañarían al ex general golpista hasta la estancia Rivadavia y que
volverían de inmediato en el mismo avión, pero no fue así: Oviedo viajó sólo con su
abogado Federico Pinto Kramer. Seis valijas fueron su equipaje.
El otro abogado de Oviedo, Raúl Reissig, aseguró que al partir su cliente dijo: Me
voy muy lejos, pero mi corazón está más cerca del pueblo paraguayo. Reissig
afirmó que el ex general dedicará estos días a pensar cuál será el lugar más
adecuado para vivir con su familia y no descartó que en el futuro se radique en Ushuaia,
si ello le resulta más cómodo. La estancia Rivadavia está ubicada cerca de
Tolhuin, en el medio de la isla de Tierra del Fuego, a 180 kilómetros de Ushuaia y 130 de
Río Grande.
Estoy empacando y haciendo una infinidad de cosas que toda mujer debe hacer antes de
entregar una casa, señaló a la prensa la esposa del ex general golpista, Raquel
Marín, para explicar la razón por la que aún permanece en Buenos Aires. De paso,
aprovechó para decir las cosas que su marido no puede decir: Tenemos un objetivo,
que es salvar al pueblo paraguayo, y sabemos que eso implica muchos sacrificios. Sabemos
también que esa meta molesta a mucha gente que inventa cosas, pero ya van a tener la
verdad y se van a dar cuenta de las injusticias que cometieron. Marín afirmó,
además, que Oviedo está bien y que de ninguna manera se siente
traicionado por el presidente (Carlos) Menem.
Apenas llegó a Tierra del Fuego, Oviedo comenzó a sentir el rigor del clima la
sensación térmica era de 11 grados bajo cero y de la gente que no lo quiere allí:
dirigentes gremiales y de organismos de derechos humanos lo esperaron en el aeropuerto de
Río Grande para repudiarlo.
El súbito cambio de rumbo a Ushuaia del avión que transportaba a Oviedo los dejó con
las ganas de hacerlo, aunque no les faltará oportunidad. El intendente de Río Grande y
ex candidato de la Alianza a la gobernación fueguina, Jorge Colazo, recordó que días
atrás esa comuna declaró persona no grata al ex general golpista y anunció
que organizará un escrache frente a la estancia Rivadavia, con la
participación de la conducción nacional de la coalición. Además, calificó de
sinvergüenza a Estabillo por haber aceptado a Oviedo a cambio de un
crédito para superar la crisis financiera provincial.
ACUSAN A LOS JUECES QUE LIBERARON A LOS
SKINHEADS
Más cerca del juicio político
Por Irina Hauser
Los tres
camaristas que perdonaron a los skinheads que apalearon al joven Claudio Salgueiro
mientras cantaban slogans antisemitas, están al borde del juicio político. La Comisión
de Acusación del Consejo de la Magistratura analizará si los jueces de casación Alfredo
Bisordi, Juan Carlos Rodríguez Basavilbaso y Liliana Catucci cometieron algún delito o
desempeñaron mal sus funciones. Según pudo saber Página/12, un primer punteo indica que
habría mayoría para elevar un dictamen acusatorio ante el plenario, que decidirá si hay
motivos para sustanciar el enjuiciamiento.
Un tribunal oral había condenado a los tres skinheads a tres años de prisión efectiva
al evaluar que el delito de lesiones graves cometidas en acción multitudinaria estuvo
agravado por actitudes discriminatorias. Muerte a los stones, muerte a los rockeros,
muerte a los judíos, ¡Heil Hitler!, gritaron los skins mientras apaleaban a
Salgueiro. Sin embargo, el cantito resultó confuso para los jueces de la Sala I de la
Cámara de Casación Penal, que optaron por no aplicar la Ley de Antidiscriminación,
anular el fallo anterior y beneficiar con la libertad a los agresores.
El titular de la DAIA, Rogelio Cichowolski, y los representantes de la Asamblea Permanente
por los Derechos Humanos (APDH) Simón Lázara y Alfredo Bravo terminaron pidiendo el
juicio político de Bisordi, Rodríguez Basavilbaso y Catucci ante el Consejo de la
Magistratura. El caso estuvo a consideración de la Comisión de Disciplina y terminó
pasando el martes a la de Acusación con un dictamen del senador José Antonio Romero
Feris, tal como informó en exclusiva Página/12, después de que en los últimos días
las organizaciones denunciantes incrementaran el tono de sus críticas a los consejeros.
Estábamos muy preocupados por la demora de la Comisión de Disciplina, que aunque
tenía una resolución desde principios de septiembre no trasladaba el caso a
Acusación, explicó Lázara a este diario.
El dictamen de Romero Feris sufrió una suerte de lavado con respecto a su versión
original. Igual conservó argumentos fuertes contrarios a los jueces de casación al
señalarles que habían ignorado los antecedentes ideológicos y políticos de grupos como
el que atacó a Salgueiro, que es precisamente el neonazismo. Hubo un dictamen
minoritario de Bindo Caviglione Fraga, quien consideró que no había que analizar el
fallo de los camaristas, aunque sí coincidió en girar el expediente a Acusación.
A la hora de explicar las demoras, algunos consejeros acusaron precisamente a Caviglione
Fraga de dilatar el trámite en busca de una fórmula lo más favorable posible a Bisordi,
con quien milita en la Lista Blanca de la Asociación de Magistrados. Bisordi ha sido
cuestionado también por su actuación cuando instruyó, como secretario penal de la Corte
Suprema, el expediente del atentado a la Embajada de Israel. Fue uno de los principales
defensores de la teoría de la explosión interna.
La Comisión de Acusación se prepara para empezar a estudiar el tema en su reunión del
martes próximo. En principio, todo indica que admitirán que la APDH y la DAIA amplíen
su denuncia, tal como lo solicitaron, en una audiencia pública en las próximas semanas.
Quieren agregar un reciente informe del Departamento de Estado norteamericano que señala
al fallo de casación a favor de los skinheads como uno de los síntomas más claros del
antisemitismo en Argentina. Además, intentan demostrar cómo la sentencia en cuestión
disuadió a otras personas de denunciar casos similares.
El trámite amaga con remover a los tres magistrados cuestionados que ocupan un lugar
clave en la Justicia Nacional. No obstante, algunos de los integrantes del órgano
judicial recuerdan con recelo que la secretaria del Jurado de Enjuiciamiento
instancia que cierra el ciclo es la hermana de la camarista Catucci.
|