Por José Maggi Desde Rosario Buscado. Desde la
masacre de Ramallo, E.P. sabe que ésa es la palabra que acompaña su foto y su nombre
para cada policía de Rosario. Sabe, también, el destino corrido por dos de sus antiguos
compañeros de andanzas. El de Javier Hernández, rematado en el tiro del final que cerró
la lluvia de balas contra el Polo del gerente. Y, sobre todo, el de Tito Saldaña, el
asaltante que salió ileso de la balacera pero apenas vivió unas horas para disfrutarlo.
Lo mataron porque Tito sabía el nombre del policía que había entregado el
banco, dice para explicar que está indignado, y que esa indignación lo acercó al
periodista que hará conocer su testimonio. El encuentro parece robado de una mala
película: después de muchas vacilaciones se concreta en un parque de la ciudad de
Rosario al pie de una imagen de la Virgen. E.P. no quiere dar a conocer su nombre y mucho
menos que se le saque alguna foto. Sólo espera que se difunda su versión para que la
policía no lo encarcele con la suya.
Desde el mismo día de la masacre, los investigadores están convencidos de que existieron
cómplices que apoyaban desde afuera el asalto al banco. Se habló de un Renault 18 rojo
que esperaba a la salida y el misterio del cuarto hombre se transformó en un
lugar común entre las pesquisas. Allí es donde aparece el nombre de E.P. para la
policía, que desde entonces intenta localizarlo para develar su rol en el asalto.
E.P. conocía desde hace mucho a Tito Saldaña y, en otras épocas, compartió con él
asaltos más afortunados. Sin embargo, durante toda la charla intenta demostrar que no
estuvo en el último el que conmovió a todo el país, aunque conoce casi al
dedillo cómo se organizó, las razones para que algunos de los interesados no
participaran y hasta los motivos del desastre: Fue una entregada de la policía. El
que entrega el dato es un policía y después nunca llegó al banco la custodia. O sea
otros dos policías.
El plan
¿Cómo surge la idea del asalto?
Viene desde hace bastante. La mina que contactó a Tito (Saldaña) con el policía
que traía el dato tenía relación con el poder político. Bah..., era la
amante de un político de la zona. Ella también iba a poner una casa para
guardarse a la salida del banco.
¿El policía que vendió el dato tiene un cargo alto?
No.
¿Estuvo de custodia en ese banco?
No, tampoco. Ese tipo es uno que siempre pasa trabajos, y hace poco
había ofrecido entregar el Banco Nación de San Nicolás, el que está enfrente a la
plaza. Pero después no se pudo hacer porque según él habían cambiado los métodos de
seguridad y ya no tenía acceso. El tipo es más que un policía raso, es un oficial.
¿Cuál era el plan del robo?
Había que llegar antes de que entraban los policías de custodia. Una semana antes
del asalto se vigiló todo desde un auto. Se podía ver que un ordenanza del banco les
abría la puerta a esos policías que venían caminando. Así que la idea era meterse y
esperar uno adentro y dos afuera para que cuando entraran los policías no se escape
ninguno. Los agarraban y les hacían un sandwich. El trabajo era limpito.
Había que llegar e irse sin disparar un solo tiro. El cana también pasaba la frecuencia
de la radio policial y los códigos para poder escucharla.
¿A qué hora les dijeron que se abría la bóveda?
Había quince minutos entre que se abría la bóveda y llegaba el personal al banco.
Es decir llegaban las tres llaves, la clave, y teníasquince minutos antes de que
terminara de llegar el resto de los empleados. Pero el tesorero nunca llegó. Por eso para
mí esto fue una entregada, algo que preparó el policía que armó la jugada.
¿Está diciendo que todo se preparó para demostrar la efectividad de la policía?
Ya te lo dije. El que pasa el dato es un policía, la custodia policial tampoco
apareció. Hasta hubo gente que se olió algo feo y se abrió.
¿Por qué no participaron?
En realidad se estuvo por hacer unos días antes pero mucha gente se abrió.
Después de mirar, no estaban de acuerdo. El tramo para salir y llegar hasta San Nicolás
era muy largo y con el helicóptero de la policía, que sale al toque para perseguirte, no
se llegaba. Por más que se cambiara el auto en la ruta se corrían riesgos innecesarios.
Había que quedarse en Ramallo. Dejar el auto del robo a la salida hacia San Nicolás y
quedarse ahí. Guardados dos días en una casa ahí. Era demasiada presión, querían
hacer cosas raras, así que varios se abrieron.
Los hechos
¿Cómo siguió la historia?
Javier estuvo en Rosario la noche anterior, vino a pedir un poco de plata prestada y
dijo que iban a hacer el banco al otro día. Estos están locos,
pensé.
¿Por qué fracasó el asalto?
Para mí los entregaron, porque no puede ser, como la cuentan, que apretaron al tipo
de enfrente porque se lo confundieron con el contador o con el tesorero. Nunca los pueden
confundir... si los conocían a todos. Al gerente, al contador y al tesorero. Para mí
hubo entrega. Quizá el Panadero (Martínez) haya desempeñado mal su papel y se les cayó
por ese lado. El Panadero no tenía nada que ver, fue de bobo, no tendría que haber
estado allí. No sé cómo se embarcó.
¿No se complicó más porque el chofer que esperaba afuera los dejó a pie?
No había ningún chofer, eso es seguro. Es mentira que haya habido otras
piernas. Eran sólo ellos tres. Lo hicieron así porque Javier era un loco y
Tito era un tipo que se llevaba las paredes por delante. Y siguió y siguió y se hicieron
matar boludamente.
¿Y qué pasó con el Renault 18 rojo que dicen que esperaba frente al banco?
Es todo un invento.
¿Quién robó el Renault 19 blanco en Villa Constitución?
Fueron Tito (Saldaña) y Javier (Hernández), bien vestidos. Lo hicieron ellos
porque andaban sin guita, porque para trabajos así vas y comprás un auto. Generalmente
se compran con papeles truchos. Si tenés la plata, para qué vas a correr el riesgo de
levantarte un auto vos.
¿Qué armas tenían preparadas?
Había muchas municiones, cargadores, cuatro 9 milímetros, una 11.25 y me parece
que una Itaka, que no sé si finalmente la llevaron porque si no hace frío no es muy
cómoda para entrarla a un banco.
¿Por qué le encontraron un mapa en el bolsillo a Tito Saldaña?
Tampoco creo que exista ese mapa. Igual que eso que dicen que a Tito le encontraron
cosas en los bolsillos, alhajas de los rehenes. Eso es todo mentira. Yo los conozco y
ésos no son los códigos. Estamos todos locos. Si yo voy a robar un banco no te llevo la
alianza. Un ladrón de bancos se quiere robar la plata y no te va a sacar nada, así
tengas un Rolex. Para qué lo quiero si me puedo comprar uno.
¿Cuánto cobra el que vende el dato para el asalto?
En general el entregador cobra un 10 por ciento. Pero si interviene la policía, que
te corta la alarma y te da los códigos para manejarte con laradio, probablemente te pidan
el 30 o el 40 por ciento. Depende si el que está en la garita te abre la puerta o de
otras cosas.
¿Cuánto dinero creían que había dentro del banco?
El dato decía que había como 500.000 dólares. Incluso lo postergaron un poco
porque decía que podía llegar a haber un palo. Pero yo nunca pensé que en esa zona
pudiera haber un palo. Si fuera en la frontera, puede ser, pero allá es dificilísimo. En
una zona donde venden duraznos, ¿cuándo van juntar esa guita?
El final
¿Escuchó las conversaciones al aire con los periodistas?
Sí, y me sentí muy mal, porque al final fueron unos tarados. Tanto coraje
derrochado al pedo. Pero bueno, son cosas del oficio.
¿Si les hubieran dado las llaves y la clave se hubiesen ido sin matar a nadie?
Sí, se van y los dejan vivir. Si no, los hubieran matado antes. Si yo hubiera
estado en lugar de Javier no me quedo con los rehenes pero, en última instancia, vos
tenés que estar dispuesto a tirar. Javier no tiró un solo tiro. Es una cuestión de
transgresiones, porque una vez que transgrediste una cosa, bueno, ya está. Si vos tenés
dudas, pasa lo que pasó.
¿Ellos dudaron?
Lo que pasa es que en el arreglo con el policía, el intermediario, los engañaron.
Y ellos encima pidieron Rohypnol, cuando en un caso así tenés que estar lúcido. Pero
bueno, Javier era adicto.
¿Qué pasó con la negociación?
Ahí hay cosas muy oscuras, porque normalmente cuando llega el juez vos te entregás
y listo, se termina todo. Por eso para mí hubo otra negociación. Si vos llamás al juez,
y viene, te entregás. Te queda sólo una causa por robo y te pueden dar seis, ocho meses
de cana, un año. Si no, tenés que estar de cinco años para arriba. Lo que hicieron es
muy oscuro. Más si pensás que ellos tenían experiencia. A Tito ya le pasó estar en
ésta y entregarse.
ADONDE LLEVA LA INVESTIGACION DE LA MASACRE
Yabrán, el rehén, Lorenzo y la verdad
Por Raúl Kollmann
En el
máximo nivel del gobierno bonaerense investigan dos hipótesis asombrosas sobre los
hechos de Ramallo.
La primera es que en el grupo de asaltantes hubo instigación de la familia Yabrán y de
policías que están a sueldo de los herederos del supercartero fallecido. La base de esa
imputación son las sospechas sobre uno de los rehenes, el empleado de Oca Jorge Vilches,
quien --siempre según los funcionarios-- está siendo investigado. El hombre tiene
antecedentes, lo contrataron hace seis meses, anda con problemas económicos. Fue extraño
cómo lo hicieron rehén y más extraño cómo lo soltaron. Nunca se mostró demasiado
conmovido con la situación, explicó a este diario un importante funcionario del
gobierno bonaerense.
La sola existencia de esta hipótesis muestra una cuota significativa de delirio
persecutorio e irrealidad: detrás de todo está Yabrán y, por extensión, la Casa
Rosada. La evidencia no es una serie de elementos fundados sino un empleado de una de las
ex empresas del fallecido papimafi.
La segunda hipótesis también es asombrosa, pero encierra el diagnóstico adelantado por
Página/12 horas después del siniestro desenlace de Ramallo. Según los hombres del
gobierno bonaerense, una semana antes del asalto, el entonces ministro de Justicia,
Osvaldo Lorenzo convocó a una reunión de la que participaron unos 40 jefes policiales.
El encuentro estaba dedicado al análisis de la seguridad bancaria y, de pronto, Lorenzo
lanzó una afirmación llamativa: en una semana vamos a pegar un golpe. Siete
días más tarde hubo tres asaltos a bancos en la misma jornada. La teoría es que
buchones policiales motivaron a las bandas para que realicen los asaltos, los hombres de
la Bonaerense ya tendrían la respuesta preparada y de esa forma se mostraría una
efectividad espectacular. Así la gente iba a notar las diferencias entre la gestión de
Lorenzo y la de su antecesor, León Arslanian. Pero en Ramallo las cosas fallaron porque
los delincuentes tomaron los rehenes y todo se complicó.
En La Plata muestran ahora una increíble desconfianza hacia Lorenzo, su ex ministro
estrella: estaba loco, argumentan. Más allá de ese diagnóstico, los dichos
de los funcionarios bonaerenses del máximo nivel ponen sobre el tapete la versión de que
la banda llegó al banco impulsada por policías. Un integrante de la Bonaerense
pasó el dato para hacer el robo, dice E.P. (ver nota central): esto significa
que les dijeron que encontrarían 500.000 pesos, que la reacción sería tardía y que
tendrían cobertura en el asalto. Hay otros datos que también se suman, algunos son
conocidos y otros inéditos hasta el momento:
u E.P. confirma que había un handy y que un policía había pasado la frecuencia policial
y los códigos para acceder a comunicaciones con alguien de la fuerza. El handy
desapareció.
u Página/12 reveló hace varios días que los delincuentes habrían tirado un arma larga
en su huida. E.P. dice que era una Itaka.
u Fuentes de la investigación le contaron ayer a este diario que uno de los números de
teléfono que tenía Saldaña en su bolsillo era de un oficial del GEO de San Nicolás.
Como se sabe, el delincuente que apareció ahorcado en su celda, insólitamente tenía
--no lo habían revisado una lista de aproximadamente diez teléfonos. El número
del GEO es un nuevo dato que apunta a la conexión policial.
u La misma fuente contó a este diario que los delincuentes llevaron al asalto un
teléfono celular, además de apropiarse de otro perteneciente a uno de los rehenes. Desde
ese teléfono se hizo una llamada pocos minutos después del inicio del asalto. Parece que
esa comunicación se estableció con una letrada relacionada con la Bonaerense.
u La propia muerte de Saldaña dentro del calabozo hace parecer más que verosímil la
versión de que se lo quería silenciar.
u Respecto del tiro del final, hay un GEO que reconoce que él efectuó el disparo, pero
dice que se le escapó. En principio, ese proyectil impactó en el otro delincuente
muerto, Javier Hernández.
Hay entonces nutridos indicios que apuntan nítidamente a que fueron policías los que
llevaron a los delincuentes hacia el banco.
Sin embargo, con los datos a la vista, no se puede afirmar que Ramallo fue un complot
policial para boicotear la campaña electoral de Eduardo Duhalde. Lo fundamental no fue
cómo los delincuentes entraron en el banco ni por qué intentaron el asalto, sino la
salida del banco y la masacre ocurrida entonces. Y en esto de acuerdo con lo que se
sabe, lo que primó fue la habitual actuación de la Bonaerense. Pusieron sobre el
terreno una cantidad delirante de efectivos; intervinieron cuatro grupos diferentes de la
fuerza y mostraron el gatillo fácil de siempre: los Halcones dicen que tiraron a las
gomas, pero los disparos fueron más arriba o más abajo, los GEO y los demás efectivos
tiraron a matar.
¿Fue esto un accidente? De ninguna manera. Emergió la forma de actuación de una
policía que surgió con la dictadura, creció con el radicalismo y se desarrolló hasta
extremos insospechados durante el gobierno de Duhalde. No es una policía orientada a dar
seguridad ni a actuar con eficiencia, sino una fuerza que se dedicó durante décadas a
compartir los negocios con los delincuentes. En Ramallo, todo indica que los llevaron al
banco y los acribillaron a la salida.
Indignación y vergüenza en la Plaza de
Mayo
Cientos de personas, judías y no
judías, creyentes y no creyentes participaron en el acto convocado por los rabinos de Bet
El en repudio por la profanación de tumbas de niños en el cementerio israelita de
Liniers.
Los rabinos Daniel Goldman y Mario
Rojzman con los Rollos de la Torá.
Los antisemitas siguen actuando con total impunidad. |
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Por Luis Bruschtein
Ayer fue Shimjá
Torá, una festividad judía que celebra la primera lectura del año de los libros
sagrados. Es una fiesta alegre con música y danzas en los templos. Pero el día de
festejo se transformó en una marcha alrededor de la Pirámide de Plaza de Mayo. Un acto
de repudio y de pesar por la profanación de las tumbas de niños en el cementerio de
Liniers a sólo doce días del ataque al cementerio israelita de La Tablada. Diez rabinos
de la comunidad Bet El marcharon con los Rollos de la Torá para expresar el sentimiento
de una comunidad que se ha convertido en el blanco de ataques, obligada a vivir en el
temor, a rodearse de medidas de seguridad, una comunidad que se ve segregada del resto de
la Argentina por la violencia y el temor. Pero también había personas de otros cultos y
no creyentes con la misma indignación y vergüenza.
Los rabinos tendríamos que estar festejando en los templos con la Torá dijo
a Página/12 el rabino Mario Rojzman pero después de lo que pasó, entendimos que
debíamos sacar la Torá a la calle para reclamar lo que dice el Libro: Justicia, Justicia
perseguirás.
La Pirámide de Mayo, que todos los jueves acoge a las Madres, ayer a las 20 horas fue
escenario de otra ronda de silencio, de pesar y de rabia. En vez de los pañuelos,
centenares de personas que asistieron pese al frío y a la celeridad de la convocatoria,
llevaban el quipá en sus cabezas. Se hizo primero un minuto de silencio y luego comenzó
la ronda.
Entre la gente marcharon también Simón Lázara, de la Asamblea Permanente por los
Derechos Humanos, Perla Wasserman, Madre de Plaza de Mayo, el candidato justicialista a
diputado Jorge Telerman, el candidato a presidente por el socialismo popular Domingo
Quarracino, y Patricio Echegaray y Pablo Resels, de Izquierda Unida. También estuvieron
la escritora Aída Bortnik, el cineasta Bebe Kamin y el cantautor Jorge Schusshein.
La convocatoria fue decidida por los rabinos de Bet El el viernes, cuando apenas se
conoció la noticia de las profanaciones en el cementerio de Liniers. Casi no hubo tiempo
de organizar el acto, la gente se enteró por los diarios y por una cadena de persona a
persona y, sin embargo, había casi más asistentes que en los dos actos que se efectuaron
la semana pasada por el ataque al cementerio de La Tablada.
Los judíos de la Argentina hemos modificado nuestros hábitos cotidianos
leyó el rabino Daniel Goldman, expresando la indignación de la comunidad
judía. Nuestros hijos no van a la escuela con la misma paz. En nuestros templos no
se reza con la tranquilidad que la plegaria demanda. Los judíos de este país estamos
absolutamente indefensos frente a la furia de los genocidas. Los pilotes en los frentes de
los edificios, las guardias en las puertas, y el alerta permanente no son la
solución.
El rabino recordó que no se resolvieron los casos vinculados a los atentados terroristas
más graves que sufrió la comunidad judía después del Holocausto y subrayó que hace
sólo doce días que se produjo el ataque al cementerio israelita de La Tablada. La
profanación de tumbas de niños en el cementerio israelita de Liniers es la prueba que
faltaba para demostrar que la comunidad judía en la Argentina es la más vulnerable e
indefensa del mundo.
La declaración de los rabinos de Bet El que leyó Goldman junto a la Pirámide de Mayo
señala que para nosotros, los principales sospechosos de este nuevo golpe al
igual que los atentados anteriores no son nazis subterráneos, ni clandestinos, ni
fuerzas esotéricas que vienen de Medio Oriente, sino que son aquellos que superviven en
el aparato del Estado. Exigimos una investigación seria y el castigo.
Pero también hay una advertencia que equipara de hecho a la Argentina con algunos de los
actos más vergonzosos de la humanidad: La experiencia histórica judía
afirma enseña que sociedades que fueron permisivas en la violencia hacia sus
minorías, generaron la expulsión de ellas de suspaíses, y terminaron denigrando la
dignidad humana. Esa experiencia indica que el antisemitismo empezó siempre así,
buscando chivos expiatorios para otros conflictos de la sociedad y terminó
convirtiéndose en un fin alocado en sí mismo. El espectáculo de ver a una parte de los
argentinos segregados por la violencia y el temor dejó de ser una especulación para el
futuro, ya es una realidad vergonzosa.
Hay cientos de objetivos El ministro del Interior, Carlos Corach, aseguró ayer que no le cabe
duda de que los ataques contra cementerios judíos de la provincia de Buenos Aires
están relacionados con la campaña electoral y coincidió con el ministro de Justicia y
Seguridad bonaerense Carlos Soria, a que apuntan específicamente a dañar la imagen de
Eduardo Duhalde.
El candidato presidencial del justicialismo confirmó por su parte que la Justicia
investiga si la nueva profanación de tumbas cometida ayer en el cementerio israelita de
Liniers fue realizada por jóvenes que actuaron por su cuenta o que fueron
mandados a perpetrar el hecho.
El gobernador admitió que la policía bonaerense estaba alertada sobre un nuevo atentado
tal como el que ocurrió la semana pasada en el cementerio de La Tablada, pero justificó
la falta de vigilancia ya que hay cientos de objetivos, cualquiera puede ser un
objetivo, y no se pueden cubrir todos.
El candidato de la Alianza, Fernando de la Rúa condenó ayer la profanación de tumbas de
niños e instó al gobernador bonaerense a que se ocupe de lo que está
pasando porque existe un altísimo índice de inseguridad en la provincia de Buenos
Aires.
La organización judía BNai B Rith Internacional, a través del presidente de
la entidad, Richard Heideman le reclamó al presidente Carlos Menem el esclarecimiento de
este hecho así como también encontrar a los responsables de los atentados a la Embajada
de Israel y a la AMIA. |
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