Por I.H. La Alianza quiere desarticular la mayoría
automática de cinco ministros de la Corte que complacieron con sus votos la gestión
menemista. Pero no se trata de un simple trámite. Pese a estar frente al alto tribunal
que más pedidos de juicio político tuvo en la historia argentina, nadie piensa en una
salida violenta frente a ministros que gozan de estabilidad constitucional y dado que el
justicialismo tiene mayoría en el Senado (el encargado de las designaciones y remociones
de los ministros). Descartada la vía de la destitución, entonces la única que
queda es negociar, y convencer a Menem, claro, señaló a Página/12 un operador del
radicalismo. En la Alianza, al parecer, se contentarían con que se vaya al menos uno de
los jueces oficialistas. Podrían ser Guillermo López, Adolfo Vázquez, o Antonio
Boggiano, puntualizan. Según pudo saber este diario, Enrique Coti
Nosiglia es quien dialoga con el presidente de la Corte, el riojano Julio Nazareno y con
Eduardo Moliné OConnor. Les propone no molestarlos a cambio de
darle un buen destino a alguno de la mayoría adicta a Menem. Es poco probable
que Boggiano se vaya. El juez anhelaba un cargo en el Tribunal Internacional de La Haya
pero, al parecer, el sistema de rotación prioriza que ingresen otros países, ya que la
Argentina tuvo como ministro allí a José María Ruda durante muchos años. Ni López ni
Vázquez se quieren ir, pero tal vez tengan que negociar. Sobre todo porque
traicionaron a Eduardo Duhalde a quien prometieron fidelidad a través
del ex juez Alberto Piotti en casos como el conflicto político de Formosa. En el
Frepaso recuerdan que la designación de Vázquez, en 1995, fue escandalosa y podría
motivar que se pida su cese en el cargo. Su pliego fue aprobado sin el dictamen
reglamentario de la Comisión de Acuerdos y sin que pasaran los siete días hábiles para
presentar impugnaciones. Esa salida tiene pocos adeptos ya que pondría en
duda la validez de las acordadas que Vázquez firmó durante estos años. Si se produce la
baja, rápidamente habrá reemplazo. La lista no es larga: u Juan Octavio Yuyo
Gauna es un abogado radical de extracción angelocista que fue secretario del Gobierno de
la Ciudad cuando De la Rúa fue elegido jefe del gobierno porteño. u Jorge Vanossi es el
constitucionalista que compitió, y perdió, con Graciela Fernández Meijide por la
senaduría nacional por la Capital Federal. Tras esa elección, las relaciones de Vanossi
y De la Rúa quedaron deterioradas, pero los triunfos como el del domingo
pasado suelen cicatrizar hasta las heridas más profundas.u Gregorio Badeni es
constitucionalista. Cercano al radicalismo, Badeni ha expresado públicamente su ideario y
se ha mostrado refractario a los escraches que realiza la agrupación HIJOS a torturadores
y asesinos, a los que considera agraviantes y pasibles de
sanciones.u Jorge Bacqué ya fue ministro de la Corte Suprema, a la que renunció en
oposición a su ampliación, de cinco a nueve miembros, con la cual Carlos Menem la
transformó en un apéndice de su Gobierno. El regreso del actual titular del Colegio de
Abogados al tribunal supremo es impulsado por el Frepaso.
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