Por José Natanson
Desde Mar del Plata Decidido a pelear por la jefatura de gobierno porteño, Domingo
Cavallo parece convencido de que la solidez económica no alcanza para despertar las
simpatías del exigente electorado de la Capital. Por eso, el discurso que pronunció ayer
en el coloquio anual de IDEA incluyó cuestiones que exceden su área de influencia
natural. Claro que, más allá de los tópicos, el enfoque sigue siendo el mismo: en
cuanto a la política educativa, por ejemplo, Cavallo se mostró a favor del
arancelamiento universitario. Hay que financiar la educación desde la
demanda, dijo el diputado ante unos 500 empresarios que aplaudieron con ganas al
político que más quieren.
Los empresarios reunidos por IDEA esperaron, con una larga serie de actividades y paneles,
la presencia de Cavallo, el plato fuerte de la jornada de ayer. El diputado llegó a las
ocho de la noche al Hotel Sheraton. Parecía contento. Estaba, al fin y al cabo, en un
lugar en el que se sabe apreciado. Saludaba a los empresarios que se acercaban y al mismo
tiempo respondía a las preguntas de los cronistas. Tenemos que hacer esfuerzos para
ayudar a la gobernabilidad, decía un Cavallo que con el paso del tiempo se ha
vuelto cada vez más político.
Sus asesores, mientras tanto, se mezclaban con los empresarios. El hijo (y el rejuvenecido
clon) de Cavallo, Eduardo, quien adquirió un fugaz perfil público durante la campaña,
charlaba con un ejecutivo petrolero. Cerca de él estaba el dirigente cavallista Luis
Murina, quien llegó a Mar del Plata con el secreto objetivo de recaudar fondos para la
pelea porteña. En la otra punta del lobby, entre el humo de los cigarros empresarios, se
veía a Santiago Montoya, ex jefe de la campaña presidencial y futuro jefe de los equipos
para la próxima batalla: la de la jefatura de gobierno porteño.
Es que, luego de obtener más del diez por ciento de los votos en los comicios del 24,
Cavallo ratificó su decisión de disputar la sucesión de Fernando de la Rúa, que
probablemente se elija en marzo o abril del año que viene. Para ello deberá enfrentarse
con el frepasista Aníbal Ibarra y con su ex aliado Gustavo Beliz.
Una vez instalado en el estrado, cuando los empresarios ya se habían sentado para
disfrutar de la cena, Cavallo hizo una de las cosas que mejor le salen: decir lo que el
establishment quiere escuchar. En los últimos 16 años hemos alcanzado la
estabilidad política y económica, dijo el Cavallo economista, quien luego se
despachó con una larga explicación técnica sobre las causas de la devaluación del
real. Hasta que llegó el Cavallo político. Nos quedan muchas cosas por conquistar.
Tenemos una universidad pública maniatada por leyes que le ponen limitaciones. Hay que
abandonar el sistema de financiación desde la oferta para comenzar a financiar la demanda
a través de un sistema de becas para los estudiantes de bajos recursos. Así, el resto
podría aportar y elevar la calidad de la educación, aseguró el diputado. Y
enumeró las reformas necesarias para el sistema de salud y para el gasto social.
Los empresarios lo aplaudieron con fuerza. La reunión anterior de IDEA, la de 1998,
reunió a los dirigentes que asomaban como los futuros presidenciables, entre los que
Cavallo fue elegido como el más confiable. El panorama político, que en ese momento
aparecía confuso, hoy ya está definido, lo que le permitió a IDEA organizar con
claridad el coloquio: Fernando de la Rúa hablará hoy por la noche. Y mañana será el
turno de Carlos Chacho Alvarez y José Manuel De la Sota. El cierre quedará a
cargo de Carlos Menem.
Ruckauf pegó el faltazo La idea original era que ayer hablara el gobernador electo de la provincia de
Buenos Aires. Sin embargo, el justicialista Carlos Ruckauf no quiso interrumpir su
período de descanso antes de su asunción el diez de diciembre y faltó a la cita. Según
los rumores que se transmitían de boca en boca en los pasillos del Sheraton, los
organizadores decidieron reemplazarlo por el vicegobernador electo, Felipe Solá. Aunque
el ex secretario de Agricultura aceptó en un principio la invitación, finalmente la
canceló sin mayores explicaciones. La versión que circulaba ayer entre los empresarios
reunidos por IDEA era que el ex funcionario había recibido un llamado de Ruckauf
ordenándole no participar del coloquio. El vicepresidente según estas
versiones tomó nota de la molestia de Eduardo Duhalde, quien estaría fastidiado
por no haber sido invitado a la reunión. El gobernador justicialista que sí participará
será el cordobés José Manuel de la Sota, quien expondrá ante los empresarios el
viernes por la mañana. |
|