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Por Felipe Yapur El pretexto de la convocatoria fue la exigencia legal de renovar las autoridades partidarias: si no lo hace, el PJ bonaerense puede perder su personería jurídica. Es por eso que ayer el Consejo Justicialista de la provincia de Buenos Aires, presidido por el todavía gobernador Eduardo Duhalde, resolvió convocar a elecciones internas para fines de diciembre. Sin embargo, algunos consejeros duhaldistas consultados por Página/12 afirmaron que la verdadera causa de la apresurada convocatoria está relacionada con las aspiraciones de Duhalde a mantener su hegemonía en el distrito para evitar un posible desembarco menemista y hasta para poner un freno al avance de algunos dirigentes que ya se están encolumnando detrás de Carlos Ruckauf.Los comicios se realizarán el 19 de diciembre y a pesar de que todavía quedan algunos días para la presentación de las listas el plazo vence el 26 de noviembre, ni los duhaldistas ni los hombres que ya caminan los pasillos del ruckaufismo tienen intenciones de conformar listas por separado. Coinciden, pero cada sector tiene sus propias motivaciones.El duhaldismo tiene que rearmarse. La derrota del 24 de octubre es para Duhalde una herida que tardará en cicatrizar. Por ahora tiene todavía algunos intendentes que le son incondicionales, como el caudillo de Tres de Febrero, Hugo Curto. Pero hay otros que, si bien todavía visitan su tienda, ya miran con atención los movimientos de Ruckauf. El actual gobernador de Buenos Aires necesita del mandatario electo que por ahora le prometió el manejo del PJ bonaerense. Y está cumpliendo, como sostienen los operadores de Duhalde. Con el partido en su poder, Duhalde pretende frenar cualquier intento de desembarco del menemismo en los pagos bonaerenses. El nivel de la preocupación del gobernador se notó ayer cuando concluyó la reunión del Consejo. Contrariando su costumbre de desaparecer una vez que todo termina, Duhalde decidió quedarse conversando con los consejeros. Se nota que es otra la actitud, porque también es otra la necesidad que tiene el Negro (por Duhalde). ¡Cómo se ve que está en el llano!, comentó uno de los consejeros que ahora está más cerca del mandatario electo.En tanto, a Ruckauf le conviene que Duhalde mantenga las riendas del partido, con un PJ ordenado, que responda a las necesidades del presidente del partido y apoye la gestión del gobernador. Con Ruckauf en el gobierno y con una buena gestión durante el primer año, ya no será tan importante que sea Duhalde o cualquier otro el presidente del PJ. Todos saben que, con una buena gestión sobre las espaldas, el que manda es el gobernador, aseguró a este diario el operador de un legislador peronista que suele encontrarse muy seguido con el gobernador electo.Con todas estas hipótesis sobre la espalda, los consejeros justicialistas se reunieron ayer en la localidad de Burzaco. El pretexto fue que el juez federal con competencia electoral, Manuel Blanco, le exige al PJ la definición de las nuevas autoridades antes de que caduque su mandato el próximo 20 de diciembre. La única oposición que se escuchó en el encuentro fue la que presentó el ultramenemista Alberto Lestelle. El ex secretario de Lucha contra el Narcotráfico se quejó por la fecha que se eligió para ir a las urnas porque, advirtió, va a profundizar un crac político en la provincia. Y añadió que muchos dirigentes del justicialismo bonaerense van a pensar que se trata de un asalto al poder esto de llamar a elecciones sólo 40 días antes. Pero su queja no encontró el eco esperado. Es más, fue el propio Duhalde el que le respondió al menemista al enfatizar que en el justicialismo no va a haber ningún crac debido a que en un 95 por ciento (el PJ) está unido.
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