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La Alianza bloqueó una maniobra
del PJ para birlar otro senador

El peronismo sanjuanino había elegido ayer a quien pretende que sea el sucesor de la banca de Avelín, electo gobernador de San Juan. Pero la coalición interpuso un pedido en la Justicia, que fue aceptado. La guerra de los plazos y la asunción del futuro mandatario.

Alfredo Avelín asumiría a la medianoche para no dejar vacante su escaño en el Senado nacional.

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Por F.A.

t.gif (862 bytes)  El justicialismo de San Juan quiere poner a un hombre de su partido en la banca que dejará vacía en el Senado el aliancista Alfredo Avelín, cuando el 10 de diciembre asuma como gobernador de la provincia. La Alianza logró ayer bloquear –al menos por el momento– el intento al impugnar la designación del candidato a reemplazar a Avelín, Dante Elizondo. El PJ hará todo lo posible para sumar un hombre más a su bancada y lograr un cómodo quórum propio en el cuerpo, ahora que pasará de ser oficialismo para convertirse en oposición.
En la madrugada de ayer, el Consejo Provincial del Justicialismo nominó a Elizondo, actual diputado provincial, como candidato a senador nacional para ocupar la banca por San Juan, que dejará vacante Avelín cuando asuma como gobernador. Durante la sesión secreta del máximo órgano partidario provincial, Elizondo se impuso a otro de los aspirantes a ocupar un despacho en el Congreso nacional, Julio “Tito” Montaña.
El nominado es un hombre que responde a la línea que lidera el senador José Luis Gioja, que quiere desplazar a Jorge Escobar de la conducción partidaria del peronismo sanjuanino.
“Esto es un atropello a la Constitución, que en su artículo 62 deja muy en claro que no se puede elegir a un senador para reemplazar a otro que aún no ha renunciado a su banca. Y, que yo sepa, todavía no he renunciado”, aseguró ayer ofuscado Avelín. El gobernador electo es el hombre que el frente de una alianza de partidos nacionales y provinciales dejó sin “re-re” a Escobar, el hombre de Carlos Menem que perdió las elecciones anticipadas en San Juan.
Con la derrota, el PJ perderá el 10 de diciembre la mayoría que ostenta en la Legislatura provincial. Y es por eso que el justicialismo quiere aprovechar sus últimos días de supremacía política para designar ahora al senador que reemplazará a Avelín cuando éste deje el Congreso para convertirse en gobernador. Después de la renovación en la Legislatura provincial, el PJ será minoría y sólo le corresponderá una banca en la Cámara alta, que ahora ocupa Gioja. Y tampoco le alcanzarán los votos para imponer a un hombre de su partido.
“Vamos a hacer todo lo que esté dentro de la ley para evitarlo”, aseguró a Página/12 uno de los apoderados de la Alianza sanjuanina, Miguel Arancibia. Entre los primeros pasos de los representantes legales de la coalición figuró presentar un recurso de amparo ante Miguel Angel Gálvez, juez federal con competencia electoral de San Juan. Gálvez, que fue dirigente del justicialismo provincial, se declaró incompetente para determinar en el caso, y rechazó el amparo y la medida de no innovar impulsada por bloquistas y renovadores. De esta manera, la Alianza apelará ante la Justicia Electoral Nacional, donde espera encontrar eco a sus reclamos.
“Ahora nos metimos dentro del expediente del PJ al hacer notar que, según indica la Constitución, para que la Justicia autorice a la Legislatura a designar un nuevo senador se tiene que producir primero la vacancia en la Cámara alta, lo que no ha sucedido, ya que Avelín sigue en su cargo”, agrega Arancibia.
El propio Avelín aventura que “esperemos que esto se resuelva en el marco de la provincia, porque, si llega hasta la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado, tenga por seguro que estamos perdidos: acá, el PJ mete senadores por la ventana, por la chimenea y por cuanto agujero encuentre en su particular interpretación de la ley”.

 


 

OCHENTA Y TRES MINISTROS FRENTE A SARMIENTO
El álbum de la reconciliación

Por Nora Veiras

t.gif (862 bytes) ”Voy a cumplir con este sueño de reconocer a los ciudadanos argentinos que ocuparon el Ministerio de Educación. Habilito esta sala con el propósito de reconciliación que el presidente Carlos Menem impregnó a su gestión.” Manuel García Solá se dio el gusto ayer de inaugurar “El salón de los ministros” en el primer piso de la cartera educativa. Como una metáfora de la historia, los ochenta y tres pequeños retratos de sus antecesores quedaron enfrentados al inmenso óleo de Domingo Faustino Sarmiento. Entre los homenajeados se mezclaban el peronista Jorge Taiana, quien fue ministro en el gobierno de Héctor Cámpora, con uno de los personeros de la dictadura, Ricardo Bruera. Susana Decibe repudió la idea.
–¿Usted no se priva de nada? –le comentó Página/12 a un secretario de Estado.
–¡Cómo no voy a estar en un homenaje a Jorge Taiana! –retrucó el funcionario.
–Y a Bruera.
–Uno siempre hace un recorte de las cosas –justificó el hombre para explicar la amable convivencia en el mismo salón con el ministro que ejecutó el Operativo Claridad que, durante la gestión de Jorge Videla, implicó la persecución de miles de docentes y estudiantes.
“Estoy conmovido y me siento muy pequeño, muy pequeño, al lado de semejantes personalidades... como Taiana. Es siempre difícil olvidar a quien en la vida de uno ha incidido tanto: en los ‘70 luchábamos por lo que logramos en los ‘90”, dijo el ministro menemista. Lo escuchaban atentos sus antecesores Antonio Salonia y Jorge Rodríguez, actual jefe de Gabinete. Haciendo caso omiso también al rigor del almanaque, García Solá distinguió “a mi amigo de la infancia, Salonia” y le agradeció a Rodríguez porque “él es responsable de que yo esté en este puesto de lucha”.
Mientras en el apretujamiento y el calor del estrecho salón los corrillos sólo se preocupaban por saber el nombre del futuro ministro de la Alianza, Rodríguez se dedicó a reivindicar la Ley Federal de Educación y el Plan Social. Taiana agradeció el reconocimiento y pugnó por que “la educación sea un instrumento de transformación”.
“Cuando el martes volvamos con el presidente del Vaticano, seguramente ya estará el nombre de mi sucesor”, comentó García Solá, satisfecho de haber colgado en las paredes los retratos en blanco y negro de sus antecesores. Sólo Bruera, el radical José Gabriel Dumón, Salonia, Rodríguez y Susana Decibe –ausente en la ceremonia– quedaron enmarcados en color.
En diálogo con Página/12, Decibe repudió la decisión porque “no corresponde llenar las paredes de un espacio público con fotos de funcionarios, algunos totalmente intrascendentes.
Además hay que tener las vísceras para poner a los ministros de la dictadura, que tienen bajo sus conciencias varios cientos de detenidos-desaparecidos. Espero algún acto de reflexión para que saquen eso de las paredes”.
“El Estado tiene continuidad jurídica. Es un reconocimiento al trabajo de todos los ciudadanos que ocuparon ese cargo”, dijo García Solá.
–¿Cuál fue el trabajo que hicieron los ministros de la dictadura?
–Desde el punto de vista de la responsabilidad funcional fueron ministros del Estado nacional y yo me inscribo en el espíritu de reconciliación del presidente Menem.

 

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